¿Qué viene tras entrega del predio a exFARC amenazados por disidencias en Mesetas?
El Gobierno, que había anunciado hace unos días la compra de las tierras, hizo la entrega oficial este jueves. Las 200 familias del ETCR de Mariana Páez que fueron amenazadas por la disidencia del Estado Mayor Central, recibieron 1.460 hectáreas de tierra en Acacías. En el acto se anunció que se hará el mismo proceso con los habitantes del ETCR de Vista Hermosa, quienes también han sido hostigados por ese grupo armado.
Cindy A. Morales Castillo
Este jueves, cerca de 200 familias y excombatientes del espacio territorial Mariana Páez, en Mesetas (Meta) recibieron oficialmente el predio a donde se trasladarán tras la amenaza que sufrieron en marzo pasado por cuenta de la disidencia autodenominada Estado Mayor Central.
Son 1.460 hectáreas de tierra productiva en un predio llamado El Berlín ubicado en inmediaciones de Acacías, también en ese departamento, que era una de las peticiones que habían hechos los firmantes de paz dado su arraigo con ese territorio.
La entrega se realizó con presencia de varios funcionarios del Gobierno como Gloria Cuartas, cabeza de la Unidad de Implementación del Acuerdo de Paz; Alejandra Miller, directora de la Agencia para la Reincorporación y la Normalización; Gerardo Vega, director de la Agencia Nacional de Tierra y la Unidad de Restitución de Tierras. También estuvo Daniel Rojas, director de la Sociedad de Activos Especiales (SAE) y Rodrigo Londoño, presidente del partido Comunes.
La compra del predio era una tarea que el mismo presidente Gustavo Petro se había comprometido a cumplir. Durante una visita que hizo en marzo pasado a ese ETCR, la primera a una de esas zonas, el mandatario había dado la orden de que en menos de tres meses debía encontrarse el lugar para el traslado. El plazo finalizaba este mes.
“Es un momento histórico, un hito para el país y una promesa cumplida del Gobierno. Un proceso de compra de tierras que antes tardaba 18 meses hoy la Agencia de Tierras lo hace en tres y en este caso, un mes y medio. Esta es una acción de voluntad institucional a resaltar (…) Bienvenidos a su tierra”, dijo Miller durante el encuentro.
En contexto: Acuerdo con Petro: exFARC se quedan tres meses más en Mesetas, Meta
De acuerdo con información de líderes del espacio territorial, de los siete proyectos productivos que actualmente tienen los firmantes de paz en Mesetas, solo uno ya hizo el traslado al nuevo espacio.
“Ya se pasó uno de los dos que están en ganadería y se movieron semovientes y otras cosas. Aún faltan cinco más dedicados a café, cacao, caña de azúcar y conservas. El de hotelería está viéndose como se traslada”, detalló a Colombia+20 Uilber Vanegas, firmante de paz y quien estuvo en el acto de entrega.
El siguiente paso, según explica Vanegas, será la construcción de entre 80 y 90 casas transitorias para que puedan moverse las familias de ese ETCR, que acoge a 86 mujeres -la gran mayoría madres cabeza de hogar-, y alrededor de 80 niños y niñas (30 aún de brazos). “En este país todo se tarda, pero esperamos que eso dure más o menos un mes”, afirma.
De acuerdo con la directora Miller el traslado total podría tardar entre seis y siete meses para la construcción casas definitivas que necesitan un estudio de prefactibilidad. “Estamos, además, haciendo adecuación de los espacios para que vengan las familias, hay casi 80 niños y niñas con necesidades especiales”, explicó. Además, se está trabajando en la creación de un fondo de sostenibilidad para darles un segundo aire a los proyectos productivos y hacerlos rentables.
Al mismo tiempo se empezaron una serie de actividades y diálogos con la comunidad de Acacías para hacer el proceso de acogida y reincorporación.
“Mientras preparamos todo el proceso de traslado, hemos conversado con autoridades locales, con líderes, Juntas de Acción Comunal para avanzar en la reincorporación comunitaria, que es un acompañamiento para las comunidades con miras a la comprensión del Acuerdo de Paz. Estos son unos diálogos sociales para preparar a las comunidades para que acojan a las familias y que esta sea un trabajo conjunto y que no sea traumático o que sea un proceso donde se mire a los firmantes con estigmatización, sino que contribuye a la reconciliación”, afirmó Miller.
La directora agrega que, tal como ocurrió en Mesetas, quieren que la población de Acacías pueda tener espacios de reconciliación y entender el significado positivo de ser comunidad de acogida.
“En Mesetas hubo beneficios conexos como la promoción de la economía local, la llegada del Estado con otros servicios que no se tenía, pero sobre todo se logró un vínculo comunitario”, explica.
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En el acto se les entregó el certificado de tradición y libertad del predio que, según la petición de los firmantes, quieren que quede a nombre de cada uno de ellos y no de una corporación en particular. “Nosotros hicimos una dejación de armas colectiva, pero quisiéramos tener una titulación individual. La hemos trabajado y tenemos muy buenas ideas para expandirnos”, dice Vanegas, quien agrega que están pensando en tener cultivos de arroz y de otros productos para su seguridad alimentaria.
Yulis Cabana, una de las líderes del espacio territorial Mariana Páez, quien participó en el diálogo del pasado marzo con el presidente Petro, también estuvo presente en la entrega.
“Hoy estamos dando un paso como firmantes de paz en cuanto a la materialización del acceso a la tierra y también de garantías y condiciones de seguridad (…) Sabemos que contamos con el Gobierno para la consecución de la vivienda y las necesidades para nuestro proyecto de vida. Esperamos que esto también se dé en los otros espacios que también requieren la atención del Gobierno”, dijo durante su intervención.
Según Vanegas, el proceso que sigue es solo el de producir. “Nosotros somos campesinos, queremos sacar nuestras producciones y que arranquen nuestros proyectos que estuvieron detenidos tantos años”, dijo.
La amenaza del EMC que recibieron los habitantes del espacio de Mariana Páez se sumó a una serie de denuncias que desde hace meses llevan haciendo sobre inconformidades que tenían en esa zona porque el terreno no cumplía con las necesidades para los proyectos productivos y que terminaron por impulsar su salida.
“Las condiciones de vivienda en las que están no son las mejores. Las puertas de las viviendas se están destruyendo y las paredes se derriten. Además, desde hace tiempo ellos vienen manifestando que hay una falta de claridad en la caracterización de los predios”, explicó hace unos meses Manuela Marín, delegada del Partido Comunes a la CSIVI (Comité de Seguimiento, Impulso y Verificación a la Implementación).
Además el terreno donde está ese ETCR es baldío y eso también impedía que ellos tuvieran una posibilidad real de una propiedad colectiva o de una compra de vivienda.
Los acuerdos con el ETCR Georgina Ortiz en Vista Hermosa
Hace unos días el Gobierno hizo una reunión de emergencia en el ETCR de Vista Hermosa, también en Meta, tras varias denuncias de excombatientes de las antiguas FARC que viven en el espacio Georgina Ortiz.
De acuerdo con esa población, han sido víctimas de amenazas de grupos armados y denunciaron el pasado 20 de mayo e asesinato de dos de sus compañeros. A ello se suma la suspensión temporal que decretó el Gobierno del cese al fuego con la disidencia del Estado Mayor Central en cuatro departamentos, entre ellos Meta. La decisión se tomó tras la confirmación de que ese grupo armado había asesinado a cuatro niños indígenas pertenecientes a la comunidad indígena de Murui, que habían sido reclutados por esta guerrilla en Putumayo.
Además: El temor en las regiones tras ruptura de cese al fuego con disidencia de las FARC
Según Miller, en esa reunión de emergencia se pudieron constatar las alertas alrededor de la seguridad de los firmantes de ese ETCR y se realizaron cuatro acuerdos, entre ellos el traslado de toda la población que viven en ese espacio territorial.
“Estuvimos reunidos con la Asamblea y llegamos a unos acuerdos que se resumen en cuatro aspectos. Primero, la salida hacia un lugar transitorio a partir del 10 de junio. Estamos trabajando cuáles sería esos municipios donde se haría esa recepción, que sería temporal. El segundo acuerdo es la búsqueda de predios para la reubicación definitiva con el modelo de tierra suficiente y fértil. En tercer lugar se hará una revisión de los procesos productivos, y por último también revisaremos la protección de líderes y lideresas que han sido directamente amenazadas. Esperamos en unos meses darles la misma noticia que les dimos en Mesetas”, explicó.
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Registros del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) indican que desde la firma del Acuerdo de Paz hasta el pasado 20 de mayo, 362 firmantes han sido asesinados, 14 de ellos este año.
Este jueves, cerca de 200 familias y excombatientes del espacio territorial Mariana Páez, en Mesetas (Meta) recibieron oficialmente el predio a donde se trasladarán tras la amenaza que sufrieron en marzo pasado por cuenta de la disidencia autodenominada Estado Mayor Central.
Son 1.460 hectáreas de tierra productiva en un predio llamado El Berlín ubicado en inmediaciones de Acacías, también en ese departamento, que era una de las peticiones que habían hechos los firmantes de paz dado su arraigo con ese territorio.
La entrega se realizó con presencia de varios funcionarios del Gobierno como Gloria Cuartas, cabeza de la Unidad de Implementación del Acuerdo de Paz; Alejandra Miller, directora de la Agencia para la Reincorporación y la Normalización; Gerardo Vega, director de la Agencia Nacional de Tierra y la Unidad de Restitución de Tierras. También estuvo Daniel Rojas, director de la Sociedad de Activos Especiales (SAE) y Rodrigo Londoño, presidente del partido Comunes.
La compra del predio era una tarea que el mismo presidente Gustavo Petro se había comprometido a cumplir. Durante una visita que hizo en marzo pasado a ese ETCR, la primera a una de esas zonas, el mandatario había dado la orden de que en menos de tres meses debía encontrarse el lugar para el traslado. El plazo finalizaba este mes.
“Es un momento histórico, un hito para el país y una promesa cumplida del Gobierno. Un proceso de compra de tierras que antes tardaba 18 meses hoy la Agencia de Tierras lo hace en tres y en este caso, un mes y medio. Esta es una acción de voluntad institucional a resaltar (…) Bienvenidos a su tierra”, dijo Miller durante el encuentro.
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De acuerdo con información de líderes del espacio territorial, de los siete proyectos productivos que actualmente tienen los firmantes de paz en Mesetas, solo uno ya hizo el traslado al nuevo espacio.
“Ya se pasó uno de los dos que están en ganadería y se movieron semovientes y otras cosas. Aún faltan cinco más dedicados a café, cacao, caña de azúcar y conservas. El de hotelería está viéndose como se traslada”, detalló a Colombia+20 Uilber Vanegas, firmante de paz y quien estuvo en el acto de entrega.
El siguiente paso, según explica Vanegas, será la construcción de entre 80 y 90 casas transitorias para que puedan moverse las familias de ese ETCR, que acoge a 86 mujeres -la gran mayoría madres cabeza de hogar-, y alrededor de 80 niños y niñas (30 aún de brazos). “En este país todo se tarda, pero esperamos que eso dure más o menos un mes”, afirma.
De acuerdo con la directora Miller el traslado total podría tardar entre seis y siete meses para la construcción casas definitivas que necesitan un estudio de prefactibilidad. “Estamos, además, haciendo adecuación de los espacios para que vengan las familias, hay casi 80 niños y niñas con necesidades especiales”, explicó. Además, se está trabajando en la creación de un fondo de sostenibilidad para darles un segundo aire a los proyectos productivos y hacerlos rentables.
Al mismo tiempo se empezaron una serie de actividades y diálogos con la comunidad de Acacías para hacer el proceso de acogida y reincorporación.
“Mientras preparamos todo el proceso de traslado, hemos conversado con autoridades locales, con líderes, Juntas de Acción Comunal para avanzar en la reincorporación comunitaria, que es un acompañamiento para las comunidades con miras a la comprensión del Acuerdo de Paz. Estos son unos diálogos sociales para preparar a las comunidades para que acojan a las familias y que esta sea un trabajo conjunto y que no sea traumático o que sea un proceso donde se mire a los firmantes con estigmatización, sino que contribuye a la reconciliación”, afirmó Miller.
La directora agrega que, tal como ocurrió en Mesetas, quieren que la población de Acacías pueda tener espacios de reconciliación y entender el significado positivo de ser comunidad de acogida.
“En Mesetas hubo beneficios conexos como la promoción de la economía local, la llegada del Estado con otros servicios que no se tenía, pero sobre todo se logró un vínculo comunitario”, explica.
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En el acto se les entregó el certificado de tradición y libertad del predio que, según la petición de los firmantes, quieren que quede a nombre de cada uno de ellos y no de una corporación en particular. “Nosotros hicimos una dejación de armas colectiva, pero quisiéramos tener una titulación individual. La hemos trabajado y tenemos muy buenas ideas para expandirnos”, dice Vanegas, quien agrega que están pensando en tener cultivos de arroz y de otros productos para su seguridad alimentaria.
Yulis Cabana, una de las líderes del espacio territorial Mariana Páez, quien participó en el diálogo del pasado marzo con el presidente Petro, también estuvo presente en la entrega.
“Hoy estamos dando un paso como firmantes de paz en cuanto a la materialización del acceso a la tierra y también de garantías y condiciones de seguridad (…) Sabemos que contamos con el Gobierno para la consecución de la vivienda y las necesidades para nuestro proyecto de vida. Esperamos que esto también se dé en los otros espacios que también requieren la atención del Gobierno”, dijo durante su intervención.
Según Vanegas, el proceso que sigue es solo el de producir. “Nosotros somos campesinos, queremos sacar nuestras producciones y que arranquen nuestros proyectos que estuvieron detenidos tantos años”, dijo.
La amenaza del EMC que recibieron los habitantes del espacio de Mariana Páez se sumó a una serie de denuncias que desde hace meses llevan haciendo sobre inconformidades que tenían en esa zona porque el terreno no cumplía con las necesidades para los proyectos productivos y que terminaron por impulsar su salida.
“Las condiciones de vivienda en las que están no son las mejores. Las puertas de las viviendas se están destruyendo y las paredes se derriten. Además, desde hace tiempo ellos vienen manifestando que hay una falta de claridad en la caracterización de los predios”, explicó hace unos meses Manuela Marín, delegada del Partido Comunes a la CSIVI (Comité de Seguimiento, Impulso y Verificación a la Implementación).
Además el terreno donde está ese ETCR es baldío y eso también impedía que ellos tuvieran una posibilidad real de una propiedad colectiva o de una compra de vivienda.
Los acuerdos con el ETCR Georgina Ortiz en Vista Hermosa
Hace unos días el Gobierno hizo una reunión de emergencia en el ETCR de Vista Hermosa, también en Meta, tras varias denuncias de excombatientes de las antiguas FARC que viven en el espacio Georgina Ortiz.
De acuerdo con esa población, han sido víctimas de amenazas de grupos armados y denunciaron el pasado 20 de mayo e asesinato de dos de sus compañeros. A ello se suma la suspensión temporal que decretó el Gobierno del cese al fuego con la disidencia del Estado Mayor Central en cuatro departamentos, entre ellos Meta. La decisión se tomó tras la confirmación de que ese grupo armado había asesinado a cuatro niños indígenas pertenecientes a la comunidad indígena de Murui, que habían sido reclutados por esta guerrilla en Putumayo.
Además: El temor en las regiones tras ruptura de cese al fuego con disidencia de las FARC
Según Miller, en esa reunión de emergencia se pudieron constatar las alertas alrededor de la seguridad de los firmantes de ese ETCR y se realizaron cuatro acuerdos, entre ellos el traslado de toda la población que viven en ese espacio territorial.
“Estuvimos reunidos con la Asamblea y llegamos a unos acuerdos que se resumen en cuatro aspectos. Primero, la salida hacia un lugar transitorio a partir del 10 de junio. Estamos trabajando cuáles sería esos municipios donde se haría esa recepción, que sería temporal. El segundo acuerdo es la búsqueda de predios para la reubicación definitiva con el modelo de tierra suficiente y fértil. En tercer lugar se hará una revisión de los procesos productivos, y por último también revisaremos la protección de líderes y lideresas que han sido directamente amenazadas. Esperamos en unos meses darles la misma noticia que les dimos en Mesetas”, explicó.
Además: El temor en las regiones tras ruptura de cese al fuego con disidencia de las FARC
Registros del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) indican que desde la firma del Acuerdo de Paz hasta el pasado 20 de mayo, 362 firmantes han sido asesinados, 14 de ellos este año.