Tras plantón, pactan acuerdo con la CAR para analizar intervención a ríos de la Sabana
El colectivo Voces del río convocó a un plantón frente a la sede de la Corporación Autónoma ante su rechazo a la adecuación hidráulica que se está realizando en los afluentes Chicú, Teusacá, Subachoque y Río frío. Se suspenderán las obras e instalarán mesa de trabajo conjunto.
A tres acuerdos llegó la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) con el colectivo “Voces del río”, que en la mañana del 11 de noviembre realizaron un plantón frente a la sede de la institución con el fin de rechazar las adecuación hidráulicas que se están realizando en los ríos Chicú, Teusacá, Subachoque, Río frío y la quebrada Aguas claras en Sutatausa, las cuales señalan están causando afectaciones ambientales irreparables.
Lea: Las inquietudes que dejan las intervenciones de la CAR en los ríos de la Sabana de Bogotá
En la reunión, que duró aproximadamente cinco horas, la Corporación se comprometió a detener los procesos de contratación para nuevas adecuaciones, así como suspenderá por unos días las obras en desarrollo, para revisar las fallas que aceptaron se están cometiendo, así mismo crearán una mesa de trabajo para evaluar las alternativas ante los daños causados. El encuentro, que contó con representantes de cada río, se reanudará este viernes 12 de noviembre.
Dentro de las solicitudes propuestas está la realización de los estudios de caracterización los ecosistémicas acuáticos y terrestres en la zona inundable, así como estudios de inundación y riesgo que abarquen el valle aluvial en las escalas que exige la ley para determinar la necesidad de estas obras y metodologías para prevenir daños.
En las obras que ya se realizan piden que se completen los estudios de caracterización ecosistémicas, geotécnicos, de valoración, y los diseños de restauración ecosistémicas, se garantice la participación ciudadana y se concreten las restauraciones ecológicas que se harán.
Los cuestionamientos, alrededor de la adecuación hidráulica que se viene realizando en el río Teusacá, comenzaron desde hace aproximadamente cinco meses, cuando la CAR comenzó la última fase de obras en el afluente. En sí, lo que están haciendo es retirar los sedimentos que se encuentran dentro del río, para lo que han utilizado maquinaria como retroexcavadoras. Además, del evidente cambio paisajístico, se han encontrado animales muertos cerca a las rondas.
El inconformismo se generó por la forma en que se realizó el proceso, pues no se consultó a la comunidad de La Calera, sino solamente a los dueños de los predios, así como ante la evidente afectación dentro de la ronda y la falta de claridad con respecto a la recuperación de las zonas.
Al respecto, la CAR justifica las intervenciones como necesarias para evitar nuevos desastres, como la avalancha que en el 2011 afectó al 90% de la población de Útica, o inundaciones en las poblaciones cercanas a las rondas, mientras que con respecto a la recuperación ambiental dicen que una vez se realiza la reforestación “la fauna que emigró regresa de manera natural atraída por la vegetación ya restaurada”, afirmación que no comparten quienes hoy encabezan la protesta contra este tipo de acciones.
A tres acuerdos llegó la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) con el colectivo “Voces del río”, que en la mañana del 11 de noviembre realizaron un plantón frente a la sede de la institución con el fin de rechazar las adecuación hidráulicas que se están realizando en los ríos Chicú, Teusacá, Subachoque, Río frío y la quebrada Aguas claras en Sutatausa, las cuales señalan están causando afectaciones ambientales irreparables.
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En la reunión, que duró aproximadamente cinco horas, la Corporación se comprometió a detener los procesos de contratación para nuevas adecuaciones, así como suspenderá por unos días las obras en desarrollo, para revisar las fallas que aceptaron se están cometiendo, así mismo crearán una mesa de trabajo para evaluar las alternativas ante los daños causados. El encuentro, que contó con representantes de cada río, se reanudará este viernes 12 de noviembre.
Dentro de las solicitudes propuestas está la realización de los estudios de caracterización los ecosistémicas acuáticos y terrestres en la zona inundable, así como estudios de inundación y riesgo que abarquen el valle aluvial en las escalas que exige la ley para determinar la necesidad de estas obras y metodologías para prevenir daños.
En las obras que ya se realizan piden que se completen los estudios de caracterización ecosistémicas, geotécnicos, de valoración, y los diseños de restauración ecosistémicas, se garantice la participación ciudadana y se concreten las restauraciones ecológicas que se harán.
Los cuestionamientos, alrededor de la adecuación hidráulica que se viene realizando en el río Teusacá, comenzaron desde hace aproximadamente cinco meses, cuando la CAR comenzó la última fase de obras en el afluente. En sí, lo que están haciendo es retirar los sedimentos que se encuentran dentro del río, para lo que han utilizado maquinaria como retroexcavadoras. Además, del evidente cambio paisajístico, se han encontrado animales muertos cerca a las rondas.
El inconformismo se generó por la forma en que se realizó el proceso, pues no se consultó a la comunidad de La Calera, sino solamente a los dueños de los predios, así como ante la evidente afectación dentro de la ronda y la falta de claridad con respecto a la recuperación de las zonas.
Al respecto, la CAR justifica las intervenciones como necesarias para evitar nuevos desastres, como la avalancha que en el 2011 afectó al 90% de la población de Útica, o inundaciones en las poblaciones cercanas a las rondas, mientras que con respecto a la recuperación ambiental dicen que una vez se realiza la reforestación “la fauna que emigró regresa de manera natural atraída por la vegetación ya restaurada”, afirmación que no comparten quienes hoy encabezan la protesta contra este tipo de acciones.