Así tratan de contener al hongo que está amenazando la producción de banano
En 2019 se identificó en el país un hongo que afecta a los cultivos de banano y plátano y que ha causado pérdidas en el mundo por $277 millones de dólares. Por cada planta enferma se deben erradicar 60. Científicos están buscando la manera de contenerlo en el país.
En los años 70, en Asia, fue detectado un hongo llamado Fusarium Raza 4 Tropical (Foc R4T), que se convirtió en uno de los hongos más agresivos y destructivos de la historia de la agricultura. Hoy es la mayor amenaza a escala mundial para la producción del banano, como lo describió la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). En 2013, se reportó su presencia en África y seis años después en América, donde se produce alrededor de dos tercios del comercio mundial de banano.
Gánale la carrera a la desinformación NO TE QUEDES CON LAS GANAS DE LEER ESTE ARTÍCULO
¿Ya tienes una cuenta? Inicia sesión para continuar
En los años 70, en Asia, fue detectado un hongo llamado Fusarium Raza 4 Tropical (Foc R4T), que se convirtió en uno de los hongos más agresivos y destructivos de la historia de la agricultura. Hoy es la mayor amenaza a escala mundial para la producción del banano, como lo describió la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). En 2013, se reportó su presencia en África y seis años después en América, donde se produce alrededor de dos tercios del comercio mundial de banano.
Desde que fue identificado hace cinco décadas hasta 2019, las pérdidas económicas a nivel global a causa de Foc R4T superaban los $277 millones de dólares. Ya ha sido reportado en países como Malasia, Filipinas, Australia, China e Israel. A Sudamérica entró por Colombia en agosto de 2019.
(Lea: Colombia tiene en La Tatacoa un nuevo sitio que es Patrimonio Geológico del Mundo)
Todo parece indicar que el hongo “ingresó” por La Guajira, donde afectó, inicialmente, 175 hectáreas de cultivo. Dos años después, fue detectado en el departamento de Piura, en Perú, donde el gobierno nacional decretó emergencia fitosanitaria para contener la situación; y finalmente, en 2023, llegó a Venezuela.
Contener este hongo es prácticamente una pelea contra el tiempo, pues se calcula que podría destruir hasta el 80 % de las especies de banano y plátano comercializadas a nivel mundial. Este Fusarium es especialmente agresivo con el banano de exportación, como el Cavendish, el más cultivado y consumido.
Mónica Betancourt, ingeniera agrónoma, PhD en Ciencias Agrarias y encargada de la estrategia de investigación desde Agrosavia, una entidad colombiana dedicada a la investigación científica y el desarrollo tecnológico agropecuario, para hacer frente a la emergencia por Foc R4T en Colombia, explica que el hongo genera una enfermedad llamada marchitez por Fusarium, la cual obstruye el sistema vascular de la planta. “El marchitamiento empieza en las hojas de abajo, avanza, posteriormente, a hojas superiores; estas se marchitan y causa un síntoma que se conoce como en enruanamiento, es decir, las hojas caen sobre el pseudotallo y la planta, eventualmente, muere”.
Esto pasa porque al interior ocurre algo que se conoce como necrosis, que hace referencia a la formación de unas gomas que no permiten la toma de nutrientes y de agua. “Lo grave es que cuando la planta se enferma, el hongo genera unas estructuras de resistencia que hacen que el patógeno pueda durar en el suelo hasta 30 años. Por lo tanto, se pierde la capacidad productiva del cultivo”, agrega Betancourt.
Esto quiere decir que, si una planta se enferma, el productor debe erradicarla y además erradicar las que haya 50 metros alrededor. En otras palabras, por cada foco, o planta enferma, se tienen que eliminar unas 600 más y ese lugar no se puede volver a usar por 30 años, pues las plantas que se cultiven se volverán a enfermar.
(Lea: Las posibles 20 nuevas especies que encontraron en lo profundo del mar en Chile)
Del suelo a La Guajira y al Magdalena
Foc R4T es un hongo del suelo, eso quiere decir que su principal medio de propagación es, justamente, el suelo. Cuando un trabajador pasa cerca de una planta enferma, sus botas quedan llenas de partículas que pueden recoger millones de estructuras reproductivas del hongo. Así es como puede llegar a otras plantas.
En el país, por el momento, hay reportes de este Fusarium en 20 predios de banano de exportación: once están en La Guajira y nueve, en el Magdalena. En este último departamento se reportó por primera vez en 2021. “Comprobamos molecularmente que el patógeno que hay en la Guajira y Magdalena es el mismo. Es decir, el patógeno no entró dos veces al país, sino que se movió de departamento a departamento, quizás antes de que empezarán todas las estrategias fuertes de bioseguridad”, explica Betancourt, de Agrosavia. Hasta ahora no se ha reportado en cultivos de plátano, como si ha ocurrido en Venezuela, pero sí se ha confirmado que las variedades de este cultivo presentes en el país son susceptibles a la enfermedad.
Según la ingeniera agrónoma, en el país hay unas 450.000 hectáreas de banano. “Eso es lo que está en riesgo, no solo es el banano de exportación, sino la seguridad alimentaria”.
La razón es sencilla: Colombia es el quinto exportador mundial de banano después de Ecuador, Guatemala, Filipinas y Costa Rica. El banano es el tercer producto de exportación del agro colombiano después del café y las flores, y genera 50.000 empleos directos y más de 100.000 indirectos, de acuerdo con la Asociación Bananera de Colombia, Augura.
A esto se suma que, en el primer trimestre de este año fue uno de los productos que ayudó a impulsar el crecimiento de las exportaciones de bienes no mineros, que creció en 2,5 %, respecto al mismo periodo del año anterior: el banano tuvo un crecimiento del 84,9 %, respecto al primer trimestre de 2023, según confirmó el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, con base en las cifras del DANE.
Por el momento, las zonas afectadas en el país hacen parte de grandes empresas productoras que han podido hacerle frente a esta situación. Pero en Venezuela y Perú, por ejemplo, el hongo ha llegado a fincas de pequeños productores que han tenido que abandonar sus cultivos. “Ese es nuestro miedo, que llegue a zonas de pequeños productores, por ejemplo, en zona central del país, que no tienen la capacidad para controlar el problema”, afirma Betancourt.
¿Cómo se contiene un hongo?
Desde la llegada del hongo al país, el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) se ha encargado de hacer trabajo de prevención y contención con los gremios, y Agrosavia se está dedicado a la generación de información y conocimiento para emitir recomendaciones de manejo.
La principal herramienta es la bioseguridad, es decir, salir y entrar limpios de los cultivos. “Con cualquier mínimo error que tengamos en las fincas bananeras, el hongo se puede esparcir. Además, con los problemas de inundaciones que se han presentado en Magdalena, en zonas cercanas donde hay brotes, es muy probable que haya algún tipo de escape y que se presente focos en otras partes del departamento, y posiblemente en otras regiones del país. Es lo que hay que evitar”, menciona Betancourt.
Toda planta infectada debe ser eliminada y seguir un protocolo. Aunque a la fecha no hay una solución para curar una planta enferma, si hay unos avances, que Colombia está liderando.
El país está desarrollando materiales híbridos que puedan ser resistentes y/o tolerantes a la enfermedad, los cuales ayudarán a proteger las exportaciones de banano y darle una alternativa a los pequeños y medianos productores. “Tenemos un programa de mejoramiento genético en el cual estamos haciendo cruzamientos entre plantas con el objetivo de obtener materiales parecidos a Cavendish y que tengan mejor comportamiento frente al patógeno. Es decir, crear una nueva variedad, explica la investigadora de Agrosavia.
La empresa Brasileña de Investigación Agropecuaria (Embrapa) le entregó a Agrosavia unos materiales, conocidos técnicamente como diploides mejorados, los cuales están siendo cruzados con plantas de banano tipo Cavendish, de tal forma que su descendencia debería contener genes de banano de exportación y genes de resistencia.
La institución colombiana también está evaluando otros materiales propiedad del CIRAD, que es el organismo francés de investigación para la agronomía. Esta actividad se está haciendo en La Guajira, en una finca con alta incidencia de la enfermedad. Lograr esos resultados requiere de mucha paciencia y rigor. A la fecha se han hecho alrededor de 5.000 cruzamientos y se cuenta con la evaluación de cinco materiales del CIRAD en condiciones de campo.
Agrosavia está en el proceso de recuperación de las semillas y hasta el momento aseguran que van bien. Este trabajo se está haciendo de la mano de Augura, de la Asociación de Bananeros Del Magdalena y La Guajira, (Asbama) y del grupo Agrovid, una compañía productora de banano de exportación de alta calidad
Otro de los avances es la introducción de controladores biológicos, que lo que hacen es invadir el suelo y cuando el hongo se mueve a otro sitio ya no encuentra espacio para crecer y reduce el riesgo de infectar a otras plantas. “Somos un referente a nivel internacional, tanto el ICA con su estrategia de prevención y contención, como Agrosavia por lo que ha entregado en términos de investigación”, agrega la ingeniera.
El país sigue reforzando las medidas de bioseguridad, pues luego de realizar visitas a nueve fincas afectadas por el hongo en La Guajira, encontraron que once muestras de suelo y residuos de producción de 206 tomadas, resultaron positivas. También se están monitoreando las fuentes hídricas en zonas afectadas para desarrollar propuestas de manejo y tratamiento que mitiguen el riesgo de contaminación.