Comunidades confinadas, gran preocupación del CICR
En su balance de 2019, Christoph Harnisch, jefe de la delegación, lanzó una alerta por el aumento de víctimas de artefactos explosivos, casos de desaparición y aumento de personas confinadas por la presencia de actores armados.
Redacción Colombia2020
El Comité Internacional de la Cruz Roja en Colombia (CICR) dio a conocer este miércoles su balance anual sobre la situación humanitaria en Colombia. El panorama es preocupante: en el país todavía hay cinco conflictos armados vigentes y va en aumentando el número de personas víctimas de artefactos explosivos y minas antipersonal. Además, advirtió sobre el confinamiento de comunidades por la presencia de actores armados y violaciones graves como desapariciones, reclutamiento forzado y agresiones a misiones médicas.
“Hubo casi una víctima al día de artefactos explosivos y minas antipersonal”, aseguró Christoph Harnisch, jefe de la delegación del CICR en el país. "No sólo afecta a una persona, sino que destruye familias, proyectos de vida y es una afectación permanente en sus vidas. Necesitan una atención importante y una ayuda para el resto de su vida".
En 2019 fueron 352 las víctimas de este hecho, un 59% más que en el 2018. De este número de víctimas, 159 fueron civiles y 42 fallecieron. Además, los departamentos con mayor número de víctimas de este hecho (el 57%) son Norte de Santander, Arauca y Antioquia.
Harnisch aseguró que si bien las cifras de desplazamiento son menores con respecto al 2018, "hay que conectarlo con el confinamiento, dónde sí hay aumento" en el número de personas afectadas. Chocó despertó bastante preocupación en la entidad. De las 27.600 personas que estuvieron confinadas en sus territorios por la presencia de grupos armados y explosivos en 2019, el 83% viven en este departamento. Nariño, por otra parte, fue el departamento con más personas desplazadas de manera forzada (7.700). En total, las víctimas de este flagelo en el país fueron 25.300 en 2019.
“Aunque es evidente que el contexto mejoró de manera importante en muchas partes del país, en otras, las carencias de la respuesta institucional contribuyeron al sufrimiento ya causado por la escalada en la intensidad del conflicto y la violencia armada”, se detalla en el balance anual.
Nuevos casos de personas desaparecidas
El CICR también documentó 93 casos nuevos de personas desaparecidas en medio del conflicto colombiano. “Aunque obtuvimos información sobre 913 de las 2.158 personas que estamos buscando, solo se resolvieron 116 casos, el 5% del total”. Instan al Estado a que les brinden a las familias mejores condiciones de seguridad para reportar casos de desaparición y se le brinde más apoyo a la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas, que nació por el Acuerdo de Paz.
Por otro lado, Harnisch añadió que la reconfiguración y presencia de nuevos grupos armados dificultad su intermediación humanitaria y neutral. "Las comunidades nos dicen que no saben quiénes son estas personas armadas y hay miedo de transmitir información por temor a las represalias. La protección a través del CICR es más complicada porque no son estructuras que atiendan de manera adecuada nuestros llamados para la protección de la población civil", puntualizó.
En total, el CICR documentó 987 violaciones al Derecho Internacional Humanitario en Colombia. El 77% fueron amenazas, homicidios, violencia sexual y reclutamiento de menores.
Finalmente, se dirigió a las autoridades locales recién posesionadas para que tomen con seriedad el desplazamiento y confinamiento de las comunidades y les brinden una atención particular en sus territorios.
El Comité Internacional de la Cruz Roja en Colombia (CICR) dio a conocer este miércoles su balance anual sobre la situación humanitaria en Colombia. El panorama es preocupante: en el país todavía hay cinco conflictos armados vigentes y va en aumentando el número de personas víctimas de artefactos explosivos y minas antipersonal. Además, advirtió sobre el confinamiento de comunidades por la presencia de actores armados y violaciones graves como desapariciones, reclutamiento forzado y agresiones a misiones médicas.
“Hubo casi una víctima al día de artefactos explosivos y minas antipersonal”, aseguró Christoph Harnisch, jefe de la delegación del CICR en el país. "No sólo afecta a una persona, sino que destruye familias, proyectos de vida y es una afectación permanente en sus vidas. Necesitan una atención importante y una ayuda para el resto de su vida".
En 2019 fueron 352 las víctimas de este hecho, un 59% más que en el 2018. De este número de víctimas, 159 fueron civiles y 42 fallecieron. Además, los departamentos con mayor número de víctimas de este hecho (el 57%) son Norte de Santander, Arauca y Antioquia.
Harnisch aseguró que si bien las cifras de desplazamiento son menores con respecto al 2018, "hay que conectarlo con el confinamiento, dónde sí hay aumento" en el número de personas afectadas. Chocó despertó bastante preocupación en la entidad. De las 27.600 personas que estuvieron confinadas en sus territorios por la presencia de grupos armados y explosivos en 2019, el 83% viven en este departamento. Nariño, por otra parte, fue el departamento con más personas desplazadas de manera forzada (7.700). En total, las víctimas de este flagelo en el país fueron 25.300 en 2019.
“Aunque es evidente que el contexto mejoró de manera importante en muchas partes del país, en otras, las carencias de la respuesta institucional contribuyeron al sufrimiento ya causado por la escalada en la intensidad del conflicto y la violencia armada”, se detalla en el balance anual.
Nuevos casos de personas desaparecidas
El CICR también documentó 93 casos nuevos de personas desaparecidas en medio del conflicto colombiano. “Aunque obtuvimos información sobre 913 de las 2.158 personas que estamos buscando, solo se resolvieron 116 casos, el 5% del total”. Instan al Estado a que les brinden a las familias mejores condiciones de seguridad para reportar casos de desaparición y se le brinde más apoyo a la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas, que nació por el Acuerdo de Paz.
Por otro lado, Harnisch añadió que la reconfiguración y presencia de nuevos grupos armados dificultad su intermediación humanitaria y neutral. "Las comunidades nos dicen que no saben quiénes son estas personas armadas y hay miedo de transmitir información por temor a las represalias. La protección a través del CICR es más complicada porque no son estructuras que atiendan de manera adecuada nuestros llamados para la protección de la población civil", puntualizó.
En total, el CICR documentó 987 violaciones al Derecho Internacional Humanitario en Colombia. El 77% fueron amenazas, homicidios, violencia sexual y reclutamiento de menores.
Finalmente, se dirigió a las autoridades locales recién posesionadas para que tomen con seriedad el desplazamiento y confinamiento de las comunidades y les brinden una atención particular en sus territorios.