“El dinero de la paz debe ser para quienes han enfrentado la violencia”: Rueda
Así lo afirmó el alto Comisionado de Paz durante el anuncio del Fondo Multidonante de las Naciones Unidas para el Sostenimiento de la Paz en Colombia que confirmó que durante 2023 se invertirán 55 millones de dólares para la implementación del Acuerdo de Paz.
La comitiva del Fondo Multidonante de la Organización de Naciones Unidas para el Sostenimiento de la Paz en Colombia anunció este miércoles que, como parte de su programación económica para 2023, desembolsará para la implementación del Acuerdo de Paz una cifra récord de 208 mil millones de pesos (55 millones de dólares), de los cuales a la fecha ya se cuenta en el país con 75% de estos recursos, según le confirmó a este diario Mireia Villar Forner, coordinadora residente de Naciones Unidas en Colombia.
“Apoyamos la política de Paz Total del gobierno colombiano y por eso seguimos llevando estos dividendos de paz para dignificar a las comunidades. Creemos que esta participación internacional es una herramienta innovadora, ágil y transparente para la implementación del Acuerdo de Paz. Al igual que en años anteriores nuestras líneas estratégicas estarán enfocadas en cada punto del acuerdo, cada vez haremos mayores esfuerzos en la sostenibilidad de los procesos de reincorporación, en apoyar las acciones amplias de paz y, como es habitual, destinar el 30% de las inversiones del fondo a organizaciones de mujeres”, agregó Villar.
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Desde la firma del Acuerdo del Teatro Colón en 2016, ese Fondo Multidonante ha invertido 181 millones de dólares en el país. Esto se ha visto reflejado en más de 250 proyectos colectivos que impactan los seis puntos de lo pactado en La Habana y se estima que han tenido un alcance durante el posconflicto de más de 2 millones de ciudadanos afectados por la guerra en cerca de 440 municipios con Programa de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET)
Desde el escándalo de OCAD Paz en el que desde el Sistema General de Regalías y otros organismos estatales desfalcaron más de 550 mil millones de pesos destinados en proyectos PDET y de impacto en otros escenarios del posconflicto, los sistemas de veeduría sobre los dineros de la paz han estado más vigilado que nunca. Si bien la plata del Fondo Multidonante no se transfiere directamente al Gobierno nacional, lo cierto es que desde el gabinete de Gustavo Petro dicen que no quieren que algo similar vuelva a suceder.
“Queremos que estos recursos sean coherentes con un manejo austero y eficaz que quiere promover el gobierno. Esa inversión debe llegar a lo más sustancial del Acuerdo de Paz e irremediablemente debe ser un impulso a quienes día a día, por años, han enfrentado la violencia y buscan mecanismos para sobrevivir. Ellos, más que nadie, merecen la coherencia de esos gastos”, dijo Danilo Rueda, alto Comisionado para la Paz, y quien estuvo presente en el evento.
Un análisis en paralelo lo dio Mauricio Lizcano, director del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (DAPRE), en entrevista con Colombia+20. El funcionario dijo que el desfalco de OCAD Paz fue un ejemplo claro de que las regalías -y más las que involucren dinero para la paz- deben ser tramitadas a la luz de la opinión pública, para que no haya negocios debajo de cuerda o beneficios personales en detrimento de las víctimas del conflicto armado.
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“Nuestra primera lección sobre lo que sucedió con el desfalco de OCAD Paz es que se debe trabajar con gente honesta. Lejos de focos mediáticos cambiamos hace tres meses a las personas que se involucraron con esos trámites fraudulentos; desde la dirección del Departamento Nacional de Planeación hacia abajo todo cambió. Todos aquellos que fueron agentes de aprobación de esos dineros salieron del gobierno. Ahora el objetivo es ejecutar mecanismos para que haya transparencia plena y hacer proyectos más ambiciosos de acuerdo al plan de gobierno”, agregó.
A esos compromisos de manejo eficaz de los recursos de la paz se sumó la veeduría internacional de Noruega, Reino Unido, Alemania, Canadá, Suecia, España, Emiratos Árabes, Irlanda, Suiza, Corea del Sur, Nueva Zelanda, Chile y Portugal.
“La mirada internacional le ayudará a Colombia a observar con mayor cuidado los procesos que llevarán a una justicia y reparación plena. Reiteramos que el dinero del fondo no es plata transferida al gobierno colombiana sino es dinero ejecutado por Naciones Unidas con la verificación de estos países. El tiempo dirá que con esto se ayudó a cerrar brechas, a trabajar en el mejoramiento de instituciones locales, en potenciar la educación y en hacer con mucho cuidado tareas de acompañamiento para que el conflicto no vuelva a ocurrir”, concluyó Mireia Villar.
El apoyo del Fondo Multidonante en cifras
A lo largo del último trimestre de 2022 se ha difundido a nivel nacional el balance de resultados del fondo durante 2021, que de momento son los datos más recientes sobre el impacto de esta cooperación internacional para la paz en Colombia.
Las cifras han mostrado que entre 2016 y 2021 las contribuciones suman 195 millones de dólares, de los cuales Noruega ha estado como el máximo inversor, con un aporte que ronda los 46.2 millones de dólares. Martin Gunneng, embajador noruego en el país ratificó su apoyo para 2023: “Noruega pondrá 8.7 millones de dólares para este fondo a lo largo del próximo año. Confiamos en el gobierno actual y en las intenciones que tienen de hacer las paces con todos los grupos armados vigentes, dijo”.
Punto por punto del Acuerdo de Paz, los indicadores que más resalta el Informe Anual del Fondo Multidonante de Naciones Unidas es el siguiente:
1. Impulso del 38% de las iniciativas PDET en Colombia (12.488 de 32.808).
2. Capacitaciones en derechos y participación política a 3.662 mujeres en territorios periféricos del país.
3. Desarrollo del 69% (8.955) de los proyectos asociados con la reincorporación de firmantes de paz.
4. Respaldo en el desarrollo de proyectos productivos a más de 600 mujeres recolectoras vinculadas al Programa Nacional de Sustitución de Cultivos Ilícitos.
5. Acompañamiento a 45 de los 50 sujetos de reparación colectiva, documentados por el Sistema Integral para la Paz.
6. Co creación de la Secretaría Técnica del Componente Internacional de Verificación y la Iniciativa Barómetro, instancias de sociedad civil para el monitoreo y verificación de la implementación del Acuerdo de Paz.
Al camino de la implementación del Acuerdo de Paz le queda un camino empedrado y lleno de retos y expectativas de las víctimas por cumplir. A sabiendas de esto, el 2023 será clave, al ser el primer año en el que la Paz Total y sus intenciones de diálogo con grupos armados vigentes tras la desmovilización de las extintas Farc estará en la agenda.
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Sin duda, una oportunidad para medirle el aceite al nuevo gobierno, en materia de transparencia en gestión de regalías, de articulación con instancias locales de administración de recursos y con el diálogo multi sectorial ante una comunidad internacional que ha estado pendiente de que la paz en el país avance.
La comitiva del Fondo Multidonante de la Organización de Naciones Unidas para el Sostenimiento de la Paz en Colombia anunció este miércoles que, como parte de su programación económica para 2023, desembolsará para la implementación del Acuerdo de Paz una cifra récord de 208 mil millones de pesos (55 millones de dólares), de los cuales a la fecha ya se cuenta en el país con 75% de estos recursos, según le confirmó a este diario Mireia Villar Forner, coordinadora residente de Naciones Unidas en Colombia.
“Apoyamos la política de Paz Total del gobierno colombiano y por eso seguimos llevando estos dividendos de paz para dignificar a las comunidades. Creemos que esta participación internacional es una herramienta innovadora, ágil y transparente para la implementación del Acuerdo de Paz. Al igual que en años anteriores nuestras líneas estratégicas estarán enfocadas en cada punto del acuerdo, cada vez haremos mayores esfuerzos en la sostenibilidad de los procesos de reincorporación, en apoyar las acciones amplias de paz y, como es habitual, destinar el 30% de las inversiones del fondo a organizaciones de mujeres”, agregó Villar.
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Desde la firma del Acuerdo del Teatro Colón en 2016, ese Fondo Multidonante ha invertido 181 millones de dólares en el país. Esto se ha visto reflejado en más de 250 proyectos colectivos que impactan los seis puntos de lo pactado en La Habana y se estima que han tenido un alcance durante el posconflicto de más de 2 millones de ciudadanos afectados por la guerra en cerca de 440 municipios con Programa de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET)
Desde el escándalo de OCAD Paz en el que desde el Sistema General de Regalías y otros organismos estatales desfalcaron más de 550 mil millones de pesos destinados en proyectos PDET y de impacto en otros escenarios del posconflicto, los sistemas de veeduría sobre los dineros de la paz han estado más vigilado que nunca. Si bien la plata del Fondo Multidonante no se transfiere directamente al Gobierno nacional, lo cierto es que desde el gabinete de Gustavo Petro dicen que no quieren que algo similar vuelva a suceder.
“Queremos que estos recursos sean coherentes con un manejo austero y eficaz que quiere promover el gobierno. Esa inversión debe llegar a lo más sustancial del Acuerdo de Paz e irremediablemente debe ser un impulso a quienes día a día, por años, han enfrentado la violencia y buscan mecanismos para sobrevivir. Ellos, más que nadie, merecen la coherencia de esos gastos”, dijo Danilo Rueda, alto Comisionado para la Paz, y quien estuvo presente en el evento.
Un análisis en paralelo lo dio Mauricio Lizcano, director del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (DAPRE), en entrevista con Colombia+20. El funcionario dijo que el desfalco de OCAD Paz fue un ejemplo claro de que las regalías -y más las que involucren dinero para la paz- deben ser tramitadas a la luz de la opinión pública, para que no haya negocios debajo de cuerda o beneficios personales en detrimento de las víctimas del conflicto armado.
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“Nuestra primera lección sobre lo que sucedió con el desfalco de OCAD Paz es que se debe trabajar con gente honesta. Lejos de focos mediáticos cambiamos hace tres meses a las personas que se involucraron con esos trámites fraudulentos; desde la dirección del Departamento Nacional de Planeación hacia abajo todo cambió. Todos aquellos que fueron agentes de aprobación de esos dineros salieron del gobierno. Ahora el objetivo es ejecutar mecanismos para que haya transparencia plena y hacer proyectos más ambiciosos de acuerdo al plan de gobierno”, agregó.
A esos compromisos de manejo eficaz de los recursos de la paz se sumó la veeduría internacional de Noruega, Reino Unido, Alemania, Canadá, Suecia, España, Emiratos Árabes, Irlanda, Suiza, Corea del Sur, Nueva Zelanda, Chile y Portugal.
“La mirada internacional le ayudará a Colombia a observar con mayor cuidado los procesos que llevarán a una justicia y reparación plena. Reiteramos que el dinero del fondo no es plata transferida al gobierno colombiana sino es dinero ejecutado por Naciones Unidas con la verificación de estos países. El tiempo dirá que con esto se ayudó a cerrar brechas, a trabajar en el mejoramiento de instituciones locales, en potenciar la educación y en hacer con mucho cuidado tareas de acompañamiento para que el conflicto no vuelva a ocurrir”, concluyó Mireia Villar.
El apoyo del Fondo Multidonante en cifras
A lo largo del último trimestre de 2022 se ha difundido a nivel nacional el balance de resultados del fondo durante 2021, que de momento son los datos más recientes sobre el impacto de esta cooperación internacional para la paz en Colombia.
Las cifras han mostrado que entre 2016 y 2021 las contribuciones suman 195 millones de dólares, de los cuales Noruega ha estado como el máximo inversor, con un aporte que ronda los 46.2 millones de dólares. Martin Gunneng, embajador noruego en el país ratificó su apoyo para 2023: “Noruega pondrá 8.7 millones de dólares para este fondo a lo largo del próximo año. Confiamos en el gobierno actual y en las intenciones que tienen de hacer las paces con todos los grupos armados vigentes, dijo”.
Punto por punto del Acuerdo de Paz, los indicadores que más resalta el Informe Anual del Fondo Multidonante de Naciones Unidas es el siguiente:
1. Impulso del 38% de las iniciativas PDET en Colombia (12.488 de 32.808).
2. Capacitaciones en derechos y participación política a 3.662 mujeres en territorios periféricos del país.
3. Desarrollo del 69% (8.955) de los proyectos asociados con la reincorporación de firmantes de paz.
4. Respaldo en el desarrollo de proyectos productivos a más de 600 mujeres recolectoras vinculadas al Programa Nacional de Sustitución de Cultivos Ilícitos.
5. Acompañamiento a 45 de los 50 sujetos de reparación colectiva, documentados por el Sistema Integral para la Paz.
6. Co creación de la Secretaría Técnica del Componente Internacional de Verificación y la Iniciativa Barómetro, instancias de sociedad civil para el monitoreo y verificación de la implementación del Acuerdo de Paz.
Al camino de la implementación del Acuerdo de Paz le queda un camino empedrado y lleno de retos y expectativas de las víctimas por cumplir. A sabiendas de esto, el 2023 será clave, al ser el primer año en el que la Paz Total y sus intenciones de diálogo con grupos armados vigentes tras la desmovilización de las extintas Farc estará en la agenda.
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Sin duda, una oportunidad para medirle el aceite al nuevo gobierno, en materia de transparencia en gestión de regalías, de articulación con instancias locales de administración de recursos y con el diálogo multi sectorial ante una comunidad internacional que ha estado pendiente de que la paz en el país avance.