Terna para elegir contralor de Bogotá: ¿faltó al principio de equidad de género?

El proceso para elegir al próximo contralor de Bogotá tuvo varias complicaciones, muchas derivadas de la emergencia sanitaria, pero por fin entró a su recta final y ya se conocen los ternados a ocupar el cargo. Esta semana será decisiva, pues los tres seleccionados tendrán un último examen ante el Departamento Administrativo de la Función Pública y luego la prueba final: la entrevista ante el Concejo, prevista para el próximo viernes 6 de noviembre. No obstante, puede que el proceso tenga un nuevo contratiempo, por cuenta de la advertencia que hace una de las aspirantes a ocupar la cabeza del ente de control fiscal en Bogotá.

La alerta tiene que ver con que la terna, conformada por Andrés Castro Franco, Héctor Julio Garzón Vivas y Jairo Alberto Páez Domínguez, no incluyó a ninguna mujer, a pesar de que había cinco que aprobaron las pruebas de conocimiento y estaban en el grupo final de 43 candidatos, que obtuvieron los mejores puntajes del proceso luego de consolidar los resultados del examen de conocimiento (60 %), la formación (15 %), la experiencia profesional (15 %), la docente (5 %) y la producción de obras en el ámbito fiscal (5 %).

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La concursante Adriana María Guzmán fue quien hizo la alerta. Por medio de una advertencia que envió al Centro de Investigaciones para el Desarrollo, de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional (encargada del proceso), pidió que se tuviera en cuenta el componente de equidad de género para la conformación de la terna que será entrevistada por el Concejo de Bogotá.

El reclamo de Guzmán se fundamenta en uno de los actos legislativos que reglamentan el proceso de selección de contralores en Colombia. Según reza uno de los incisos del artículo, “los contralores departamentales, distritales y municipales serán elegidos por las Asambleas Departamentales, Concejos Municipales y Distritales, de terna conformada por quienes obtengan los mayores puntajes en convocatoria pública conforme a la ley, siguiendo los principios de transparencia, publicidad, objetividad, participación ciudadana y equidad de género, para un periodo de cuatro años que no podrá coincidir con el periodo del correspondiente gobernador y alcalde.”

Es por ello, que la aspirante hizo un llamado a varias instancias como la Presidencia y la mesa directiva del Concejo, a la Vicepresidencia de la República, a la Consejería Presidencial para la Equidad de la Mujer, la Procuraduría General, la Defensoría del Pueblo, la Personería y Veeduría de Bogotá, para que hagan una mayor vigilancia y sean garantes de que se cumpla con el principio de equidad de género.

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En diálogo con este diario, Guzmán cuestionó por qué no se respetó ese principio, teniendo en cuenta que “siempre en estos procesos se invoca a la transparencia, objetividad, publicidad, participación ciudadana y, entre otras cosas, el tema de género. ¿Para qué invocan a cumplir unos principios, si a la hora del té es más de lo mismo? Siempre se espera que incluyan a una mujer en la terna, y muchas concejalas se comprometieron a ello, pero no fue así”.

Aunque espera que la advertencia tenga algún efecto, Guzmán manifestó que no descarta interponer una tutela para que se respete la equidad de género en el proceso. “No entiendo para qué invitan a jugar bajo unas reglas y principios. Tampoco sé para que se gastan tanto dinero si al parecer casi desde que empieza el proceso está dirigido”, dijo.

Ahora queda ver si en el transcurso de esta semana, alguna de las entidades a las que Guzmán elevó el llamado se pronuncia sobre el proceso, o si al final interpone alguna acción para que la justicia revise si en efecto hubo fallos en cuanto al cumplimiento del principio de equidad de género. En ese caso, el proceso podría tener un nuevo retraso que se sumaría a los que ya se han dado por cuenta de las demoras obligadas por la pandemia.

Vale recordar que el pasado 23 de septiembre, el Concejo de Bogotá reanudó el proceso de elección no solo de contralor, sino también de personero, que fue suspendido en marzo debido a las condiciones de la emergencia sanitaria que evitó que se realizaran las diferentes pruebas.

A eso se le suman los retrasos por cuenta de un error de forma que se cometió en la anterior administración y por la cual, el nuevo Concejo tuvo que reiniciar el proceso, por lo que la selección se retrasó y se tuvieron que nombrar a Rosalba Jazmín Cabrales y María Anayme Barón como personera y contralora encargadas, respectivamente, mientras se conocen las nuevas cabezas de los entes de control.

La elección de contralor ha tenido muchos ojos encima debido a que quien sea elegido tendrá la misión de vigilar la plata de grandes obras como el metro de Bogotá, el Corredor Verde de la Séptima, las nuevas troncales de Transmilenio, la PTAR Tunjuelo Canoas, entre otras. Por esto, un nuevo retraso sería una gran complejidad para el proceso, pues hasta este momento quien sea elegido solo tendrá algo más de dos años al frente de la entidad (desde el 9 de noviembre de 2020 hasta el 28 de febrero de 2022). Eso, teniendo en cuenta que el cargo es de periodo institucional y, por cuenta de los retrasos, ya se fue todo un año solo en la elección.

El proceso para elegir al próximo contralor de Bogotá tuvo varias complicaciones, muchas derivadas de la emergencia sanitaria, pero por fin entró a su recta final y ya se conocen los ternados a ocupar el cargo. Esta semana será decisiva, pues los tres seleccionados tendrán un último examen ante el Departamento Administrativo de la Función Pública y luego la prueba final: la entrevista ante el Concejo, prevista para el próximo viernes 6 de noviembre. No obstante, puede que el proceso tenga un nuevo contratiempo, por cuenta de la advertencia que hace una de las aspirantes a ocupar la cabeza del ente de control fiscal en Bogotá.

La alerta tiene que ver con que la terna, conformada por Andrés Castro Franco, Héctor Julio Garzón Vivas y Jairo Alberto Páez Domínguez, no incluyó a ninguna mujer, a pesar de que había cinco que aprobaron las pruebas de conocimiento y estaban en el grupo final de 43 candidatos, que obtuvieron los mejores puntajes del proceso luego de consolidar los resultados del examen de conocimiento (60 %), la formación (15 %), la experiencia profesional (15 %), la docente (5 %) y la producción de obras en el ámbito fiscal (5 %).

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La concursante Adriana María Guzmán fue quien hizo la alerta. Por medio de una advertencia que envió al Centro de Investigaciones para el Desarrollo, de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional (encargada del proceso), pidió que se tuviera en cuenta el componente de equidad de género para la conformación de la terna que será entrevistada por el Concejo de Bogotá.

El reclamo de Guzmán se fundamenta en uno de los actos legislativos que reglamentan el proceso de selección de contralores en Colombia. Según reza uno de los incisos del artículo, “los contralores departamentales, distritales y municipales serán elegidos por las Asambleas Departamentales, Concejos Municipales y Distritales, de terna conformada por quienes obtengan los mayores puntajes en convocatoria pública conforme a la ley, siguiendo los principios de transparencia, publicidad, objetividad, participación ciudadana y equidad de género, para un periodo de cuatro años que no podrá coincidir con el periodo del correspondiente gobernador y alcalde.”

Es por ello, que la aspirante hizo un llamado a varias instancias como la Presidencia y la mesa directiva del Concejo, a la Vicepresidencia de la República, a la Consejería Presidencial para la Equidad de la Mujer, la Procuraduría General, la Defensoría del Pueblo, la Personería y Veeduría de Bogotá, para que hagan una mayor vigilancia y sean garantes de que se cumpla con el principio de equidad de género.

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En diálogo con este diario, Guzmán cuestionó por qué no se respetó ese principio, teniendo en cuenta que “siempre en estos procesos se invoca a la transparencia, objetividad, publicidad, participación ciudadana y, entre otras cosas, el tema de género. ¿Para qué invocan a cumplir unos principios, si a la hora del té es más de lo mismo? Siempre se espera que incluyan a una mujer en la terna, y muchas concejalas se comprometieron a ello, pero no fue así”.

Aunque espera que la advertencia tenga algún efecto, Guzmán manifestó que no descarta interponer una tutela para que se respete la equidad de género en el proceso. “No entiendo para qué invitan a jugar bajo unas reglas y principios. Tampoco sé para que se gastan tanto dinero si al parecer casi desde que empieza el proceso está dirigido”, dijo.

Ahora queda ver si en el transcurso de esta semana, alguna de las entidades a las que Guzmán elevó el llamado se pronuncia sobre el proceso, o si al final interpone alguna acción para que la justicia revise si en efecto hubo fallos en cuanto al cumplimiento del principio de equidad de género. En ese caso, el proceso podría tener un nuevo retraso que se sumaría a los que ya se han dado por cuenta de las demoras obligadas por la pandemia.

Vale recordar que el pasado 23 de septiembre, el Concejo de Bogotá reanudó el proceso de elección no solo de contralor, sino también de personero, que fue suspendido en marzo debido a las condiciones de la emergencia sanitaria que evitó que se realizaran las diferentes pruebas.

A eso se le suman los retrasos por cuenta de un error de forma que se cometió en la anterior administración y por la cual, el nuevo Concejo tuvo que reiniciar el proceso, por lo que la selección se retrasó y se tuvieron que nombrar a Rosalba Jazmín Cabrales y María Anayme Barón como personera y contralora encargadas, respectivamente, mientras se conocen las nuevas cabezas de los entes de control.

La elección de contralor ha tenido muchos ojos encima debido a que quien sea elegido tendrá la misión de vigilar la plata de grandes obras como el metro de Bogotá, el Corredor Verde de la Séptima, las nuevas troncales de Transmilenio, la PTAR Tunjuelo Canoas, entre otras. Por esto, un nuevo retraso sería una gran complejidad para el proceso, pues hasta este momento quien sea elegido solo tendrá algo más de dos años al frente de la entidad (desde el 9 de noviembre de 2020 hasta el 28 de febrero de 2022). Eso, teniendo en cuenta que el cargo es de periodo institucional y, por cuenta de los retrasos, ya se fue todo un año solo en la elección.