China finaliza detalles de la nave que quiere llegar al lado oscuro de la Luna
Se trata de la sonda Chang’e-6, cuyo lanzamiento espera suceder en el primer semestre de este 2024.
La sonda china Chang’e-6, cuyo objetivo es traer las primeras muestras de la cara oculta de la Luna, está programada para ser lanzada en el primer semestre de este año.
Así lo concretó este miércoles la Administración Nacional del Espacio de China (CNSA), que anunció que los componentes de la sonda lunar han sido ya transportados al sitio de lanzamiento de naves espaciales Wenchang, en la isla de Hainan, y las pruebas previas al lanzamiento se llevarán a cabo según lo programado, dijo la agencia, citada por Xinhua.
Lea también: La Nasa aplaza su regreso a la Luna, ¿cuáles son las razones?
El único aterrizaje en el lado opuesto de la Luna se produjo en 2019 con el Chang’e-4 de China. La misión requirió que un satélite de retransmisión, llamado Queqiao (“Puente de la Urraca”), fuera lanzado antes del módulo de aterrizaje y el rover a una órbita de halo más allá de la Luna para rebotar señales entre las estaciones terrestres en la Tierra y la cara oculta lunar, que de otro modo sería incomunicable.
Chang’e-6 está diseñada para proporcionar nuevo material de una nueva área de la Luna, la cuenca SPA, que habría sido excavada en las profundidades de la Luna por un impactador, proporcionando información sin precedentes sobre la historia temprana y la evolución de la Luna y, por extensión, la Tierra y el Sistema Solar en general.Antes de su lanzamiento, se enviará un satélite de retransmisión llamado Queqiao-2 a una órbita lunar diseñada para apoyar la misión.
Puede leer: La misión estadounidense que quiere llegar a la Luna sufrió fuga de combustible.
Cuando sea enviada a la Luna, la nave espacial Chang’e-6 de cuatro partes entrará en la órbita lunar, antes de aterrizar y recoger y perforar muestras. Luego, un vehículo de ascenso despegará desde lo alto del módulo de aterrizaje, llevando muestras a la órbita lunar para encontrarse y acoplarse con el módulo de servicio que espera, mientras ambos viajan a alrededor de 1 kilómetro por segundo. Luego, ese módulo regresará a la Tierra y desechará un módulo de reentrada para entregar de manera segura las muestras a través de la atmósfera y al suelo.
Debe recordarse que la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (Nasa, por sus siglas en inglés), tenía previsto llevar a la órbita de la Luna una misión tripulada, como parte de la misión Artemis II. Para 2025, después de medio siglo, con Artemis III, esperaban llevar nuevamente astronautas al único satélite natural que tiene la Tierra.
Sin embargo, como explicó el administrador de la Nasa, Bill Nelson, la agencia espacial ha decidido posponer sus planes por lo menos un año más. Ahora, se espera que Artemis II se desarrolle en septiembre de 2025 y que Artemis III, que contempla el aterrizaje de los primeros astronautas cerca del Polo Sur lunar, se realice en septiembre de 2026.
De acuerdo con las declaraciones que Nelson ofreció este martes (9 de enero), la principal razón que llevó a los cambios en el cronograma son algunas fallas que se han identificado para garantizar la seguridad de la tripulación en las misiones lunares.
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La sonda china Chang’e-6, cuyo objetivo es traer las primeras muestras de la cara oculta de la Luna, está programada para ser lanzada en el primer semestre de este año.
Así lo concretó este miércoles la Administración Nacional del Espacio de China (CNSA), que anunció que los componentes de la sonda lunar han sido ya transportados al sitio de lanzamiento de naves espaciales Wenchang, en la isla de Hainan, y las pruebas previas al lanzamiento se llevarán a cabo según lo programado, dijo la agencia, citada por Xinhua.
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El único aterrizaje en el lado opuesto de la Luna se produjo en 2019 con el Chang’e-4 de China. La misión requirió que un satélite de retransmisión, llamado Queqiao (“Puente de la Urraca”), fuera lanzado antes del módulo de aterrizaje y el rover a una órbita de halo más allá de la Luna para rebotar señales entre las estaciones terrestres en la Tierra y la cara oculta lunar, que de otro modo sería incomunicable.
Chang’e-6 está diseñada para proporcionar nuevo material de una nueva área de la Luna, la cuenca SPA, que habría sido excavada en las profundidades de la Luna por un impactador, proporcionando información sin precedentes sobre la historia temprana y la evolución de la Luna y, por extensión, la Tierra y el Sistema Solar en general.Antes de su lanzamiento, se enviará un satélite de retransmisión llamado Queqiao-2 a una órbita lunar diseñada para apoyar la misión.
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Cuando sea enviada a la Luna, la nave espacial Chang’e-6 de cuatro partes entrará en la órbita lunar, antes de aterrizar y recoger y perforar muestras. Luego, un vehículo de ascenso despegará desde lo alto del módulo de aterrizaje, llevando muestras a la órbita lunar para encontrarse y acoplarse con el módulo de servicio que espera, mientras ambos viajan a alrededor de 1 kilómetro por segundo. Luego, ese módulo regresará a la Tierra y desechará un módulo de reentrada para entregar de manera segura las muestras a través de la atmósfera y al suelo.
Debe recordarse que la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (Nasa, por sus siglas en inglés), tenía previsto llevar a la órbita de la Luna una misión tripulada, como parte de la misión Artemis II. Para 2025, después de medio siglo, con Artemis III, esperaban llevar nuevamente astronautas al único satélite natural que tiene la Tierra.
Sin embargo, como explicó el administrador de la Nasa, Bill Nelson, la agencia espacial ha decidido posponer sus planes por lo menos un año más. Ahora, se espera que Artemis II se desarrolle en septiembre de 2025 y que Artemis III, que contempla el aterrizaje de los primeros astronautas cerca del Polo Sur lunar, se realice en septiembre de 2026.
De acuerdo con las declaraciones que Nelson ofreció este martes (9 de enero), la principal razón que llevó a los cambios en el cronograma son algunas fallas que se han identificado para garantizar la seguridad de la tripulación en las misiones lunares.
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