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La Fiscalía dio un nuevo paso en el proceso por la muerte de Mario Steven Mahecha, el joven de 23 años que perdió la vida tras recibir varios impactos de bala por parte de agentes de Policía que se encontraban custodiando el peaje de Casablanca, en la vía Zipaquirá - Ubaté.
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Según informó la seccional del ente investigador en Cundinamarca, los uniformados Carlos Alberto Martínez Peña, Rafael Antonio Bello Hernández y Edwin Ricardo López fueron capturados en las últimas horas por disposición de un juez de la república, para afrontar el cargo de homicidio agravado, por el cual la pena máxima ronda en torno a los 40 años.
“Labores de policía judicial permitieron establecer que los uniformados interceptaron el vehículo donde se movilizaba la víctima junto con otro hombre y una mujer, quien también resultó gravemente herida por uno de los proyectiles, luego de que los policiales les dispararan supuestamente porque no atendieron la señal de pare”, dijo Carlos Manuel Silva, el director seccional de Cundinamarca.
Cabe resaltar que, días después de que se produjo la muerte de Mahecha, el General Luis Alberto Libreros, director de la Policía de Tránsito, separó a estos uniformados de su cargo mientras se adelantaron las pesquisas correspondientes que hoy, llevaron a la captura de los tres implicados.
En medio de las investigaciones del hecho, hubo cruces de versiones, y varias audiencias, en las cuales la familia del joven asesinado clamó por justicia y denunció que los uniformados “dispararon sus armas a la ligera”, en una clara “violación a los protocolos del uso proporcionado de la fuerza” que deben atender los patrulleros dotados con armas de fuego. Esta versión, de hecho, fue confirmada por la Policía Nacional, tras realizar sus propias indagaciones a nivel interno.
Durante el transcurso de las audiencias, la versión de los uniformados varió constantemente, pues varios de ellos dijeron haber disparado su arma por diferentes circunstancias: unos dijeron que creían que los jóvenes abordo del vehículo, entre ellos Mahecha, iban a cometer un robo; mientras otros declararon que el vehículo había intentado atropellarlos.
Todas estas versiones fueron desmentidas por Edna Lizeth Mahecha, hermana de Stiven, que con base en el testimonio de los dos sobrevivientes del hecho, defendió la reputación de su hermano, y adelantó varios plantones frente a la Fiscalía para exigir justicia.
Ahora, lo que viene después de la captura de los 3 individuos, son las fases preparatorias y de acusación de los detenidos, en los que la Fiscalía mostrará frente al juez los elementos probatorios de los que dispone para sustentar la teoría de que los tres expatrulleros incurrieron en el delito de homicidio. Entre tanto, la defensa de los patrulleros intentará demostrar la inocencia de los capturados.
El trágico 26 de abril
El asesinato de Steven Mahecha ocurrió el 26 de abril, después de una noche de diversión, en la que el occiso fue a Zipaquirá en compañía de Manuela Zapata y Luis Eduardo Rodríguez, dos amigos suyos. Los tres jóvenes se habían dirigido a ese Municipio desde Cajicá para tomarse unas cervezas. Al regresar a su casa, en la madrugada, fueron abordados por una patrulla de la Policía, que les cerró el paso de manera abrupta, según ha contado el abogado defensor de la familia, con base en el testimonio de los dos sobrevivientes.
Debido a la maniobra de los uniformados, el conductor de la camioneta en la que iban los tres jóvenes, que en este caso era Luis Eduardo Rodríguez, se asustó ya aceleró el vehículo, a lo que los tres uniformados reaccionaron disparando en varias oportunidades. Los proyectiles de los uniformados impactaron en la cara de Manuela, e hirieron de muerte a Mahecha, que murió esperando una ambulancia en el lugar de los hechos.
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