El ‘Reloj del apocalipsis’ sigue a 90 segundos de la medianoche, ¿qué significa?
La guerra entre Rusia y Ucrania, y el avance de la inteligencia artificial con poca regulación, son algunas de las razones que mantienen el reloj cerca de marcar la hora límite.
El “Reloj del fin del mundo”, o “Reloj del apocalipsis” como también es conocido, está a solo 90 segundos de marcar la medianoche. Así lo notificó el Boletín de Científicos Atómicos, un grupo de expertos que cuenta con nueve premios Nobel y que utilizan este reloj de manera simbólica para indicar qué tan cerca está la humanidad de llegar a un “apocalipsis”, o, como lo describen, lo “cerca que está la humanidad de la autoaniquilación”, de manera metafórica. (Lea: China opera el laboratorio de materia oscura más grande y profundo del mundo)
Aunque la noticia “alentadora” es que las manecillas no avanzaron respecto a 2023, cuando estuvo a 90 segundos también, lo preocupante es que este es el registro más próximo desde que se puso en marcha el reloj, en 1947. Durante 2020, 2021 y 2022 este estuvo a 100 segundos de la medianoche.
Para el caso de este año, el Boletín de Científicos explica que son varias las amenazas que reflejan el estado continuo de peligro sin precedentes que enfrenta el mundo. La guerra entre Rusia y Ucrania; el deterioro de los acuerdos de reducción de armas nucleares; la crisis climática y la designación oficial de 2023 como el año más caluroso jamás registrado, son algunas de las principales amenazas.
De acuerdo con el Boletín, China, Rusia y Estados Unidos están gastando enormes sumas de dinero para ampliar o modernizar sus arsenales nucleares, lo que aumenta el peligro de una guerra nuclear por error o error de cálculo. “Solo estos tres países pueden hacernos retroceder. A pesar de los profundos antagonismos, deben cooperar... o estamos condenados”, indicó Jerry Brown, presidente ejecutivo del Boletín. (Lea: La Universidad de Antioquia ya “tiene” un asteroide bautizado con su nombre)
Otras amenazas que mencionan son la creciente sofisticación de las tecnologías de ingeniería genética; el avance de la inteligencia artificial (IA) generativa que podría magnificar la desinformación y corromper el entorno informativo global, haciendo más difícil resolver los desafíos existenciales más grandes.
Sobre la IA en específico, el boletín menciona que una de las grandes preocupaciones es el avance que ha tenido esta tecnología para usos militares: vigilancia, reconocimiento, simulación y capacitación. “De particular preocupación son las armas letales autónomas, que identifican y destruyen objetivos sin intervención humana. Las decisiones de poner a la IA en control de importantes sistemas físicos (en particular, las armas nucleares) podrían de hecho representar una amenaza existencial directa para la humanidad”, menciona el documento.
Pese a este panorama, el boletín resalta el esfuerzo de varios países por regular la IA. Mencionan la propuesta del marco regulatorio por parte de la Unión Europea, una orden ejecutiva del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, una declaración internacional para abordar los riesgos de la IA y la formación de un nuevo órgano asesor de la ONU. (Lea: Las aguas subterráneas de todo el mundo se están agotando)
¿Se puede retroceder el “Reloj del fin del mundo”?
De acuerdo con los administradores del simbólico reloj, sí es posible retroceder las manecillas, pero solo si los gobiernos y las personas toman medidas urgentes. La tarea de los líderes y las naciones, dicen, es entender que las amenazas comunes exigen una acción común.
El primer paso es que tres de las principales potencias del mundo (Estados Unidos, China y Rusia) inicien un diálogo serio sobre cada una de las amenazas globales descritas. En los niveles más altos, estos tres países deben asumir la responsabilidad del peligro existencial que enfrenta el mundo ahora. “Deben hacerlo con claridad y valentía y sin demora”, mencionan.
“Durante décadas, los científicos nos han estado advirtiendo sobre los peligros que enfrenta la humanidad. Podríamos enfrentarnos a una catástrofe a menos que gestionemos mejor las tecnologías que hemos creado. Es hora de actuar”, sostuvo Bill Nye, quien participó en el anuncio del Reloj de 2024.
El “Reloj del fin del mundo”, o “Reloj del apocalipsis” como también es conocido, está a solo 90 segundos de marcar la medianoche. Así lo notificó el Boletín de Científicos Atómicos, un grupo de expertos que cuenta con nueve premios Nobel y que utilizan este reloj de manera simbólica para indicar qué tan cerca está la humanidad de llegar a un “apocalipsis”, o, como lo describen, lo “cerca que está la humanidad de la autoaniquilación”, de manera metafórica. (Lea: China opera el laboratorio de materia oscura más grande y profundo del mundo)
Aunque la noticia “alentadora” es que las manecillas no avanzaron respecto a 2023, cuando estuvo a 90 segundos también, lo preocupante es que este es el registro más próximo desde que se puso en marcha el reloj, en 1947. Durante 2020, 2021 y 2022 este estuvo a 100 segundos de la medianoche.
Para el caso de este año, el Boletín de Científicos explica que son varias las amenazas que reflejan el estado continuo de peligro sin precedentes que enfrenta el mundo. La guerra entre Rusia y Ucrania; el deterioro de los acuerdos de reducción de armas nucleares; la crisis climática y la designación oficial de 2023 como el año más caluroso jamás registrado, son algunas de las principales amenazas.
De acuerdo con el Boletín, China, Rusia y Estados Unidos están gastando enormes sumas de dinero para ampliar o modernizar sus arsenales nucleares, lo que aumenta el peligro de una guerra nuclear por error o error de cálculo. “Solo estos tres países pueden hacernos retroceder. A pesar de los profundos antagonismos, deben cooperar... o estamos condenados”, indicó Jerry Brown, presidente ejecutivo del Boletín. (Lea: La Universidad de Antioquia ya “tiene” un asteroide bautizado con su nombre)
Otras amenazas que mencionan son la creciente sofisticación de las tecnologías de ingeniería genética; el avance de la inteligencia artificial (IA) generativa que podría magnificar la desinformación y corromper el entorno informativo global, haciendo más difícil resolver los desafíos existenciales más grandes.
Sobre la IA en específico, el boletín menciona que una de las grandes preocupaciones es el avance que ha tenido esta tecnología para usos militares: vigilancia, reconocimiento, simulación y capacitación. “De particular preocupación son las armas letales autónomas, que identifican y destruyen objetivos sin intervención humana. Las decisiones de poner a la IA en control de importantes sistemas físicos (en particular, las armas nucleares) podrían de hecho representar una amenaza existencial directa para la humanidad”, menciona el documento.
Pese a este panorama, el boletín resalta el esfuerzo de varios países por regular la IA. Mencionan la propuesta del marco regulatorio por parte de la Unión Europea, una orden ejecutiva del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, una declaración internacional para abordar los riesgos de la IA y la formación de un nuevo órgano asesor de la ONU. (Lea: Las aguas subterráneas de todo el mundo se están agotando)
¿Se puede retroceder el “Reloj del fin del mundo”?
De acuerdo con los administradores del simbólico reloj, sí es posible retroceder las manecillas, pero solo si los gobiernos y las personas toman medidas urgentes. La tarea de los líderes y las naciones, dicen, es entender que las amenazas comunes exigen una acción común.
El primer paso es que tres de las principales potencias del mundo (Estados Unidos, China y Rusia) inicien un diálogo serio sobre cada una de las amenazas globales descritas. En los niveles más altos, estos tres países deben asumir la responsabilidad del peligro existencial que enfrenta el mundo ahora. “Deben hacerlo con claridad y valentía y sin demora”, mencionan.
“Durante décadas, los científicos nos han estado advirtiendo sobre los peligros que enfrenta la humanidad. Podríamos enfrentarnos a una catástrofe a menos que gestionemos mejor las tecnologías que hemos creado. Es hora de actuar”, sostuvo Bill Nye, quien participó en el anuncio del Reloj de 2024.