Descubren una nueva especie de tarántula, la más grande de su género hasta ahora
Se trata de Tricopelma Grande, que por la información que se tiene hasta ahora, podría necesitar una posible prioridad de conservación.
Una nueva especie de tarántula del género Trichopelma fue descubierta en el Parque Nacional Viñales, un punto de interés biológico ubicado en el occidente de Cuba. Su nombre es Tricopelma Grande, y es hasta ahora, la más grande del género, que tiene 22 especies que habitan en las Antillas, incluidas cinco especies nativas de Cuba.
De acuerdo con los investigadores que describieron la especie, la tarántula tiene un tamaño mediano a grande, similar a las especies de Phormictopus y Cyrtopholis. Entre sus características está que los machos tienen pelos rígidos prominentes o cerdas en las patas, conocidas como setas. Los autores escriben que esto le da a las patas “una apariencia similar a la de un plumero”.
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David Ortiz, autor principal e investigador postdoctoral explicó a IFLScience que “esta es una especie grande para el grupo de tarántulas al que pertenece, pero no realmente para las tarántulas en general. Las especies de tarántula más grandes del mundo pertenecen al género Theraphosa y viven en el norte de América del Sur. Pueden alcanzar entre 25 y 35 mm de longitud de caparazón, que es la estructura que se usa más comúnmente para medir el tamaño de las arañas porque es rígida. En contraste, los tres machos de Trichopelma grande que conocemos alcanzan entre 8,4 y 11,1 mm de longitud de caparazón”.
Los investigadores encontraron cuatro individuos. Uno de los machos adultos fue descubierto dentro de la zona oscura de una cueva. Esto no permite sacar conclusiones sobre su comportamiento, pues “considerando la naturaleza nómada de las tarántulas macho adultas, se recomienda tener precaución al sacar conclusiones sobre la versatilidad del microhábitat de esta especie basándose únicamente en las observaciones de los machos”, menciona el estudio donde se describen los resultados.
Otros dos ejemplares machos de T. grande juveniles se encontraron en madrigueras con trampilla en el suelo, un comportamiento que es consistente con el de otras especies de Trichopelma. Sin embargo, no se obtuvieron ejemplares hembras, por lo que reiteran que es difícil sacar conclusiones definitivas sobre el comportamiento de retirada de esta especie.
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Los ejemplares de Trichopelma grande fueron identificados en cuatro localidades distintas dentro del Parque Nacional Viñales en la provincia de Pinar del Río. La máxima distancia que había entre ellos era de 15,5 km. Aunque aún se necesitan más datos para determinar el estado de conservación de esta especie, la información preliminar permite inferir que posiblemente tiene un posible problema de conservación.
Las razones para considerar esto es la corta distancia que había entre los ejemplares, y su ausencia en las colecciones de historia natural cubanas, que de otro modo albergan una variedad de tarántulas medianas a grandes de los géneros Phormictopus y Cyrtopholis. “Tales observaciones sugieren que esta especie distintiva puede tener una distribución restringida y podría ser escasa, lo que la posiciona como una posible prioridad de conservación”, indican.
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Una nueva especie de tarántula del género Trichopelma fue descubierta en el Parque Nacional Viñales, un punto de interés biológico ubicado en el occidente de Cuba. Su nombre es Tricopelma Grande, y es hasta ahora, la más grande del género, que tiene 22 especies que habitan en las Antillas, incluidas cinco especies nativas de Cuba.
De acuerdo con los investigadores que describieron la especie, la tarántula tiene un tamaño mediano a grande, similar a las especies de Phormictopus y Cyrtopholis. Entre sus características está que los machos tienen pelos rígidos prominentes o cerdas en las patas, conocidas como setas. Los autores escriben que esto le da a las patas “una apariencia similar a la de un plumero”.
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David Ortiz, autor principal e investigador postdoctoral explicó a IFLScience que “esta es una especie grande para el grupo de tarántulas al que pertenece, pero no realmente para las tarántulas en general. Las especies de tarántula más grandes del mundo pertenecen al género Theraphosa y viven en el norte de América del Sur. Pueden alcanzar entre 25 y 35 mm de longitud de caparazón, que es la estructura que se usa más comúnmente para medir el tamaño de las arañas porque es rígida. En contraste, los tres machos de Trichopelma grande que conocemos alcanzan entre 8,4 y 11,1 mm de longitud de caparazón”.
Los investigadores encontraron cuatro individuos. Uno de los machos adultos fue descubierto dentro de la zona oscura de una cueva. Esto no permite sacar conclusiones sobre su comportamiento, pues “considerando la naturaleza nómada de las tarántulas macho adultas, se recomienda tener precaución al sacar conclusiones sobre la versatilidad del microhábitat de esta especie basándose únicamente en las observaciones de los machos”, menciona el estudio donde se describen los resultados.
Otros dos ejemplares machos de T. grande juveniles se encontraron en madrigueras con trampilla en el suelo, un comportamiento que es consistente con el de otras especies de Trichopelma. Sin embargo, no se obtuvieron ejemplares hembras, por lo que reiteran que es difícil sacar conclusiones definitivas sobre el comportamiento de retirada de esta especie.
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Los ejemplares de Trichopelma grande fueron identificados en cuatro localidades distintas dentro del Parque Nacional Viñales en la provincia de Pinar del Río. La máxima distancia que había entre ellos era de 15,5 km. Aunque aún se necesitan más datos para determinar el estado de conservación de esta especie, la información preliminar permite inferir que posiblemente tiene un posible problema de conservación.
Las razones para considerar esto es la corta distancia que había entre los ejemplares, y su ausencia en las colecciones de historia natural cubanas, que de otro modo albergan una variedad de tarántulas medianas a grandes de los géneros Phormictopus y Cyrtopholis. “Tales observaciones sugieren que esta especie distintiva puede tener una distribución restringida y podría ser escasa, lo que la posiciona como una posible prioridad de conservación”, indican.
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