Publicidad

El telescopio James Webb encontró una estrella fallida con auroras nunca antes vistas

En un lugar aislado del espacio exterior, descubrieron una enana marrón que presenta características únicas. No se encuentra en ningún sistema planetario, pero se parece a Júpiter y Saturno.

22 de abril de 2024 - 01:46 p. m.
Esta es una ilustración de cómo se vería la estrella fallida. En rojo se observan las auroras generadas por las emisiones de metano.
Esta es una ilustración de cómo se vería la estrella fallida. En rojo se observan las auroras generadas por las emisiones de metano.
Foto: NASA, ESA, CSA, Leah Hustak (Instituto de Ciencias del Telescopio Espacial)

En un proyecto que estaba investigando 12 estrellas fallidas, o enanas marrones, como también se les conoce, investigadores encontraron una con características nunca antes vistas.

Las estrellas fallidas son más grandes que los planetas, pero más pequeñas que estrellas como el Sol, y reciben este nombre porque surgen a raíz de procesos similares, pero algunos componentes evitan que lleguen a convertirse en estrellas que conformen sistemas planetarios.

En este caso, se trata de una enana mayor que está a 47 años luz de la Tierra que recibió el abreviado W1935 y, aunque su masa no se ha logrado estimar con exactitud, se cree que podría ser entre seis y 35 veces la de Júpiter. Los investigadores publicaron su hallazgo en la revista Nature, haciendo énfasis en varias cualidades particulares.

En primer lugar, porque lograron ubicar a esa estrella fallida debido a sus emisiones de metano, que reflejan la luz y generan una especie de auroras cerca de su superficie, como ocurre en la Tierra con las auroras boreales.

Lo extraño, dicen los científicos, es que es una enana marrón que se encuentra aislada, sin ninguna estrella como fuente de calor cercana. En un ambiente frío, este tipo de auroras no son usuales, pues el metano a esas temperaturas no refleja la luz, sino que la absorbe.

También encontraron que la estrella fallida tiene un fenómeno conocido como inversión térmica, que genera que la temperatura aumente a medida que aumenta la altitud de la superficie.

Una de las hipótesis que plantearon los investigadores es que la W1935 pueda estar orbitada por una luna desconocida, lo que podría explicar fenómenos como estos. Este tipo de características ya se han estudiado en planetas como Júpiter y Saturno, que serían claves para resolver las dudas en torno a esta estrella fallida en estudios futuros.

👩‍🔬📄 ¿Quieres conocer las últimas noticias sobre ciencia? Te invitamos a verlas en El Espectador. 🧪🧬

Temas recomendados:

 

Jesús(90019)22 de abril de 2024 - 02:08 p. m.
Muy interesante
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.
Aceptar