Resuelven el misterio del tsunami volcánico en el mar Egeo después de 373 años
La causa de un tsunami que impactó con olas de más de 20 metros varias islas de Grecia hace casi 400 años, permanecía desconocida hasta ahora. Los tsunamis volcánicos han causado más de 55.000 víctimas mortales desde finales del siglo 18.
En 1650, en el mar Egeo, entre Grecia y Turquía, un tsunami con olas de más de 20 metros impactaron, según registros históricos, una serie de islas en la región Mediterráneo, en hechos que fueron registrados en testimonios de la época. Hasta ahora la explicación de este importante desastre natural seguía siendo un misterio.
Hasta la fecha se sabía que el evento fue producido por la erupción del volcán submarino Kolumbo, ubicado siete kilómetros al noreste de Santorini, que causó que el mar retrocedería de las costas e impactara contra varias edificaciones de la zona.
Antes del desastre, según testimonios históricos, la gente informó durante semanas de que el color del agua había cambiado y que esta estaba hirviendo. Esto se debió, según se conoció después, a que en la zona había emergido un volcán submarino y comenzó a expulsar rocas incandescentes. (Lea también: La ONU busca aprovechar la Inteligencia Artificial para el desarrollo sostenible.)
Días después, la enorme explosión se escuchó a más de 100 kilómetros de distancia, y piedra volcánica y ceniza cayeron sobre las islas circundantes, así como una nube mortal de gas venenoso se cobró varias vidas.
Si bien se tenía conocimiento del papel del volcán en el evento, las simulaciones en computadores indicaban que la explosión por sí misma no era suficiente para explicar la magnitud del tsunami.
De esta manera, un grupo de investigadores liderado por Jens Karsten del Centro Helmholtz GEOMAR de Investigación Oceánica de Kiel, estudiaron el cráter submarino de Kolumbo con tecnologías modernas de modelación y las reconstrucciones de los acontecimientos históricos.
“Conocemos estos detalles de la erupción histórica del Kolumbo porque existen informes contemporáneos recopilados y publicados por un vulcanólogo francés en el siglo XIX, pero queríamos entender cómo se produjo el tsunami en ese momento y por qué el volcán explotó tan violentamente”, explica el Dr. Jens Karstens, geofísico marino del Centro Helmholtz GEOMAR de Investigación Oceánica de Kiel.
Sus hallazgos, que fueron publicados hace algunas semanas en la revista Nature Communications, explica que el desastre natural solo puede ser explicado a través de una combinación de deslizamiento interno seguido por una explosión del volcán.
Para llegar a estos resultados, el equipo de investigadores, a bordo un buque de investigación Poseidón, actualmente fuera de servicio, utilizaron métodos para crear imágenes en tres dimensiones del cráter del volcán Kolumbo que se encuentra a más de 18 metros debajo de la superficie.
Estas representaciones mostraron que el cráter tenía alrededor de 2,5 kilómetros de diámetro y 500 metros de profundidad, lo que comprobaría una explosión masiva, además, uno de los perfiles sísmico reveló que uno de los costados se había deformado de manera importante.
Así, se llegó la conclusión que un deslizamiento podía explicar el tsunami, lo que fue corroborado con simulaciones en computador que arrojaron resultados similares a los descritos en recuentos históricos.
“Kolumbo está formado en parte por piedra volcánica con pendientes muy pronunciadas. No es muy estable. Durante la erupción, que duró varias semanas, se expulsó lava continuamente. Debajo, en la cámara magmática, que contenía mucho gas, había una enorme presión. Cuando uno de los flancos del volcán se deslizó, el efecto fue como descorchar una botella de champán: la súbita liberación de presión permitió que el gas del sistema magmático se expandiera, lo que provocó una enorme explosión”, según Karstens, autor del estudio.
Podría interesarle: Imágenes desclasificadas de la Guerra Fría revelan increíbles construcciones romanas.
En ese sentido, según el grupo de científicos, algo similar habría ocurrido durante la erupción del volcán submarino Hunga Tonga, cuyo cráter volcánico tiene una forma similar al de Kolumbo. Se estima, por su parte, que los tsunamis volcánicos han causado más de 55.000 víctimas mortales desde finales del siglo 18.
Por esta razón, este estudio arroja información crucial para el desarrollo de programas de monitoreo de actividad volcánica submarina y en el esfuerzo lograr un sistema de alertas tempranas para evitar desastres naturales de este tipo que afectan a las comunidades hace siglos.
🌳 📄 ¿Quieres conocer las últimas noticias sobre el ambiente? Te invitamos a verlas en El Espectador. 🐝🦜
En 1650, en el mar Egeo, entre Grecia y Turquía, un tsunami con olas de más de 20 metros impactaron, según registros históricos, una serie de islas en la región Mediterráneo, en hechos que fueron registrados en testimonios de la época. Hasta ahora la explicación de este importante desastre natural seguía siendo un misterio.
Hasta la fecha se sabía que el evento fue producido por la erupción del volcán submarino Kolumbo, ubicado siete kilómetros al noreste de Santorini, que causó que el mar retrocedería de las costas e impactara contra varias edificaciones de la zona.
Antes del desastre, según testimonios históricos, la gente informó durante semanas de que el color del agua había cambiado y que esta estaba hirviendo. Esto se debió, según se conoció después, a que en la zona había emergido un volcán submarino y comenzó a expulsar rocas incandescentes. (Lea también: La ONU busca aprovechar la Inteligencia Artificial para el desarrollo sostenible.)
Días después, la enorme explosión se escuchó a más de 100 kilómetros de distancia, y piedra volcánica y ceniza cayeron sobre las islas circundantes, así como una nube mortal de gas venenoso se cobró varias vidas.
Si bien se tenía conocimiento del papel del volcán en el evento, las simulaciones en computadores indicaban que la explosión por sí misma no era suficiente para explicar la magnitud del tsunami.
De esta manera, un grupo de investigadores liderado por Jens Karsten del Centro Helmholtz GEOMAR de Investigación Oceánica de Kiel, estudiaron el cráter submarino de Kolumbo con tecnologías modernas de modelación y las reconstrucciones de los acontecimientos históricos.
“Conocemos estos detalles de la erupción histórica del Kolumbo porque existen informes contemporáneos recopilados y publicados por un vulcanólogo francés en el siglo XIX, pero queríamos entender cómo se produjo el tsunami en ese momento y por qué el volcán explotó tan violentamente”, explica el Dr. Jens Karstens, geofísico marino del Centro Helmholtz GEOMAR de Investigación Oceánica de Kiel.
Sus hallazgos, que fueron publicados hace algunas semanas en la revista Nature Communications, explica que el desastre natural solo puede ser explicado a través de una combinación de deslizamiento interno seguido por una explosión del volcán.
Para llegar a estos resultados, el equipo de investigadores, a bordo un buque de investigación Poseidón, actualmente fuera de servicio, utilizaron métodos para crear imágenes en tres dimensiones del cráter del volcán Kolumbo que se encuentra a más de 18 metros debajo de la superficie.
Estas representaciones mostraron que el cráter tenía alrededor de 2,5 kilómetros de diámetro y 500 metros de profundidad, lo que comprobaría una explosión masiva, además, uno de los perfiles sísmico reveló que uno de los costados se había deformado de manera importante.
Así, se llegó la conclusión que un deslizamiento podía explicar el tsunami, lo que fue corroborado con simulaciones en computador que arrojaron resultados similares a los descritos en recuentos históricos.
“Kolumbo está formado en parte por piedra volcánica con pendientes muy pronunciadas. No es muy estable. Durante la erupción, que duró varias semanas, se expulsó lava continuamente. Debajo, en la cámara magmática, que contenía mucho gas, había una enorme presión. Cuando uno de los flancos del volcán se deslizó, el efecto fue como descorchar una botella de champán: la súbita liberación de presión permitió que el gas del sistema magmático se expandiera, lo que provocó una enorme explosión”, según Karstens, autor del estudio.
Podría interesarle: Imágenes desclasificadas de la Guerra Fría revelan increíbles construcciones romanas.
En ese sentido, según el grupo de científicos, algo similar habría ocurrido durante la erupción del volcán submarino Hunga Tonga, cuyo cráter volcánico tiene una forma similar al de Kolumbo. Se estima, por su parte, que los tsunamis volcánicos han causado más de 55.000 víctimas mortales desde finales del siglo 18.
Por esta razón, este estudio arroja información crucial para el desarrollo de programas de monitoreo de actividad volcánica submarina y en el esfuerzo lograr un sistema de alertas tempranas para evitar desastres naturales de este tipo que afectan a las comunidades hace siglos.
🌳 📄 ¿Quieres conocer las últimas noticias sobre el ambiente? Te invitamos a verlas en El Espectador. 🐝🦜