Se revela el misterio: un joven magnate japonés será el primer turista a la Luna
Yusaku Maezawa, un joven multimillonario japonés, será la primera persona en ir en plan turístico a la luna con la empresa espacial de Elon Musk, SpaceX. Emprenderá su viaje en 2023.
Ivan Couronne / AFP
SpaceX, compañía de tecnología espacial de Elon Musk, reveló este lunes el nombre del misterioso pasajero que planea enviar a la órbita de la Luna: el multimillonario japonés Yusaku Maezawa.
"¡Decidí ir a la Luna!" lanzó repetidamente Yusaku Maezawa, eufórico, durante el evento que se realizó para la ocasión en la sede de SpaceX en Hawthorne, California, en el área metropolitana de Los Ángeles. El magnate dijo que ese era su "sueño de la infancia".
Pero Yusaku Maezawa, de 42 años y fundador de la galería comercial de moda en línea más grande de Japón, sorprendió con un anuncio: "En 2023, voy a invitar a seis u ocho artistas de todo el mundo a unirse a mí en esta misión a la Luna", dijo.
Sin embargo, dejó en claro que esto tendrá un costo para los invitados: "Tendrán que crear algo a su retorno a la Tierra... Sus obras inspirarán a todos los soñadores que están latentes en nosotros", aseguró.
Maezawa será el primer viajero lunar desde la misión estadounidense del Apolo en 1972.
La identidad del afortunado se mantuvo en secreto a pesar de una avalancha de preguntas en Twitter que doblegó a Musk para adelantarla. Sin embargo, el empresario había dado una pista en Twitter ante una pregunta sobre si él mismo sería el pasajero: tuiteó un emoticón de una bandera japonesa.
Hasta ahora, los únicos que han dejado la órbita de la Tierra han sido estadounidenses. Un total de 24 astronautas de la NASA, todos hombres, viajaron a la Luna durante la era de las misiones Apolo en las décadas de 1960 y 1970. Doce de ellos caminaron en la superficie lunar.
Al anunciar el evento la semana pasada, SpaceX describió el ambicioso proyecto como "un paso importante para habilitar el acceso a personas comunes que sueñan con viajar al espacio".
Maezawa adelantó que ya pagó la reserva de todos los asientos en el cohete SpaceX RGC que se está construyendo, pero sin revelar el precio total de los billetes.
El viaje se llevará a cabo a bordo del Big Falcon Rocket (BFR), que hasta ahora solo se ha mostrado en diseños e imágenes.
El BFR fue anunciado en 2016 como el cohete más poderoso que se haya inventado jamás, con más potencia que el Saturn V Moon, que lanzó las misiones Apolo hace cinco décadas.
El jefe de operaciones de SpaceX, Gwynne Shotwell, habló de un primer vuelo de prueba del BFR el próximo año.
"Especie multiplanetaria"
Esta no es la primera vez que Musk ha prometido enviar turistas a la Luna. El año pasado, dijo que dos turistas pagarían por orbitar la Luna en 2018, pero esos planes no se materializaron.
Mientras la expectativa crece sobre el cohete, Musk tuiteó tres imágenes, mostrando que tendrá una primera parte con motores y sistemas de combustible, y una segunda con la nave en la que viajarán los pasajeros.
Musk estimó que su construcción podría tener un costo de unos 5.000 millones de dólares.
Al igual que en los cohetes desarrollados antes por SpaceX, el Falcon 9 y el Falcon Heavy, la primera parte puede separarse del resto del cohete y regresar a la Tierra para un aterrizaje vertical.
La nave continuará hacia la Luna, impulsada por sus motores.
La forma del BFR es una reminiscencia de los transbordadores espaciales, las naves que llevaron a los astronautas al espacio 135 veces desde 1981 hasta 2011.
Musk ha dicho que quiere que el BFR tenga capacidad para unas 100 personas. El volumen de su área presurizada interior sería comparable a la de un Airbus A380, algo que nunca se ha hecho.
También sostuvo que el sistema de lanzamiento podría algún día ser utilizado para colonizar la Luna y Marte, a fin de hacer de los humanos una especie "multiplanetaria".
Aunque esos destinos tienen distinta complejidad: mientras que un viaje a Marte puede llevar de dos a seis meses, ir a la Luna suele demandar unos tres días.
El viaje a la Luna de SpaceX promete ser muy superior a los planes de turismo espacial actualmente en marcha en otras compañías privadas.
Virgin Galactic, fundada por el magnate británico Richard Branson, y la compañía de cohetes Blue Origin del multimillonario fundador de Amazon, Jeff Bezos, están trabajando en viajes al espacio que podrían ofrecer a los turistas una oportunidad de ingravidez durante alrededor de 10 minutos.
El viaje de Virgin costará alrededor de 250.000 dólares. El precio de Blue Origin aún no ha sido revelado.
Otras compañías rusas y chinas también están trabajando en planes de turismo espacial.
"La mayor prioridad de SpaceX es y seguirá siendo apoyar el vuelo espacial tripulado de @NASA y las misiones de Seguridad Nacional", tuiteó el lunes Musk.
SpaceX, compañía de tecnología espacial de Elon Musk, reveló este lunes el nombre del misterioso pasajero que planea enviar a la órbita de la Luna: el multimillonario japonés Yusaku Maezawa.
"¡Decidí ir a la Luna!" lanzó repetidamente Yusaku Maezawa, eufórico, durante el evento que se realizó para la ocasión en la sede de SpaceX en Hawthorne, California, en el área metropolitana de Los Ángeles. El magnate dijo que ese era su "sueño de la infancia".
Pero Yusaku Maezawa, de 42 años y fundador de la galería comercial de moda en línea más grande de Japón, sorprendió con un anuncio: "En 2023, voy a invitar a seis u ocho artistas de todo el mundo a unirse a mí en esta misión a la Luna", dijo.
Sin embargo, dejó en claro que esto tendrá un costo para los invitados: "Tendrán que crear algo a su retorno a la Tierra... Sus obras inspirarán a todos los soñadores que están latentes en nosotros", aseguró.
Maezawa será el primer viajero lunar desde la misión estadounidense del Apolo en 1972.
La identidad del afortunado se mantuvo en secreto a pesar de una avalancha de preguntas en Twitter que doblegó a Musk para adelantarla. Sin embargo, el empresario había dado una pista en Twitter ante una pregunta sobre si él mismo sería el pasajero: tuiteó un emoticón de una bandera japonesa.
Hasta ahora, los únicos que han dejado la órbita de la Tierra han sido estadounidenses. Un total de 24 astronautas de la NASA, todos hombres, viajaron a la Luna durante la era de las misiones Apolo en las décadas de 1960 y 1970. Doce de ellos caminaron en la superficie lunar.
Al anunciar el evento la semana pasada, SpaceX describió el ambicioso proyecto como "un paso importante para habilitar el acceso a personas comunes que sueñan con viajar al espacio".
Maezawa adelantó que ya pagó la reserva de todos los asientos en el cohete SpaceX RGC que se está construyendo, pero sin revelar el precio total de los billetes.
El viaje se llevará a cabo a bordo del Big Falcon Rocket (BFR), que hasta ahora solo se ha mostrado en diseños e imágenes.
El BFR fue anunciado en 2016 como el cohete más poderoso que se haya inventado jamás, con más potencia que el Saturn V Moon, que lanzó las misiones Apolo hace cinco décadas.
El jefe de operaciones de SpaceX, Gwynne Shotwell, habló de un primer vuelo de prueba del BFR el próximo año.
"Especie multiplanetaria"
Esta no es la primera vez que Musk ha prometido enviar turistas a la Luna. El año pasado, dijo que dos turistas pagarían por orbitar la Luna en 2018, pero esos planes no se materializaron.
Mientras la expectativa crece sobre el cohete, Musk tuiteó tres imágenes, mostrando que tendrá una primera parte con motores y sistemas de combustible, y una segunda con la nave en la que viajarán los pasajeros.
Musk estimó que su construcción podría tener un costo de unos 5.000 millones de dólares.
Al igual que en los cohetes desarrollados antes por SpaceX, el Falcon 9 y el Falcon Heavy, la primera parte puede separarse del resto del cohete y regresar a la Tierra para un aterrizaje vertical.
La nave continuará hacia la Luna, impulsada por sus motores.
La forma del BFR es una reminiscencia de los transbordadores espaciales, las naves que llevaron a los astronautas al espacio 135 veces desde 1981 hasta 2011.
Musk ha dicho que quiere que el BFR tenga capacidad para unas 100 personas. El volumen de su área presurizada interior sería comparable a la de un Airbus A380, algo que nunca se ha hecho.
También sostuvo que el sistema de lanzamiento podría algún día ser utilizado para colonizar la Luna y Marte, a fin de hacer de los humanos una especie "multiplanetaria".
Aunque esos destinos tienen distinta complejidad: mientras que un viaje a Marte puede llevar de dos a seis meses, ir a la Luna suele demandar unos tres días.
El viaje a la Luna de SpaceX promete ser muy superior a los planes de turismo espacial actualmente en marcha en otras compañías privadas.
Virgin Galactic, fundada por el magnate británico Richard Branson, y la compañía de cohetes Blue Origin del multimillonario fundador de Amazon, Jeff Bezos, están trabajando en viajes al espacio que podrían ofrecer a los turistas una oportunidad de ingravidez durante alrededor de 10 minutos.
El viaje de Virgin costará alrededor de 250.000 dólares. El precio de Blue Origin aún no ha sido revelado.
Otras compañías rusas y chinas también están trabajando en planes de turismo espacial.
"La mayor prioridad de SpaceX es y seguirá siendo apoyar el vuelo espacial tripulado de @NASA y las misiones de Seguridad Nacional", tuiteó el lunes Musk.