Agencia Espacial Europea lanzó el cohete Vega-C, ¿cuál es su misión?
En su primer viaje, el cohete puso en órbita el satélite italiano LARES-2, que busca medir una distorsión que predijo Albert Einstein en su teoría de la relatividad general.
En la mañana del jueves (13 de julio), desde el puerto espacial europeo ubicado en Kourou (Guayana Francesa) fue lanzado el cohete Vega-C de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés). El cohete, de 34, 8 metros de altura, completó su vuelo inaugural dos horas más tardes, cuando puso en órbita al satélite LARES-2. (Puede leer: Helena Groot, primera mujer presidenta de la Academia Colombiana de Ciencias Exactas)
Vega-C, según informó la ESA, presenta unas capacidades superiores a las de Vega, el cohete antecesor de esta nueva misión que opera desde hace una década. Para Daniel Neuenschwander, director de Transporte Espacial de la agencia, con el lanzamiento de Vega-C inauguraron “una nueva era de soluciones de lanzamiento europeas, que se complementará con Ariane 6″.
El cohete, cuya principal función es ser un vehículo de carga, llevó en su primera misión al satélite LARES-2 de la Agencia Espacial Italiana (ASI, por sus siglas en italiano). El objetivo de este, es medir el efecto de “arrastre del marco de referencia, una distorsión del espacio tiempo ocasionada por la rotación de un cuerpo enorme como la Tierra, según predijo Einstein en su teoría de la relatividad general”. (Le puede interesar: Astrónomos nos ayudan a entender las imágenes del telescopio James Webb)
Vega-C también transportó seis CubeSats -unos nanosatélites- que tendrán distintos objetivos. El AstroBio CubeSat de Italia, probará una solución para detectar biomoléculas en el espacio. Greencube, del mismo país, llevará a cabo un experimento de cultivación de plantas en microgravedad. ALPHA, también de la ASI, quiere comprender los fenómenos relacionados con magnetosfera de la Tierra como las auroras boreales y australes. (También puede leer: Sentémonos todos a la mesa de la generación y distribución del conocimiento)
Eslovenia, con la CubeSats Trisat-R y Francia, con la MTCube-2 y Celesta, también aprovecharon para enviar estos nanosatélites, los cuales estudiarán los efectos de un entorno de radiación severa en los sistemas electrónicos.
En la mañana del jueves (13 de julio), desde el puerto espacial europeo ubicado en Kourou (Guayana Francesa) fue lanzado el cohete Vega-C de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés). El cohete, de 34, 8 metros de altura, completó su vuelo inaugural dos horas más tardes, cuando puso en órbita al satélite LARES-2. (Puede leer: Helena Groot, primera mujer presidenta de la Academia Colombiana de Ciencias Exactas)
Vega-C, según informó la ESA, presenta unas capacidades superiores a las de Vega, el cohete antecesor de esta nueva misión que opera desde hace una década. Para Daniel Neuenschwander, director de Transporte Espacial de la agencia, con el lanzamiento de Vega-C inauguraron “una nueva era de soluciones de lanzamiento europeas, que se complementará con Ariane 6″.
El cohete, cuya principal función es ser un vehículo de carga, llevó en su primera misión al satélite LARES-2 de la Agencia Espacial Italiana (ASI, por sus siglas en italiano). El objetivo de este, es medir el efecto de “arrastre del marco de referencia, una distorsión del espacio tiempo ocasionada por la rotación de un cuerpo enorme como la Tierra, según predijo Einstein en su teoría de la relatividad general”. (Le puede interesar: Astrónomos nos ayudan a entender las imágenes del telescopio James Webb)
Vega-C también transportó seis CubeSats -unos nanosatélites- que tendrán distintos objetivos. El AstroBio CubeSat de Italia, probará una solución para detectar biomoléculas en el espacio. Greencube, del mismo país, llevará a cabo un experimento de cultivación de plantas en microgravedad. ALPHA, también de la ASI, quiere comprender los fenómenos relacionados con magnetosfera de la Tierra como las auroras boreales y australes. (También puede leer: Sentémonos todos a la mesa de la generación y distribución del conocimiento)
Eslovenia, con la CubeSats Trisat-R y Francia, con la MTCube-2 y Celesta, también aprovecharon para enviar estos nanosatélites, los cuales estudiarán los efectos de un entorno de radiación severa en los sistemas electrónicos.