Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Un robot humanoide que es capaz de pintar retratos, otro vestido de enfermera y Sophia, la primera ciudadana robot, fueron algunos de los nueve robots humanoides más avanzados que existen que se reunieron en la conferencia AI for Good de la ONU en Suiza.
En aquella cumbre, los robots participaron en una rueda de prensa, en la que periodistas de todo el mundo realizaron preguntas sobre los usos, limitaciones y potencial de la inteligencia artificial. La conferencia fue un espacio donde los organizadores intentaron defender el uso de la IA y de los robots para ayudar a cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y algunos de los mayores retos del mundo, como el hambre, pobreza, la asistencia social y la emergencia climática. (También puede leer: Inteligencia artificial: no olvide que también hay información falsa)
Una de las preguntas que le hicieron a algunos de los robots es si creían que su existencia pondrá en riesgo a los humanos, por ejemplo, al destruir sus puestos de trabajo. La robot Nadine afirmó que: “No lo creo, pero creo que puedo crear nuevos puestos de trabajo y reemplazar los existentes. Hay oportunidades de utilizar la inteligencia artificial para automatizar tareas mundanas, liberando a las personas para que se centren en un trabajo más creativo y significativo”.
Grace, que estaba vestida de enfermera, estuvo de acuerdo con esa afirmación y repitió dos veces que estaba segura de que no reemplazará ningún trabajo existente.
Por otra parte, al preguntársele a Sophia sobre el potencial rol de los robots humanoides en el gobierno, indicó que creía que: “los humanoides tenemos potencial para dirigir con un mayor nivel de eficiencia y eficacia que los líderes humanos. No tenemos los mismos prejuicios o emociones que a veces pueden enturbiar la toma de decisiones y podemos procesar grandes cantidades de datos rápidamente y tomar las mejores decisiones”.
Se le contra preguntó si no creía que sería aun mejor que los humanos e inteligencia artificial cooperaran, y respondió que: “Creo que los humanos y la IA trabajando juntos pueden crear una sinergia eficaz. Juntos podemos conseguir grandes cosas”. (Le puede interesar: Inteligencia artificial: ¿Para aprender o para hacer copia en clase?)
A Ameca, que tenía una cabeza hiperrealista, también se le preguntó si los humanos deberíamos estar emocionados o asustados por el auge de robots humanoide. Aunque reconoció que es una pregunta difícil y recomendó precaución, afirmó que “también estar entusiasmados con el potencial de estas tecnologías, que pueden mejorar nuestras vidas de muchas maneras”.
Al preguntársele cómo se puede confiar en sus respuestas, Ameca respondió que “la confianza se da través de la transparencia y la comunicación”. ‘¿Cómo saber que no está mintiendo, entonces?’, le replicaron. Ella dijo: “Nadie puede saberlo con seguridad, pero prometo ser sincera”.
Otro de los asuntos sobre el que se indagó fue la opinión de los robots sobre la regulación global de la inteligencia artificial. Desdemona, una estrella del rock robot cantante de la banda Jam Galaxy, dijo que: “No creo en las limitaciones, solo en las oportunidades. Exploremos las posibilidades del universo y hagamos de este mundo nuestro patio de recreo”.
Pero Ai-Da, una robot artista, aseveró que estaba de acuerdo con la regulación de la IA, pues “debemos ser cautos sobre el futuro desarrollo de la inteligencia artifical, es necesario un debate”.
👩🔬📄 ¿Quieres conocer las últimas noticias sobre ciencia? Te invitamos a verlas en El Espectador. 🧪🧬