“Si Santos hubiera aceptado que Uribe fuera a La Habana, sería otro el escenario del país”

El cierre del acto de instalación de la mesa de diálogos entre el Gobierno y la disidencia de las antiguas FARC, autodenominadas como Estado Mayor Central (EMC), estuvo a cargo del exsenador Fabio Valencia Cossio, representante del Centro Democrático en esas negociaciones.

En su intervención, una de las que más sorprendió, afirmó que es un “testarudo de la paz” y repasó algunas de las negociaciones que ha acompañado, como el proceso del Caguán y el del M-19. “Vengo dialogando y buscando caminos de reconciliación desde la época de Casa Verde con Manuel Marulanda y Jacobo Arenas, estuve en el Caguán casi dos años, estuve en el proceso del M19 con Gloria Quiceno. Hoy veo que este proceso es muy importante para el país, un grupo de jóvenes rebeldes quiere dejar las armas para buscar por el camino del diálogo y la reconciliación, un país incluyente.”, dijo.

Además: Con decreto de cese al fuego, se instala mesa de diálogo con disidencia de Mordisco

Además, el líder conservador afirmó que está en esa mesa porque el presidente Petro le pidió al expresidente Álvaro Uribe un representante de ese partido político. “(Uribe) me pidió que acompañara esta mesa y lo hago con entusiasmo y mucho deseo”.

Sin embargo, lo más duro de sus palabras fue el dardo que le lanzó al expresidente Juan Manuel Santos. “Los procesos de paz deben ser incluyentes. Anteriores procesos de paz no han cumplido ese propósito porque fueron egoístas y excluyeron a mucha gente. Si el presidente Santos hubiera aceptado, como lo pidieron las FARC, que el presidente Uribe hubiera ido a La Habana a conversar, otro sería el escenario político del país”, dijo.

Valencia Cossio también agradeció a la delegación de Gobierno, de quien dijo lo ha “acogido con cariño y respeto”.

Y agregó: “Estamos aquí para hacer respetar el Estado de Derecho, para que todos se sometan a la leyes, pero ese sometimiento debe ser claro en el sentido de que todos los colombianos debemos tener igualdad de oportunidades”.

El exsenador también afirmó que siente “entusiasmo” por este proceso con la disidencia de Iván Mordisco porque tiene dos principios diferentes. “El primero es que en otros procesos se dialogó en medio del conflicto y eso fue negativo. Aquí vamos a dialogar con cese al fuego y con cese de hostilidades, para nosotros lo importante es la población (...) Otro principio es que en vez de esperar a que se termine todo para que se cumpla lo que se va pactando, parte del principio de que lo que se vaya acordando se va aplicando”, explicó.

Lea también: Gobierno y disidencia de Mordisco firman cese al fuego: esto es lo que dice el decreto

Además, le dijo al alto comisionado de paz, Danilo Rueda, que tenía una gran responsabilidad encomendada por el presidente Petro y le dio un espaldarazo a los diálogos. “Nosotros lo queremos acompañar con todo entusiasmo para que usted lo logre”, dijo.

Valencia, de 75 años, es abogado y fue ministro del Interior y de Justicia durante la presidencia de Álvaro Uribe Vélez. Su carrera política empezó a sus 22 años, cuando colaboró en la campaña presidencial de Misael Pastrana Borrero. Años después, fungió como secretario del Partido Conservador en Antioquia, de donde es oriundo.

El cierre del acto de instalación de la mesa de diálogos entre el Gobierno y la disidencia de las antiguas FARC, autodenominadas como Estado Mayor Central (EMC), estuvo a cargo del exsenador Fabio Valencia Cossio, representante del Centro Democrático en esas negociaciones.

En su intervención, una de las que más sorprendió, afirmó que es un “testarudo de la paz” y repasó algunas de las negociaciones que ha acompañado, como el proceso del Caguán y el del M-19. “Vengo dialogando y buscando caminos de reconciliación desde la época de Casa Verde con Manuel Marulanda y Jacobo Arenas, estuve en el Caguán casi dos años, estuve en el proceso del M19 con Gloria Quiceno. Hoy veo que este proceso es muy importante para el país, un grupo de jóvenes rebeldes quiere dejar las armas para buscar por el camino del diálogo y la reconciliación, un país incluyente.”, dijo.

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Además, el líder conservador afirmó que está en esa mesa porque el presidente Petro le pidió al expresidente Álvaro Uribe un representante de ese partido político. “(Uribe) me pidió que acompañara esta mesa y lo hago con entusiasmo y mucho deseo”.

Sin embargo, lo más duro de sus palabras fue el dardo que le lanzó al expresidente Juan Manuel Santos. “Los procesos de paz deben ser incluyentes. Anteriores procesos de paz no han cumplido ese propósito porque fueron egoístas y excluyeron a mucha gente. Si el presidente Santos hubiera aceptado, como lo pidieron las FARC, que el presidente Uribe hubiera ido a La Habana a conversar, otro sería el escenario político del país”, dijo.

Valencia Cossio también agradeció a la delegación de Gobierno, de quien dijo lo ha “acogido con cariño y respeto”.

Y agregó: “Estamos aquí para hacer respetar el Estado de Derecho, para que todos se sometan a la leyes, pero ese sometimiento debe ser claro en el sentido de que todos los colombianos debemos tener igualdad de oportunidades”.

El exsenador también afirmó que siente “entusiasmo” por este proceso con la disidencia de Iván Mordisco porque tiene dos principios diferentes. “El primero es que en otros procesos se dialogó en medio del conflicto y eso fue negativo. Aquí vamos a dialogar con cese al fuego y con cese de hostilidades, para nosotros lo importante es la población (...) Otro principio es que en vez de esperar a que se termine todo para que se cumpla lo que se va pactando, parte del principio de que lo que se vaya acordando se va aplicando”, explicó.

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Además, le dijo al alto comisionado de paz, Danilo Rueda, que tenía una gran responsabilidad encomendada por el presidente Petro y le dio un espaldarazo a los diálogos. “Nosotros lo queremos acompañar con todo entusiasmo para que usted lo logre”, dijo.

Valencia, de 75 años, es abogado y fue ministro del Interior y de Justicia durante la presidencia de Álvaro Uribe Vélez. Su carrera política empezó a sus 22 años, cuando colaboró en la campaña presidencial de Misael Pastrana Borrero. Años después, fungió como secretario del Partido Conservador en Antioquia, de donde es oriundo.