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                                                                                                                                El trazo criminal de “Cuco” Vanoy en el crimen organizado y las autodefensas

                                                                                                                                El Espectador revela los apartes de la segunda sentencia de la Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Medellín, que resumió el accionar del paramilitarismo en el Bajo Cauca.

                                                                                                                                Alejandra Bonilla Mora / @AlejaBonilla

                                                                                                                                Los excomandantes paramilitares Ramiro Vanoy Murillo y Ramón Isaza, alias “El Viejo”. / Luis Benavides
                                                                                                                                Foto: LUIS BENAVIDES
                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Nacido en Yacopí (Cundinamarca) nueve días antes del asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, en 1948, hasta alcanzar su mayoría de edad Cuco Vanoy se rebuscó entre diversos oficios en su pueblo. Fue jornalero, arriero, carnicero y apostador de gallos. Después empezó a negociar con tierras y fue y volvió del Magdalena y Arauca. Cuando se constituyeron las Farc, por medio de su padrino, entró a asistirlas con apoyo logístico. Pero cuando a su mentor lo ajusticiaron entre Tibú y Cúcuta, buscó otro escenario de combate.

                                                                                                                                Entonces recaló en la zona esmeraldífera de Boyacá, donde primero ganó la confianza de los rezagos de las Farc, pero después entró al círculo de Víctor Carranza o Gilberto Molina, los capos de la región. Cuando entendió los secretos del negocio y la forma de expandirlos con la violencia, pero asumió que no tenía la fuerza para tomar el mando, migró a Medellín. Allí constituyó una compraventa de carros llamada La 30 y una empresa de ganadería. No obstante, sabía que tarde o temprano se sumaría a la guerra.

                                                                                                                                Read more!

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                                                                                                                                Hacia 1983, se trasladó al Magdalena Medio, justo en la época en la que el movimiento Muerte a Secuestradores (MAS) causaba estragos entre la población civil. Pronto estableció relaciones con Gonzalo y Henry de Jesús Pérez, y junto a varios políticos y hacendados de la región ayudó a constituir la Asociación de Campesinos y Ganaderos del Magdalena Medio (Acgdegam), una fachada del paramilitarismo en ascenso que desde Puerto Boyacá desató el terror y sembró la muerte.

                                                                                                                                Eran los tiempos en los que el narcoparamilitarismo estaba unido y por eso Cuco Vanoy también comenzó a apoyar al mismísimo Pablo Escobar, por intermedio del hombre que le cuidaba sus laboratorios de droga en el Magdalena Medio. Sin embargo, como demostró habilidad y osadía para el delito, por orden de Henry Pérez se desplazó a la región del Bajo Cauca en Antioquia, donde conformó un grupo llamado Mineros por la zona de La Caucana. Desde ese entorno vivió el ascenso y declive de sus socios.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Read more!

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                                                                                                                                No obstante, cuando la Corte Constitucional le dio el golpe de gracia a este esperpento jurídico, ya Cuco Vanoy era amo y señor en el Bajo Cauca, y sus acciones criminales se extendían por Cáceres, Tarazá, Caucasia, El Bagre, Nechí y Zaragoza. Por corredores geográficos circulaba la coca y la manera de asegurar su poder fue el control social. Entre 1995 y 1998, en sociedad con Carlos Mario Jiménez (Macaco) y Rodrigo Pérez Alzate (Julián Bolívar), constituyeron una máquina de guerra.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                Él situó su cuartel general en La Caucana y, con el pretexto de enfrentar a las Farc y el Eln, a punta de masacres, operaciones de limpieza social, extorsiones o desplazamientos, consolidó el dominio territorial sobre un área aproximada de 14.767 kilómetros cuadrados entre Antioquia y Córdoba. Con la financiación del narcotráfico como base esencial de sus arcas, organizó un auténtico gobierno criminal. Con políticos y alcaldes a su servicio, inspectores de policía atentos a sus directrices y fuerza pública en sus filas.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                También lea: Iván Roberto Duque y Rodrigo Granda: histórico abrazo de un exjefe de las AUC con uno de la Farc

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                Aunque la sentencia plantea que la sumatoria de crímenes da para condenarlo a 40 años de prisión, por efecto de la Ley de Justicia y Paz que sirvió de instrumento jurídico para el proceso de paz entre el gobierno de Uribe y las autodefensas, queda en 96 meses de encarcelamiento. No obstante, como se sabe, Cuco Vanoy fue extraditado a Estados Unidos en mayo de 2008, es decir, hace diez años, y no está claro si pronto pueda recobrar su libertad tras ser condenado a 24 años de prisión por narcotráfico.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                En este contexto, ordenó a la Agencia Colombiana para la Reintegración Social y al Grupo de Atención Humanitaria al Desmovilizado que fortalezcan los programas de acompañamiento a excombatientes, para neutralizar los riesgos de la reconfiguración de nuevos grupos ilegales. Finalmente, instó al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) a examinar los casos particulares de menores afectadas por acciones de violencia, para que apoyen decididamente la reparación a la que tienen derecho.

                                                                                                                                También lea: Las alianzas de la Fuerza Pública con el Bloque Calima de las AUC

                                                                                                                                Los excomandantes paramilitares Ramiro Vanoy Murillo y Ramón Isaza, alias “El Viejo”. / Luis Benavides
                                                                                                                                Foto: LUIS BENAVIDES
                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Nacido en Yacopí (Cundinamarca) nueve días antes del asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, en 1948, hasta alcanzar su mayoría de edad Cuco Vanoy se rebuscó entre diversos oficios en su pueblo. Fue jornalero, arriero, carnicero y apostador de gallos. Después empezó a negociar con tierras y fue y volvió del Magdalena y Arauca. Cuando se constituyeron las Farc, por medio de su padrino, entró a asistirlas con apoyo logístico. Pero cuando a su mentor lo ajusticiaron entre Tibú y Cúcuta, buscó otro escenario de combate.

                                                                                                                                Entonces recaló en la zona esmeraldífera de Boyacá, donde primero ganó la confianza de los rezagos de las Farc, pero después entró al círculo de Víctor Carranza o Gilberto Molina, los capos de la región. Cuando entendió los secretos del negocio y la forma de expandirlos con la violencia, pero asumió que no tenía la fuerza para tomar el mando, migró a Medellín. Allí constituyó una compraventa de carros llamada La 30 y una empresa de ganadería. No obstante, sabía que tarde o temprano se sumaría a la guerra.

                                                                                                                                Read more!

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                                                                                                                                Hacia 1983, se trasladó al Magdalena Medio, justo en la época en la que el movimiento Muerte a Secuestradores (MAS) causaba estragos entre la población civil. Pronto estableció relaciones con Gonzalo y Henry de Jesús Pérez, y junto a varios políticos y hacendados de la región ayudó a constituir la Asociación de Campesinos y Ganaderos del Magdalena Medio (Acgdegam), una fachada del paramilitarismo en ascenso que desde Puerto Boyacá desató el terror y sembró la muerte.

                                                                                                                                Eran los tiempos en los que el narcoparamilitarismo estaba unido y por eso Cuco Vanoy también comenzó a apoyar al mismísimo Pablo Escobar, por intermedio del hombre que le cuidaba sus laboratorios de droga en el Magdalena Medio. Sin embargo, como demostró habilidad y osadía para el delito, por orden de Henry Pérez se desplazó a la región del Bajo Cauca en Antioquia, donde conformó un grupo llamado Mineros por la zona de La Caucana. Desde ese entorno vivió el ascenso y declive de sus socios.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Read more!

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                                                                                                                                No obstante, cuando la Corte Constitucional le dio el golpe de gracia a este esperpento jurídico, ya Cuco Vanoy era amo y señor en el Bajo Cauca, y sus acciones criminales se extendían por Cáceres, Tarazá, Caucasia, El Bagre, Nechí y Zaragoza. Por corredores geográficos circulaba la coca y la manera de asegurar su poder fue el control social. Entre 1995 y 1998, en sociedad con Carlos Mario Jiménez (Macaco) y Rodrigo Pérez Alzate (Julián Bolívar), constituyeron una máquina de guerra.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                Un caso revela, por ejemplo, cómo a una mujer a la que acusaban de cercanía de la guerrilla le pusieron cables eléctricos en los senos y antes de asesinarla le mutilaron los pezones. Otra víctima contó que junto a otras mujeres fue obligada a sostener relaciones sexuales con muchos integrantes del Bloque Mineros y, supuestamente para resistir las agresiones, le introdujeron base de coca en la vagina. Son tan dolorosas las descripciones de los abusos, que repetirlas causa el mismo estupor que sintieron quienes las escucharon de viva voz.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                El fallo trae secuencias de declaraciones del propio jefe paramilitar ante los interrogantes de la justicia. Por ejemplo, cuando se le preguntó por las acciones de limpieza social, comentó sin empacho: “Eso son personas desechables, viciosos, ladrones que ya no se los aguanta nadie, que son un peligro, que pueden violar niños y niñas, que ya no sirven para nada”. Y muchas de sus víctimas, como concluye la sentencia, fueron descuartizadas y sus cuerpos inhumados en fosas o arrojadas a ríos caudalosos.

                                                                                                                                También lea: Iván Roberto Duque y Rodrigo Granda: histórico abrazo de un exjefe de las AUC con uno de la Farc

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                La lista de bienes para extinción de dominio es más larga que la de sus víctimas, lo que prueba el poder económico que llegó a tener Cuco Vanoy, no solo en la región del Bajo Cauca antioqueño sino en Urabá y otras zonas del país. La mayoría de los bienes adquiridos ilícitamente mediante el narcotráfico, el despojo de tierras o acciones de corrupción. Por eso, los tres magistrados que elaboraron el documento insistieron en que se garantice que estos puedan ser usados para reparar realmente a las víctimas.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                Aunque la sentencia plantea que la sumatoria de crímenes da para condenarlo a 40 años de prisión, por efecto de la Ley de Justicia y Paz que sirvió de instrumento jurídico para el proceso de paz entre el gobierno de Uribe y las autodefensas, queda en 96 meses de encarcelamiento. No obstante, como se sabe, Cuco Vanoy fue extraditado a Estados Unidos en mayo de 2008, es decir, hace diez años, y no está claro si pronto pueda recobrar su libertad tras ser condenado a 24 años de prisión por narcotráfico.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                También lea: Las alianzas de la Fuerza Pública con el Bloque Calima de las AUC

                                                                                                                                Por Alejandra Bonilla Mora / @AlejaBonilla

                                                                                                                                Ver todas las noticias
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