¿Qué tiene que ver el cambio climático con la calidad del vino?
Un reciente estudio detalla la influencia fundamental del clima, más allá de la temporada de crecimiento, en la creación de vinos. La escasez de agua en el futuro podría llevar al fracaso de este sector de la economía.
Andrew Wood, estudiante de doctorado en el Departamento de Biología de la Universidad de Oxford se preguntó como la variabilidad climática afecta la calidad del vino de la región vinícola de Burdeos, en Francia. Su estudio, recién publicado en la revista iScience, trata de comprender cómo las variaciones climáticas podrían estar relacionadas con la calidad del vino, un fenómeno que ha intrigado a productores y aficionados por igual durante las últimas décadas.
Para comenzar, el artículo señala que el cambio climático está afectando globalmente a los productos agrícolas, tanto en términos de rendimiento como de calidad. A pesar de estos efectos esperados, el vínculo entre el cambio climático y la calidad de los productos agrícolas no se ha explorado ampliamente. El vino (Vitis vinifera) presenta el sistema ideal para estudiar esta relación, ya que su precio se rige principalmente por la calidad, que depende a su vez del clima durante la temporada de crecimiento de vid (o cepa o parra) una planta trepadora, leñosa, de la especia ‘vitis vinifera’ cuyo fruto es la uva con la que se elaboran los vino.
Para hacerlo, Wood y su equipo estudiaron un período de tiempo que abarcó desde 1950 hasta 2020, combinando datos climáticos detallados con puntuaciones anuales otorgadas por críticos de vino en Burdeos. Los resultados revelaron que el clima no solo influye durante la temporada de crecimiento, sino también en los períodos invernales de inactividad de la planta. En general, los vinos de alta calidad se asociaron con inviernos más fríos y húmedos; manantiales más cálidos y húmedos; veranos calurosos y secos; y otoños frescos y secos. (Puede ver: Las imágenes que dejó el eclipse anular de Sol en América)
Si bien la tendencia parece positiva, pues el cambio climático está provocando este tipo de patrones climáticos en Burdeos, los investigadores señalan que esto será así hasta que el agua se vea limitada. “El problema en escenarios donde hace mucho calor es el agua: si las plantas no tienen suficiente, eventualmente fallan, y cuando fallan, se pierde todo”, señala Wood, citado por una nota de su universidad. “Pero la idea general o el consenso es que los vinos seguirán mejorando hasta el punto en que fracasen”.
Andrew Wood, estudiante de doctorado en el Departamento de Biología de la Universidad de Oxford se preguntó como la variabilidad climática afecta la calidad del vino de la región vinícola de Burdeos, en Francia. Su estudio, recién publicado en la revista iScience, trata de comprender cómo las variaciones climáticas podrían estar relacionadas con la calidad del vino, un fenómeno que ha intrigado a productores y aficionados por igual durante las últimas décadas.
Para comenzar, el artículo señala que el cambio climático está afectando globalmente a los productos agrícolas, tanto en términos de rendimiento como de calidad. A pesar de estos efectos esperados, el vínculo entre el cambio climático y la calidad de los productos agrícolas no se ha explorado ampliamente. El vino (Vitis vinifera) presenta el sistema ideal para estudiar esta relación, ya que su precio se rige principalmente por la calidad, que depende a su vez del clima durante la temporada de crecimiento de vid (o cepa o parra) una planta trepadora, leñosa, de la especia ‘vitis vinifera’ cuyo fruto es la uva con la que se elaboran los vino.
Para hacerlo, Wood y su equipo estudiaron un período de tiempo que abarcó desde 1950 hasta 2020, combinando datos climáticos detallados con puntuaciones anuales otorgadas por críticos de vino en Burdeos. Los resultados revelaron que el clima no solo influye durante la temporada de crecimiento, sino también en los períodos invernales de inactividad de la planta. En general, los vinos de alta calidad se asociaron con inviernos más fríos y húmedos; manantiales más cálidos y húmedos; veranos calurosos y secos; y otoños frescos y secos. (Puede ver: Las imágenes que dejó el eclipse anular de Sol en América)
Si bien la tendencia parece positiva, pues el cambio climático está provocando este tipo de patrones climáticos en Burdeos, los investigadores señalan que esto será así hasta que el agua se vea limitada. “El problema en escenarios donde hace mucho calor es el agua: si las plantas no tienen suficiente, eventualmente fallan, y cuando fallan, se pierde todo”, señala Wood, citado por una nota de su universidad. “Pero la idea general o el consenso es que los vinos seguirán mejorando hasta el punto en que fracasen”.