Video: así buscan probar que Ana Castro bajó viva de la camioneta de Paul Naranjo

Para esta semana está programadas dos audiencias que marcarán el final del juicio contra Paul Naranjo y Julián Ortegón por el presunto feminicidio de la universitaria Ana María Castro Romero. Dos peritos llamados por la defensa de los acusados serán los últimos testigos en pasar al estrado: un técnico en audiovisuales será la última carta que jugarán para vencer a la Fiscalía en este proceso.

Si bien los abogados John Jairo Cadena y Gilberto Rondón no presentaron teoría del caso —es decir, su hipótesis de lo que le causó la muerte a la joven— y decidieron atenerse a lo que el ente acusador lograra demostrar, recién empezado el juicio señalaron la posibilidad de que un segundo vehículo haya estado involucrado en los hechos.

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Se trata de un automóvil marca Sedan de color blanco que pasó por el carril central de la Calle 80 catorce segundos después de que la camioneta Kia Sportage, en la que se movilizaban Naranjo y Ortegón, partiera del lugar de donde estuvo detenida y fue encontrado el cuerpo de Ana María.

El video es un acercamiento al punto en el que había una caneca de basura y en el que se detuvo la camioneta de Paul Naranjo, según él, para bajar a la joven y a Mateo Reyes (último conocido en verla con vida). En los segundos posteriores a cuando este vehículo reinició su marcha hacia el occidente, se observan al Sedan, a una van escolar y, por último, a una motocicleta.

La parte superior del video (señalada con un círculo rojo) muestra que las siluetas de unas piernas en movimiento estaban sobre la avenida, cerca del carril en el que se desplazaban los dos carros y la moto.

Le puede interesar: Ana María Castro: ¿Qué hallaron tras la inspección a la camioneta de Paul Naranjo?

Según un informe pericial de física que examinó las velocidades de los actores viales que pasaron por el sitio la madrugada del 5 de marzo de 2020 entre la 01:40:18 a.m. y la 01:41:28 a.m., y que fue presentado en juicio por la defensa, el Sedan blanco pasó por allí a 38,77 kilómetros por hora y aumentando la velocidad.

Pero además de este, otro video (en poder de El Espectador) será expuesto en juicio este martes: una aproximación al momento en el que la Kia está detenida, en el cual se observan dos siluetas junto a la camioneta y que una de ellas se desplaza hacia el oriente.

Lea también: Un hueco en la historia: lo que dejaron dos testigos en juicio por caso Ana Castro

Este material audiovisual servirá como insumo para intentar demostrar que Ana María bajó del carro con vida junto a Mateo, que ambos pudieron haber estado sobre el pavimento y que cabe la probabilidad de que el automóvil marca Sedan haya golpeado a la joven Castro, quien, el alto estado de alicoramiento, no tuvo capacidad de reacción para evadirlo y evitar los golpes que causaron su muerte.

El caso está cerca de terminar y en manos de la juez de conocimiento está valorar cada elemento para llegar a un veredicto final que, sea cual sea, dejará desazón. Sin embargo, vale recordar que en los procesos penales recae sobre la Fiscalía la obligación de probar los hechos por los cuales acusa a una persona de cometer un delito, y no sobre la defensa. Un factor a tener en cuenta en este proceso, en el que hasta ahora la Fiscalía ha apostado su hipótesis en la declaración de un solo testigo.

Para esta semana está programadas dos audiencias que marcarán el final del juicio contra Paul Naranjo y Julián Ortegón por el presunto feminicidio de la universitaria Ana María Castro Romero. Dos peritos llamados por la defensa de los acusados serán los últimos testigos en pasar al estrado: un técnico en audiovisuales será la última carta que jugarán para vencer a la Fiscalía en este proceso.

Si bien los abogados John Jairo Cadena y Gilberto Rondón no presentaron teoría del caso —es decir, su hipótesis de lo que le causó la muerte a la joven— y decidieron atenerse a lo que el ente acusador lograra demostrar, recién empezado el juicio señalaron la posibilidad de que un segundo vehículo haya estado involucrado en los hechos.

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Se trata de un automóvil marca Sedan de color blanco que pasó por el carril central de la Calle 80 catorce segundos después de que la camioneta Kia Sportage, en la que se movilizaban Naranjo y Ortegón, partiera del lugar de donde estuvo detenida y fue encontrado el cuerpo de Ana María.

El video es un acercamiento al punto en el que había una caneca de basura y en el que se detuvo la camioneta de Paul Naranjo, según él, para bajar a la joven y a Mateo Reyes (último conocido en verla con vida). En los segundos posteriores a cuando este vehículo reinició su marcha hacia el occidente, se observan al Sedan, a una van escolar y, por último, a una motocicleta.

La parte superior del video (señalada con un círculo rojo) muestra que las siluetas de unas piernas en movimiento estaban sobre la avenida, cerca del carril en el que se desplazaban los dos carros y la moto.

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Según un informe pericial de física que examinó las velocidades de los actores viales que pasaron por el sitio la madrugada del 5 de marzo de 2020 entre la 01:40:18 a.m. y la 01:41:28 a.m., y que fue presentado en juicio por la defensa, el Sedan blanco pasó por allí a 38,77 kilómetros por hora y aumentando la velocidad.

Pero además de este, otro video (en poder de El Espectador) será expuesto en juicio este martes: una aproximación al momento en el que la Kia está detenida, en el cual se observan dos siluetas junto a la camioneta y que una de ellas se desplaza hacia el oriente.

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Este material audiovisual servirá como insumo para intentar demostrar que Ana María bajó del carro con vida junto a Mateo, que ambos pudieron haber estado sobre el pavimento y que cabe la probabilidad de que el automóvil marca Sedan haya golpeado a la joven Castro, quien, el alto estado de alicoramiento, no tuvo capacidad de reacción para evadirlo y evitar los golpes que causaron su muerte.

El caso está cerca de terminar y en manos de la juez de conocimiento está valorar cada elemento para llegar a un veredicto final que, sea cual sea, dejará desazón. Sin embargo, vale recordar que en los procesos penales recae sobre la Fiscalía la obligación de probar los hechos por los cuales acusa a una persona de cometer un delito, y no sobre la defensa. Un factor a tener en cuenta en este proceso, en el que hasta ahora la Fiscalía ha apostado su hipótesis en la declaración de un solo testigo.