En un video corto, Camilo González Posso, jefe de la delegación del Gobierno en el proceso de paz con los frentes de la mayor disidencia de las FARC, Estado Mayor Central, que continúan en la mesa, se pronunció sobre el reciente atentado perpetrado contra el padre de la vicepresidenta Francia Márquez y otros familiares en Jamundí, Valle.
Los hechos ocurrieron en la vía Suárez-Cali. El vehículo en el que se movilizaba el señor Sigifredo Márquez Trujillo fue impactado por cuatro balas, pero ni él ni el menor de edad que lo acompañaba —el sobrino de la vicepresidenta— reportaron heridas.
Al respecto, varias personalidades rechazaron el ataque, entre ellos González Posso.
“Condenamos el atentado contra los familiares de la vicepresidenta, Francia Márquez, en el norte del Cauca”, dijo.
El negociador agregó que los grupos armados deben respetar a las personas que no representan una amenaza en medio del conflicto y que no hacen parte de este, con el fin de acatar y respetar el Derecho Internacional Humanitario.
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“A todos los grupos armados que operan en este departamento se les exige la condena de los atentados contra la población civil y el compromiso del cese de toda hostilidad”, añadió.
En la zona hacen presencia estructuras del EMC que hoy por hoy no están sentadas en la mesa de negociación.
Precisamente en Cauca, Valle del Cauca y Nariño hay levantamiento del cese al fuego desde hace tres meses y el presidente Gustavo Petro ha ordenado en más de una ocasión la ofensiva total contra los frentes que componen el bloque Occidental como el Dagoberto Ramos y el Jacobo Arenas, al mando de Iván Mordisco, quien fue expulsado del proceso.
Esa región del suroccidente del país ha vivido una ola de violencia en las últimas semanas por ataques de las disidencias de Mordisco a la población. Los últimos fueron el pasado miércoles, en el corregimiento de Potrerito y el casco urbano de Jamundí.
Al respecto, la vicepresidenta Márquez manifestó su preocupación por la situación de seguridad en los departamentos del Cauca y Valle del Cauca, en el municipio de Suárez y el corregimiento de La Toma.
Por su parte, González Posso explicó en La W que esos frentes no podrán volver a sentarse en la mesa de diálogo siempre y cuando las expresiones de violencia continúen.
“La única forma en que se puede establecer un diálogo es con hechos unilaterales, previos, de desescalamiento, y de respeto a la población. Creer que se va a obligar al Gobierno a una mesa de conversaciones es algo que no tiene cabeza”, aseguró.
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Hasta el momento, el Gobierno sigue en la mesa con frentes de Caquetá, Catatumbo y algunos de Putumayo y Arauca.
En medio de ataques y atentados en Cauca, el pasado 14 de junio se anunció el inicio del quinto ciclo de diálogos de paz entre el Gobierno y la parte del EMC que continúa en los diálogos.
Si bien el Gobierno Nacional había dicho que la ronda de conversaciones de paz iba a iniciar el próximo 20 de junio, con los frentes que se mantienen firmes en el proceso, este viernes las delegaciones confirmaron que el quinto ciclo finalmente se desarrollará entre el 4 y 10 de julio de 2024.
Según contó González Posso, actualmente se está avanzando en la mesa de negociación con el EMC en Caquetá, “con actividades importantes, reuniones con más de 3.000 delegados de Juntas de Acción Comunal”, que también se han replicado en el departamento de Norte de Santander.
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