Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Tras una orden de la Fiscalía General de la Nación, la Policía capturó anoche al presunto líder de la llamada “Primera Línea” de la localidad Suba por hechos de vandalismo y terrorismo durante las manifestaciones que se presentaron en esa zona de Bogotá en el paro nacional iniciado en abril pasado.
Lea: Comerciantes de San Victorino piden acompañamiento, marchas 28 de octubre y otras noticias de Bogotá
El sujeto es señalado por las autoridades en medio de la investigación que se adelanta por los desmanes y los ataque contra la fuerza pública presentados en la capital, por lo cual será presentado ante un juez con función de control de garantías para imputarle los delitos de terrorismo, daño en bien ajeno, tentativa de homicidio, perturbación al transporte público y concierto para delinquir.
Según la investigación, el capturado habría dirigido ataques contra la infraestructura del Portal Suba y los miembros del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad).
Le puede interesar: Ratifican casa por cárcel a hombre que quemó a su pareja por no lavar los platos
Sin embargo, hubo otra persona capturada en esa localidad por los mismos hechos, de acuerdo con información que entregó la Fundación para la Libertad de Prensa (Flip) a través de sus redes sociales, en las que aseguró que los dos jóvenes capturados son periodistas del medio alternativo de comunicación “Z11 Suba” que realizó cubrimiento del paro nacional.
#AlertaFLIP | Desde la FLIP expresamos nuestra preocupación por la captura de los periodistas Jonathan Cortés y Karo Cepeda, del medio @Z11Suba, llevada a cabo por la @PoliciaColombia en cumplimiento de una orden de captura de la @FiscaliaCol.
— FLIP (@FLIP_org) October 28, 2021
Estamos documentando el caso. pic.twitter.com/x0Od6B3eiB
“Expresamos nuestra preocupación por la captura de los periodistas Jonathan Cortés y Karo Cepeda”, aseguró la organización, además de señalar que se encontraba documentando el caso.
La localidad Suba, junto a Kennedy y Usme, fue una de las que más afectaciones a la movilidad, seguridad y tranquilidad de sus habitantes presentó durante los meses en los que se extendieron las protestas de abril, mayo y junio, en los que se registraron enfrentamientos y desmanes.