Seguridad vial: 53 muertes en 37 días ponen en duda la estrategia y cultura ciudadana

Mientras este artículo estaba en proceso de redacción, un motociclista perdió la vida cerca al puente de Guadua en la calle 80. Durante las 48 horas anteriores a este suceso, un bebé en coche fue atropellado por un motociclista mientras sus padres cruzaban una calle; una periodista de radio que iba a bordo de una moto de servicio de transporte Picap, salió expulsada tras un choque del cual casi pierde la vida; y en otro episodio nocturno, un taxista en presunto estado de embriaguez, se llevó por delante a dos mujeres, de las cuales una murió.

Mientras este artículo estaba en proceso de redacción, un motociclista perdió la vida cerca al puente de Guadua en la calle 80. Durante las 48 horas anteriores a este suceso, un bebé en coche fue atropellado por un motociclista mientras sus padres cruzaban una calle; una periodista de radio que iba a bordo de una moto de servicio de transporte Picap, salió expulsada tras un choque del cual casi pierde la vida; y en otro episodio nocturno, un taxista en presunto estado de embriaguez, se llevó por delante a dos mujeres, de las cuales una murió.

En Bogotá, en los primeros 37 días del año, 53 personas murieron en las vías capitalinas, una problemática que demuestra un fallo social, de infraestructura vial, pero también institucional. ¿Qué pasa? ¿Por qué Bogotá va perdiendo la batalla contra la siniestralidad vial?

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¿Cómo está el panorama?

Para José Stalin Rojas, director del Observatorio de Movilidad y Logística de la Universidad Nacional, las muertes por siniestro viales se están convirtiendo en una suerte de pandemia. Y es que, en 2023, murieron 8.405 personas en accidentes viales en todo el país. En promedio 23 casos diarios a nivel nacional. La capital, con 621 muertes, es la tercera urbe con mayor siniestros mortales, después de Antioquia (1.039) y Valle del Cauca (913), según el reporte anual de la Agencia Nacional de Seguridad Vial. Los siniestros son la segunda causa de muerte en Bogotá, seguida del homicidio.

Si revisamos el detalle de los casos en la capital, llama la atención que, en los últimos dos años, los motociclistas encabezan la lista de muertes en vías, cuando en 2022 eran los peatones quienes aportaban el 37 % de muertes en las calles. Para 2023 y principios de 2024, los moteros representan el 43,4% de muertes.

Entre enero y febrero 6 de 2024, se registraron 53 muertes. 21 fueron motociclistas; 6 ciclistas; 5 conductores; 2 peatones; y 2 pasajeros. En 2023, el mes con mayor cantidad de siniestros fue junio, con 66 muertes. En cuanto al día en qué más se presentó fallecidos fue el sábado, con 113 a lo largo del año pasado, seguido de viernes (98) y domingo (95). Las horas en las que ocurrieron más accidentes fue de 3:00 a.m. a 6:00 p.m.

“En las muertes y accidentes en la vía influyen aspectos relacionados con el automóvil (mecánicos, frenos), infraestructura y contexto físico (estado de las vías, iluminación), pero también aspectos humanos como distracción del conductor, exceso de velocidad, imprudencia al conducir”, señaló Stalin a este diario.

Luis Ángel Guzmán, docente de Los Andes, ha liderado diversos estudios de movilidad. En los más recientes encontró que la relación edad-experticia es un factor que incrementa las probabilidades de accidentes viales. “Las probabilidades más altas (60%-80%) de ocurrencia de un siniestro con lesionado son mayores después de las 10:00 p.m., especialmente para personas con experiencia menor a 60 meses. Los siniestros fatales tienen una mayor probabilidad de ocurrir (cerca al 3%) entre las 22h y las 5h comparando con las demás horas del día. También se encontró que los jóvenes menores de 23 años tienen una mayor probabilidad de siniestrarse en la noche”, señaló. En contraste, en 2023, el rango de edad con más víctimas es de hombres entre los 25 y 30 años, con 75 casos. De hecho, los hombres representan el 76,8 % de las muertes totales en la capital.

“No tenía que pasar” … Pero pasó

La Secretaría de Seguridad ha liderado campañas para disminuir las muertes en vías. Pero, parece, la campaña “No tenía que pasar”, contemplada en el Plan Distrital de Seguridad Vial 2017-2026, aún no da buenos resultados. Incluso bajo el enfoque ‘Visión Cero’ del Distrito, se ha intentado contener el fenómeno.

Julián Forero, conocido como “Fuchi”, líder motero y concejal más votado, le ‘jaló’ las orejas al Distrito y avanza en nuevas políticas para hacerle frente a la situación. “La administración anterior no hizo nada para mitigar la siniestralidad. Es una problemática de la que todos hablan, pero nadie hace nada. De 2022 a 2023 hubo un aumento de 10,2 % en los comparendos (más de un millón quinientos) y la siniestralidad aumentó también. Conclusión: el Distrito se preocupa más por sancionar que por prevenir y realizar campañas. Nosotros, por ejemplo, trabajamos promoviendo el cambio de cascos y reuniéndonos con el Acueducto y el IDU para revisar la malla vial”, dijo a El Espectador.

“Desde hace tiempo se viene hablando de la ‘Visión Cero’, pero este enfoque no ha permeado a las instituciones, ni a la ciudadanía, entonces, o debe relanzarse o debe cambiarse. Desafortunadamente, el Gobierno Nacional no le ha puesto la debida atención a este fenómeno. Hemos tenido tres directores de la ANSV en este año y medio de Gobierno”, apuntó Stalin.

Guzmán cierra diciendo que, aunque la ley todavía no está estructurada para prevenir siniestros, “sin control en la calle se quedan cortas las medidas. Hay que repensar los precios del uso de la moto e incidir en la cultura ciudadana”.

El panorama está claro, así como la necesidad de que los diferentes actores viales se vean envueltos en una estrategia integral que incida positivamente en la reducción de las muertes en las calles capitalinas.

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