Comienza la construcción del Plan Nacional de Búsqueda de Desaparecidos en Colombia

Por primera vez, organizaciones sociales y familiares de víctimas de desaparición forzada de todo el país construirán con el Estado un plan nacional para definir las estrategias de búsqueda de los cerca de 120.000 desaparecidos que hay en Colombia en el marco del conflicto armado, según la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD), la entidad que está a cargo de la construcción de este plan por mandato del acuerdo de paz con las Farc.

(Le puede interesar: Piloto de identificación de cuerpos se iniciará en Bogotá, Medellín y Barranquilla)

Uno de los objetivos del plan nacional es recoger toda la información disponible sobre personas desaparecidas en Colombia que tenga la sociedad civil de distintos territorios. Con esta información, se podrá establecer una cifra más fehaciente del número desaparecidos en el país y a su vez, definir las estrategias de búsqueda de estas personas dependiendo del territorio o la forma en la que fueron desaparecidas.

Durante octubre se realizarán ocho encuentros con organizaciones indígenas y afrodescendientes, población LGBTI y mujeres; asociaciones de familiares de desaparición forzada, de víctimas de secuestro y miembros de la Fuerza Pública desaparecidos, así como colombianos en el exilio y oenegés de derechos humanos. Allí podrán dialogar sobre las dificultades de la búsqueda y aportar la información que tengan sobre este fenómeno en Colombia.  

De acuerdo con Luz Marina Monzón, directora de la UBPD, con el plan nacional se debe determinar cuáles son las prioridades en las estrategias de búsqueda. Por ejemplo, a partir de los problemas definidos por las víctimas en estos encuentros, como la desaparición de personas en ríos o en fosas comunes clandestinas, la Unidad establecerá cuál será la ruta de búsqueda a partir de lo que sucedió en ese territorio.

“En el diálogo va a pasar que las víctimas y organizaciones nos van a decir cuántas fosas hay en sus territorios. Eso nos servirá para elaborar e implementar para la búsqueda un registro nacional de fosas, cementerios ilegales y sepulturas”, agrega Monzón.

(Lea: El uso de la tecnología para investigar violaciones a los derechos humanos)

Por otro lado, la Unidad entiende la participación de la sociedad civil como una parte fundamental para realizar su labor con enfoque étnico y de género. Dice Monzón que "al momento de formular las estrategias de búsqueda es clave responder a las inquietudes, aportes o necesidades que tienen distintos sectores en relación con la búsqueda. Por ejemplo, la población indígena nos ha pedido que se defina cuántos de los desaparecidos pertenecen a los pueblos indígenas” y que además el proceso de búsqueda, identificación y entrega de los restos tenga presente sus saberes y tradiciones ancestrales.

El primer encuentro se llevará a cabo este 30 de septiembre y 1 de octubre en Bogotá con asociaciones de familiares de desaparición forzadas y oenegés de derechos humanos.

Los otros seis encuentros serán en: Bucaramanga (Santander) con organizaciones de género, Barranquilla (Atlántico) con organizaciones LGBTI; en Cali (Valle del Cauca) con organizaciones afro, en La Mesa (Cundinamarca) con el movimiento indígena en Colombia; en Neiva (Huila), con organizaciones de familiares de víctimas de secuestro y de miembros de la Fuerza Pública desaparecidos. También se harán entrevistas vía Skype para hablar con víctimas de este crimen en el exilio, específicamente en España, Bélgica, Inglaterra y Argentina.

El último encuentro será con otras organizaciones estatales responsables en la búsqueda e identificación como la Fiscalía, Medicina Legal, la Unidad para las Víctimas, entre otras, para coordinar esfuerzos en esta labor a partir de las peticiones y conclusiones de lo hecho con la sociedad en los siete encuentros.

Cada jornada será de dos días. Se hará a partir de un documento guía establecido por la UBPD que trabajarán las organizaciones el primer día con su acompañamiento. Al otro día, la Unidad recibirá esas conclusiones. Posterior a los ocho encuentros, la UBPD sistematizará la información y estima que para diciembre le entregarán a todo el país la ruta de implementación del plan nacional de búsqueda.

Sin embargo, este no será un documento fijo: “Tendrá que estar en diálogo con los planes regionales y depronto será modificado en algún momento”, asegura Luz Marina Monzón. En este momento, en otras ocho regiones del país, como el pacífico y los Llanos Orientales, se están construyendo los planes regionales de búsqueda que, a diferencia del plan nacional, sí contemplan casos específicos de desaparición.

Por primera vez, organizaciones sociales y familiares de víctimas de desaparición forzada de todo el país construirán con el Estado un plan nacional para definir las estrategias de búsqueda de los cerca de 120.000 desaparecidos que hay en Colombia en el marco del conflicto armado, según la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD), la entidad que está a cargo de la construcción de este plan por mandato del acuerdo de paz con las Farc.

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Uno de los objetivos del plan nacional es recoger toda la información disponible sobre personas desaparecidas en Colombia que tenga la sociedad civil de distintos territorios. Con esta información, se podrá establecer una cifra más fehaciente del número desaparecidos en el país y a su vez, definir las estrategias de búsqueda de estas personas dependiendo del territorio o la forma en la que fueron desaparecidas.

Durante octubre se realizarán ocho encuentros con organizaciones indígenas y afrodescendientes, población LGBTI y mujeres; asociaciones de familiares de desaparición forzada, de víctimas de secuestro y miembros de la Fuerza Pública desaparecidos, así como colombianos en el exilio y oenegés de derechos humanos. Allí podrán dialogar sobre las dificultades de la búsqueda y aportar la información que tengan sobre este fenómeno en Colombia.  

De acuerdo con Luz Marina Monzón, directora de la UBPD, con el plan nacional se debe determinar cuáles son las prioridades en las estrategias de búsqueda. Por ejemplo, a partir de los problemas definidos por las víctimas en estos encuentros, como la desaparición de personas en ríos o en fosas comunes clandestinas, la Unidad establecerá cuál será la ruta de búsqueda a partir de lo que sucedió en ese territorio.

“En el diálogo va a pasar que las víctimas y organizaciones nos van a decir cuántas fosas hay en sus territorios. Eso nos servirá para elaborar e implementar para la búsqueda un registro nacional de fosas, cementerios ilegales y sepulturas”, agrega Monzón.

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Por otro lado, la Unidad entiende la participación de la sociedad civil como una parte fundamental para realizar su labor con enfoque étnico y de género. Dice Monzón que "al momento de formular las estrategias de búsqueda es clave responder a las inquietudes, aportes o necesidades que tienen distintos sectores en relación con la búsqueda. Por ejemplo, la población indígena nos ha pedido que se defina cuántos de los desaparecidos pertenecen a los pueblos indígenas” y que además el proceso de búsqueda, identificación y entrega de los restos tenga presente sus saberes y tradiciones ancestrales.

El primer encuentro se llevará a cabo este 30 de septiembre y 1 de octubre en Bogotá con asociaciones de familiares de desaparición forzadas y oenegés de derechos humanos.

Los otros seis encuentros serán en: Bucaramanga (Santander) con organizaciones de género, Barranquilla (Atlántico) con organizaciones LGBTI; en Cali (Valle del Cauca) con organizaciones afro, en La Mesa (Cundinamarca) con el movimiento indígena en Colombia; en Neiva (Huila), con organizaciones de familiares de víctimas de secuestro y de miembros de la Fuerza Pública desaparecidos. También se harán entrevistas vía Skype para hablar con víctimas de este crimen en el exilio, específicamente en España, Bélgica, Inglaterra y Argentina.

El último encuentro será con otras organizaciones estatales responsables en la búsqueda e identificación como la Fiscalía, Medicina Legal, la Unidad para las Víctimas, entre otras, para coordinar esfuerzos en esta labor a partir de las peticiones y conclusiones de lo hecho con la sociedad en los siete encuentros.

Cada jornada será de dos días. Se hará a partir de un documento guía establecido por la UBPD que trabajarán las organizaciones el primer día con su acompañamiento. Al otro día, la Unidad recibirá esas conclusiones. Posterior a los ocho encuentros, la UBPD sistematizará la información y estima que para diciembre le entregarán a todo el país la ruta de implementación del plan nacional de búsqueda.

Sin embargo, este no será un documento fijo: “Tendrá que estar en diálogo con los planes regionales y depronto será modificado en algún momento”, asegura Luz Marina Monzón. En este momento, en otras ocho regiones del país, como el pacífico y los Llanos Orientales, se están construyendo los planes regionales de búsqueda que, a diferencia del plan nacional, sí contemplan casos específicos de desaparición.