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Los científicos no siempre se toman todo tan enserio como se cree. Cada año, reunidos en el salón de ceremonia Sanders Theatre de la Universidad de Harvard se entregan los premios Ig Nobel, una especie de parodia que reconoce las investigaciones más absurdas y, por qué no, inútiles. Bajo el lema de los “premios que primero te hacen reír y luego pensar”, esta semana se celebró la 27 edición que, como siempre, nos recuerda que la ciencia también sabe cómo reírse de sí misma.
¿Un gato actúa como un sólido o como un líquido? Esta pregunta, y los consecutivos esfuerzos para responderla, llevaron a que el francés Marc- Antoine Fardin se llevara el galardón en Física. Su estudio, publicado en Rheology Bulletin en el 2014, llega a la conclusión de que los gatos actúan como un fluido cuando están dentro de una caja o un recipiente. Sin embargo, cuando están en una tina llena de agua van a buscar minimizar su contacto con elsta, por lo que van a comportarse como un sólido. Sin duda, una respuesta que la ciencia llevaba mucho esperando.
Por su parte, los ganadores del Ig Nobel de la paz fueron un equipo de investigadores que demostraron que tocar regularmente el diyeridú, un instrumento de viento ancestral utilizado por los aborígenes de Australia, servía como tratamiento para la apnea del sueño y los ronquidos. ¿Por qué no? Las personas que duermen bien siempre serán más pacíficas, esto sin contar que con la ausencia de ronquidos pueden ahorrarse varios problemas maritales.
El ganador de la categoría Dinámica de Fluidos puede ayudarle a aquellos que les gusta tomar mientras caminan. Según el científico surcoreano Jiwon Han, quien estudió la forma idónea para caminar con una taza de café sin que el oleaje interno haga que se riegue, la mejor manera para lograrlo es haciéndolo de espaldas. Aunque el propio estudio admite que hacerlo de esta manera, también aumenta el riesgo de tropezarse (y por ende, regar el café).
Finalmente, otro de los galardonaos que llamaron la atención del público fue el invento español que les permite a los fetos escuchar música desde las vaginas de sus madres, que se llevó el Ig Nobel de Obstreticia, y el estudio en gemelos para saber si se reconocen a sí mismos cuando se ven en fotos o si ellos mismos se confunden con sus hermanos (ganador de la categoría Cognición).
Otros de los ganadores son:
Ig Nobel de Anatomía: entregado a un estudio realizado en 1993 que se preguntaba por qué los ancianos tienen orejas tan grandes. ¿La respuesta? Porque estas crecen unos 0,2 milímetros cada año.
Ig Nobel de Medicina: ¿Cómo es el cerebro de las personas que no les gusta el queso? La respuesta a esta pregunta vino de un estudio realizado por británicos que se dedicaron a escanear los cerebros de las personas a quienes no les gusta este producto.
Ig Nobel de Economía: Australia definitivamente está lleno de particularidades, entre ellos una pareja que quiso saber cómo afectaba el riesgo que tomaban en el juego electrónico las personas después de tener contacto con cocodrilos. “En concreto, los sujetos del estudio sostenían durante un minuto a un cocodrilo joven en sus manos antes de ponerse a apostar”, explica el periódico El País de España.
Para conocer ganadores de anterior edición lea: Estos fueron los ganadores de los premios Nobel a las mayores estupideces