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El rover Pragyan de la misión Chandrayaan-3 de la India, lanzada a la Luna el 14 de julio de 2023, logró algo que hasta ahora ninguna otra máquina había logrado: las primeras mediciones in situ de las abundancias elementales en las regiones de alta latitud del sur lunar. En términos simples, esto significa que Pragyan ha analizado la composición química del suelo en una zona de la Luna que hasta ahora no había sido estudiada de esta manera. Los resultados de ese análisis, publicados en Nature, revelan un pasado muy interesante.
Las 23 mediciones realizadas por el rover Pragyan apuntan a que el terreno lunar en esta región es notablemente uniforme y está compuesto predominantemente de anortosita ferrosa (FAN). La anortosita ferrosa es un tipo de roca que se formó a partir de la cristalización del océano de magma lunar (LMO, como se conoce técnicamente) durante las primeras etapas de la formación de la Luna. Esta roca es rica en minerales como el feldespato y el hierro, lo que le da sus características distintivas.
Según el artículo, un hallazgo interesante es la detección de una mayor abundancia de magnesio en comparación con el calcio, según las mediciones realizadas con el Espectrómetro de Partículas Alfa y Rayos X (APXS) del rover. Esto sugiere la presencia de material máfico mezclado en el terreno. El material máfico es rico en minerales como el olivino y el piroxeno, que contienen más magnesio y hierro. Esta mezcla indica que, aunque la anortosita ferrosa domina, hay aportes de otros tipos de rocas que se han integrado en la superficie lunar a través de procesos geológicos como impactos de meteoritos o actividad volcánica.
La uniformidad del terreno en un área de varias decenas de metros alrededor del lugar de aterrizaje es importante porque sirve como una referencia precisa para las observaciones desde satélites y otras misiones lunares. Santosh Vadawale, astrónomo de rayos X del Laboratorio de Investigación Física de Ahmedabad (India) y autor del estudio, le explicó a Nature que sus hallazgos reafirman, además, la vieja idea que la superficie lunar era un océano de magma fundido después de formarse. Se trata de una hipótesis que apunta a que, durante los primeros tiempos de la Luna, la superficie estaba cubierta por un océano de magma que, al enfriarse, dio lugar a las rocas que ahora se encuentran en la superficie.
Hay que recordar que la Luna se formó después de un impacto entre la Tierra primitiva y un protoplaneta llamado Theia. Este evento, que ocurrió hace aproximadamente 4.5 mil millones de años, provocó la expulsión de grandes cantidades de material al espacio, el cual se agruparía eventualmente para formar la Luna. Se cree que, después del impacto, la superficie lunar estaba cubierta por un océano de magma debido al intenso calor generado por el impacto. A medida que la Luna se fue enfriando, este magma se solidificó.
La misión Chandrayaan-3 de la India es la tercera misión lunar de la India y tiene como objetivo aterrizar de manera segura en la superficie lunar y desplegar el rover Pragyan para llevar a cabo investigaciones científicas. Equipado con diversos instrumentos, el rover está diseñado para analizar la composición del suelo lunar, estudiar la presencia de minerales, y obtener datos importantes sobre la geología de la Luna.