Una niña encontró restos de un mamut que se habría extinguido hace 100.000 años
Tatyana Kolpakova, de tan solo 8 años, encontró parte del fémur de un mamut que habitó la región de Nizhni Nóvgorod, en Rusia, hace cientos de miles de años.
A inicios de octubre, Tatyana Kolpakova, una niña de 8 años que vive en Novinki, un pequeño poblado del óblast de Arcángel, en el noroccidente de Rusia, salió a pescar junto a su padre al río Oka. La jornada transcurrió como de costumbre hasta que, en la orilla del río, unos particulares objetos llamaron la atención de la niña que procedió a recogerlos. (Puede leer: Relatos indígenas de Tasmania podrían ser los más antiguos que se conozcan)
Por la forma de los objetos, el padre de Kolpakova supuso que podía tratarse de un importante hallazgo así que se comunicó con el Museo-Reserva de Nizhni Nóvgorod, una población cercana al pequeño pueblo en el que habitan.
Tras recibir las fotos por parte del padre de la menor, científicos del museo se desplazaron a la orilla del río Oka para investigar, con más detenimiento, el origen de los objetos. Luego de los análisis de rutina, los investigadores se llevaron una gran sorpresa. (Le puede interesar: Encuentran evidencia de que en la Edad Piedra también se usaban chanclas)
Como dio a conocer el museo en la red social rusa ‘VK’, “los insólitos objetos resultaron ser huesos de animales extinguidos: restos de un mamut lanudo, una vértebra del cuello de un bisonte primitivo y un hueso de un animal aún por determinar”.
Entre las partes encontradas por Kolpakova se encuentra el cóndilo del mamut, que corresponde a la parte inferior del fémur, uno de los huesos más largos de estos gigantescos animales que vivieron en la Tierra desde hace unos 450.000 años, podían medir hasta tres metros y medio y pesar más de 7 toneladas. (También puede leer: Esto descubrió el telescopio James Webb en una luna de Júpiter)
Los hallazgos realizados por la menor también incluyen fragmentos del tejido esponjoso y la tibia que, de acuerdo con funcionarios del museo, se encuentran bien conservados. “Los huesos estaban en sedimentos desplazados de la parte superior de la ladera por un corrimiento de tierras y fueron arrastrados por el río”, explicó el museo en su publicación en ‘VK’.
Aunque los investigadores del Museo-Reserva continúan con sus análisis, estiman que los restos hallados datan de hace 100.000 años. “Esta es otra prueba de la existencia de fauna mamut en el territorio de la región de Nizhni Nóvgorod”, anotaron los científicos de la entidad.
A inicios de octubre, Tatyana Kolpakova, una niña de 8 años que vive en Novinki, un pequeño poblado del óblast de Arcángel, en el noroccidente de Rusia, salió a pescar junto a su padre al río Oka. La jornada transcurrió como de costumbre hasta que, en la orilla del río, unos particulares objetos llamaron la atención de la niña que procedió a recogerlos. (Puede leer: Relatos indígenas de Tasmania podrían ser los más antiguos que se conozcan)
Por la forma de los objetos, el padre de Kolpakova supuso que podía tratarse de un importante hallazgo así que se comunicó con el Museo-Reserva de Nizhni Nóvgorod, una población cercana al pequeño pueblo en el que habitan.
Tras recibir las fotos por parte del padre de la menor, científicos del museo se desplazaron a la orilla del río Oka para investigar, con más detenimiento, el origen de los objetos. Luego de los análisis de rutina, los investigadores se llevaron una gran sorpresa. (Le puede interesar: Encuentran evidencia de que en la Edad Piedra también se usaban chanclas)
Como dio a conocer el museo en la red social rusa ‘VK’, “los insólitos objetos resultaron ser huesos de animales extinguidos: restos de un mamut lanudo, una vértebra del cuello de un bisonte primitivo y un hueso de un animal aún por determinar”.
Entre las partes encontradas por Kolpakova se encuentra el cóndilo del mamut, que corresponde a la parte inferior del fémur, uno de los huesos más largos de estos gigantescos animales que vivieron en la Tierra desde hace unos 450.000 años, podían medir hasta tres metros y medio y pesar más de 7 toneladas. (También puede leer: Esto descubrió el telescopio James Webb en una luna de Júpiter)
Los hallazgos realizados por la menor también incluyen fragmentos del tejido esponjoso y la tibia que, de acuerdo con funcionarios del museo, se encuentran bien conservados. “Los huesos estaban en sedimentos desplazados de la parte superior de la ladera por un corrimiento de tierras y fueron arrastrados por el río”, explicó el museo en su publicación en ‘VK’.
Aunque los investigadores del Museo-Reserva continúan con sus análisis, estiman que los restos hallados datan de hace 100.000 años. “Esta es otra prueba de la existencia de fauna mamut en el territorio de la región de Nizhni Nóvgorod”, anotaron los científicos de la entidad.