Una nave comercial con bandera de EE. UU. logra una hazaña y aterriza en la Luna
La nave de producción privada, pero con apoyo de la NASA, representa el regreso de Estados Unidos al satélite después de medio siglo desde la última misión Apolo.
La nave Odysseus (u Odiseo, en español) ha logrado aterrizar con éxito en el polo sur de la Luna este jueves. De la mano de una empresa privada, llamada Intuitive Machines, Estados Unidos vuelve a poner un artefacto con su bandera en el satélite natural de la Tierra, después de medio siglo desde la última misión Apolo.
“Tu pedido fue entregado… ¡a la Luna! El módulo de aterrizaje lunar no tripulado aterrizó a las 6:23 p.m. ET (2323 UTC), llevando la ciencia de la NASA a la superficie de la Luna. Estos instrumentos nos prepararán para la futura exploración humana de la Luna bajo #Artemis”, celebró la agencia en su cuenta en X (antes Twitter).
Antes de hacer el procedimiento de descenso, la nave espacial orbitó la Luna durante aproximadamente un día. Horas antes del proceso, la NASA confirmó que los instrumentos científicos de la agencia a bordo habían completado sus comprobaciones de tránsito, recibido datos y estaban funcionando correctamente.
Esta misión es la primera misión de la compañía a través de la iniciativa Commercial Lunar Payload Services de la agencia, cuyo objetivo es obtener nuevos conocimientos sobre el entorno lunar y expandir la economía lunar para respaldar futuras misiones tripuladas bajo la campaña Artemis de la NASA.
“Nuestro equipo está sobre la superficie de la Luna”, dijo el director de la misión para confirmar el éxito de la operación. La sala, donde los expertos de la NASA seguían la operación, estalló en aplausos. “Hoy, por primera vez en más de medio siglo, Estados Unidos ha vuelto a la Luna. Hoy, por primera vez en la historia de la humanidad, una empresa comercial y americana ha lanzado y liderado el viaje hasta allí. Y hoy es un día que muestra el poder y la promesa de las asociaciones comerciales de la NASA. Enhorabuena a todos los implicados en esta gran y audaz búsqueda en máquinas intuitivas, a SpaceX y aquí mismo en la NASA. ¡Vaya triunfo! Odiseo ha tomado la Luna”, celebró Bill Nelson, administrador de la NASA.
“Odiseo tiene un nuevo hogar”, se limitó a decir el Intuitive Machines. El éxito no es menor. Esta operación se convierte en la primera de naturaleza privada y comercial que logra aterriza en la Luna. Durante enero países como Japón lo intentaron, sin lograr una operación completamente exitosa. La sonda japonesa SLIM logró el aterrizaje, pero lo hizo de lado, lo que dificulta que sus paneles puedan recibir los rayos del Sol para tener energía. Incluso Estados Unidos también lo intentó con la nave Peregrino de la compañía Astrobotic, que poco después de despegar tuvo un error en sus sistemas de propulsión que la llevaron al fracaso.
“Podemos confirmar sin duda alguna que nuestro equipo está en la superficie de la Luna, y estamos transmitiendo” declaró Tim Crain de Intuitive Machines durante la transmisión en directo en video de la empresa. “Felicitaciones, equipo de IM, veremos cuánto más podemos conseguir con esto”, añadió.
¿La era espacial comercial?
Esta misión era importante no solo por el mero hecho de regresar a la Luna, sino porque hace parte de un programa en el que NASA ha decidido trabajar con varias empresas estadounidenses “para llevar ciencia y tecnología a la superficie lunar”. La estrategia Commercial Lunar Payload Services busca que empresas de distintos tamaños se ofrezcan para entregar cargas útiles para la NASA, incluida la integración y operaciones de la carga útil, el lanzamiento desde la Tierra y el aterrizaje en la superficie de la Luna.
La agencia espera que las investigaciones y demostraciones realizadas en vuelos comerciales a la Luna la ayuden a estudiar el vecino más cercano de la Tierra con miras a Artemisa. La NASA nombró así a la serie de misiones a la primera mujer a la Luna, utilizando tecnologías innovadoras para explorar más superficie lunar. “Colaboraremos con socios comerciales e internacionales y estableceremos la primera presencia a largo plazo en la Luna. Luego, usaremos lo que aprendamos sobre la Luna y sus alrededores para dar el siguiente gran salto: enviar a los primeros astronautas a Marte”, promete la agencia estadounidense.
La nave Odysseus (u Odiseo, en español) ha logrado aterrizar con éxito en el polo sur de la Luna este jueves. De la mano de una empresa privada, llamada Intuitive Machines, Estados Unidos vuelve a poner un artefacto con su bandera en el satélite natural de la Tierra, después de medio siglo desde la última misión Apolo.
“Tu pedido fue entregado… ¡a la Luna! El módulo de aterrizaje lunar no tripulado aterrizó a las 6:23 p.m. ET (2323 UTC), llevando la ciencia de la NASA a la superficie de la Luna. Estos instrumentos nos prepararán para la futura exploración humana de la Luna bajo #Artemis”, celebró la agencia en su cuenta en X (antes Twitter).
Antes de hacer el procedimiento de descenso, la nave espacial orbitó la Luna durante aproximadamente un día. Horas antes del proceso, la NASA confirmó que los instrumentos científicos de la agencia a bordo habían completado sus comprobaciones de tránsito, recibido datos y estaban funcionando correctamente.
Esta misión es la primera misión de la compañía a través de la iniciativa Commercial Lunar Payload Services de la agencia, cuyo objetivo es obtener nuevos conocimientos sobre el entorno lunar y expandir la economía lunar para respaldar futuras misiones tripuladas bajo la campaña Artemis de la NASA.
“Nuestro equipo está sobre la superficie de la Luna”, dijo el director de la misión para confirmar el éxito de la operación. La sala, donde los expertos de la NASA seguían la operación, estalló en aplausos. “Hoy, por primera vez en más de medio siglo, Estados Unidos ha vuelto a la Luna. Hoy, por primera vez en la historia de la humanidad, una empresa comercial y americana ha lanzado y liderado el viaje hasta allí. Y hoy es un día que muestra el poder y la promesa de las asociaciones comerciales de la NASA. Enhorabuena a todos los implicados en esta gran y audaz búsqueda en máquinas intuitivas, a SpaceX y aquí mismo en la NASA. ¡Vaya triunfo! Odiseo ha tomado la Luna”, celebró Bill Nelson, administrador de la NASA.
“Odiseo tiene un nuevo hogar”, se limitó a decir el Intuitive Machines. El éxito no es menor. Esta operación se convierte en la primera de naturaleza privada y comercial que logra aterriza en la Luna. Durante enero países como Japón lo intentaron, sin lograr una operación completamente exitosa. La sonda japonesa SLIM logró el aterrizaje, pero lo hizo de lado, lo que dificulta que sus paneles puedan recibir los rayos del Sol para tener energía. Incluso Estados Unidos también lo intentó con la nave Peregrino de la compañía Astrobotic, que poco después de despegar tuvo un error en sus sistemas de propulsión que la llevaron al fracaso.
“Podemos confirmar sin duda alguna que nuestro equipo está en la superficie de la Luna, y estamos transmitiendo” declaró Tim Crain de Intuitive Machines durante la transmisión en directo en video de la empresa. “Felicitaciones, equipo de IM, veremos cuánto más podemos conseguir con esto”, añadió.
¿La era espacial comercial?
Esta misión era importante no solo por el mero hecho de regresar a la Luna, sino porque hace parte de un programa en el que NASA ha decidido trabajar con varias empresas estadounidenses “para llevar ciencia y tecnología a la superficie lunar”. La estrategia Commercial Lunar Payload Services busca que empresas de distintos tamaños se ofrezcan para entregar cargas útiles para la NASA, incluida la integración y operaciones de la carga útil, el lanzamiento desde la Tierra y el aterrizaje en la superficie de la Luna.
La agencia espera que las investigaciones y demostraciones realizadas en vuelos comerciales a la Luna la ayuden a estudiar el vecino más cercano de la Tierra con miras a Artemisa. La NASA nombró así a la serie de misiones a la primera mujer a la Luna, utilizando tecnologías innovadoras para explorar más superficie lunar. “Colaboraremos con socios comerciales e internacionales y estableceremos la primera presencia a largo plazo en la Luna. Luego, usaremos lo que aprendamos sobre la Luna y sus alrededores para dar el siguiente gran salto: enviar a los primeros astronautas a Marte”, promete la agencia estadounidense.