Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
En las últimas semanas, las colecciones biológicas que tiene el Instituto de Ciencias Naturales (ICN) de la Universidad Nacional han vuelto a llamar la atención de la comunidad científica del país y de diversos medios de comunicación. Con las lluvias de los pasados días en la capital del país, ha resurgido un viejo problema que pone en riesgo a las más de 3.5 millones de ejemplares que albergan las colecciones de plantas y las de insectos, aves, anfibios y otras nueve clasificaciones: los dos edificios están agrietados, con filtraciones de humedad y con averías en techos y pisos. Por eso, cada vez que llueve, los profesores que trabajan en la colección temen que esta se inunde. (Puede leer: Lo que revela el mapa de las 35 mil plantas útiles para los humanos)
Ahora, la decana de la Facultad de Ciencias de la Universidad, Martha Raquel Fontanilla, y el director del Instituto, Gonzalo Andrade, le hacen un llamado a los privados y al gobierno de Gustavo Petro para que financien las obras que se requieren.
Sin embargo, como contamos en esta nota a mediados de 2023, este es un viejo problema. Desde por lo menos 2016 se han hecho solicitudes para hacerle un reforzamiento estructural a los edificios. En ese entonces, como nos contaba Andrade, las solicitudes que hizo la Curaduría Urbana llevaron a concluir al equipo del Instituto que era más económico construir un nuevo edificio que reforzar los ya existentes. (Le puede interesar: En fotos: Así se ve un eclipse solar desde Marte)
En julio de 2019, el entonces ministro de Ambiente, Ricardo Lozano, visitó los edificios del ICN y se comprometió a buscar los recursos necesarios para adelantar la construcción de un nuevo edificio. De acuerdo con el proyecto que fue diseñado por la Universidad, se necesitan construir cuatro edificios nuevos para albergar las colecciones y el área administrativa del Instituto. Estas construcciones, estiman Fontanilla y Andrade, tienen un costo de 93.000 millones de pesos.
La cuestión, como señalaron en un reciente video la decana y el director del Instituto, es que las intervenciones que han hecho en los edificios “dejan de ser efectivas con el tiempo”, y que, pese a que la Universidad ya tomó la decisión de derrumbar los dos edificios para darle paso a las nuevas construcciones, no se cuenta con los recursos para adelantar los cuatro edificios. (También puede leer: “Los letreros de fallas geológicas en carreteras no corresponden a la realidad”: SGC)
En el video, Andrade señala que el proyecto ya está en fase 3, pero que necesitan la ayuda de las empresas y el Estado, “para que nos aporten los recursos para poder sacar adelante este proyecto”. “Qué lindo sería —continúa el director del ICN— que el gobierno de Gustavo Petro, la ministra de Ambiente, de Educación, el de Cultura y la de Ciencia, aportaran estos recursos para salvaguardar los datos que tenemos de la biodiversidad de Colombia”.
Mientras tanto, Fontanilla recordó que estas colecciones son patrimonio de la nación y por eso invitó a generar conciencia y a hacer un movimiento que permita reunir el dinero que se necesita para la construcción. (Puede interesarle: Encuentran un huevo de hace 1.700 años con su contenido todavía intacto)
Cabe recordar que entre el Herbario Nacional, donde reposan las láminas de plantas colectadas hace más de 200 años, y las colecciones de insectos, aves, anfibios y otras nueve clasificaciones, hay 3.5 millones de ejemplares, que datan de la época de José Celestino Mutis, cuando emprendió la Expedición Botánica.