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Tres meses después de la suspensión regional del cese al fuego que emitió el presidente Gustavo Petro y que terminó con el fraccionamiento de la disidencia de las FARC, conocidas como Estado Mayor Central, este martes se conoció un video en el que aparece Iván Mordisco, comandante de las estructuras que se levantaron de esa mesa de diálogos.
En la grabación, el jefe disidente afirma que quiere dar a conocer dos noticias. “Aprovechamos para comunicar a la comunidad nacional internacional dos noticias: hemos decido como muestra de voluntad de paz ordenar a nuestras unidades no afectar el normal desarrollo de la COP 16 que se va a realizar próximamente en la ciudad de Cali. Nuestro compromiso con el planeta se opone a los intereses del gran capital imperial que quiere apoderarse de la Amazonía y demás áreas estratégicas del continente”, dijo.
El pasado 16 de julio, pocas horas después de que el Gobierno Nacional finalizó el cese al fuego con las estructuras disidentes al mando de Iván Mordisco, se conoció lo que parecería ser una amenaza de este grupo armado ilegal contra la COP16, el principal evento internacional que se celebrará en Colombia en octubre de 2024.
Mensaje del comandante en jefe de las FARC-EP Iván Lozada, temas:
— Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (@FARC_EP1964) July 31, 2024
1. Sobre los fraccionalistas.
2 COP16.
Video: https://t.co/ReWmUN7cFR pic.twitter.com/2gpEhIrvz1
“La COP16 fracasará aunque militarice con gringos la ciudad. Señor Gustavo Petro, su discurso de protección de la naturaleza se derrumbará”, escribió el grupo armado a través de su cuenta en X (antes Twitter), en referencia a la convención ambiental, que tendrá lugar en Cali en el mes de octubre.
Aunque el Gobierno asegura que las condiciones de seguridad están garantizadas, fuentes del Ejecutivo le contaron a Colombia+20 que desde hace varios meses están en alerta por el riesgo de amenazas de esta organización.
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El grupo armado, que tenía en marcha un proceso de paz con Petro, se dividió en dos facciones desde mediados de marzo. Una de ellas es la responsable de la amenaza a la COP16, es la que está bajo la coordinación de Iván Mordisco, y se sabe que los frentes que tienen en la mira la convención internacional son los que hacen presencia en el departamento del Cauca y Valle, alineados con el Bloque Occidental del EMC.
La otra noticia es sobre el nombramiento de una nueva comandancia del Estado Mayor Central. “En medio de las consultas y reuniones con la comandancia nacional hemos nombrado el nuevo Estado Mayor Central con sus 21 miembros, así como el secretariado de las FARC-EP”.
Las acusaciones contra los “fraccionalistas”
El video de Mordisco viene acompañado de un extenso comunicado en el que hacen referencia a los señalamientos que hizo la otra facción del EMC el pasado 17 de julio. Ese día, el grupo comandado por Calarcá Córdoba y Andrey Avendaño -a quienes llama fraccionalitas-, enviaron una dura carta contra Mordisco donde lo acusaban de querer iniciar una guerra entre frentes.
“A Iván Lozada (conocido también como Iván Mordisco), lo exhortamos a preguntarse muy objetivamente. ¿Se ha sentado a analizar las consecuencias de una confrontación con quienes hemos compartido los escenarios de la lucha y hasta trincheras de combate?, ¿Se ha preguntado cuán desgarrador puede llegar hacer un eventual conflicto con quienes hemos defendido con sangre estas regiones?, ¿Ha revisado detenidamente lo provechoso que puede llegar a ser esto para los verdaderos enemigos del pueblo?, ¿Ha calculado con cifras reales, la sangre que se puede llegar a derramar y los muertos que esto puede arrojar?, ¿Usted le ha explicado bien a los guerrilleros antes de enviarlos a atacarnos, si iniciar esta guerra es por una justa causa o es por capricho suyo?”, dice el documento.
Sobre esto, el comunicado del grupo de Mordisco responde: “Dicen que vamos a atacar a los guerrilleros que se mantienen en la negociación. Esto es absolutamente falso, en ningún momento hemos pensado atacar a los guerrilleros que están allí engañados o amenazados bajo órdenes de estos fraccionalistas, nuestro accionar militar se dirige contra los enemigos de clase y contra el paramilitarismo que sigue latente en Colombia. Tenemos planes determinados por conferencias guerrilleras y por el plan estratégico que nos determina avanzar sobre las áreas de cada bloque a nivel nacional. Solo responderemos a las fuerzas que se opongan a ese avance. Las puertas están abiertas para los guerrilleros que permanecen con los fraccionalistas, sabemos que a muchos los han obligado a permanecer con ellos, otros han logrado salir de allí y han retornado a los frentes”, afirman.
Además, indican que Calarcá siempre tuvo la intención de dividir al grupo armado. “Desde un comienzo teníamos indicios de planes de él (Calarcá), en coordinación con los Márquez (se refieren a la otra disidencia de las extintas FARC, autodenominada como Segunda Marquetalia y comandada por Iván Márquez) para buscar asesinar al camarada Iván Losada y tomar el control de la organización, hechos que después del golpe fraccionalista hemos comprobado por distintas fuentes de inteligencia”, afirma.
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Y agregan: “Otro tema que ha sido muy difícil de manejar desde la llegada de Calarcá y esos mandos que lo acompañan, es la cantidad de faltas contra la disciplina, en contra de las políticas y estatutos de las FARC EP. Eso nos ha acarreado problemas con la población en general y contra los firmantes del acuerdo en particular. Los excesos en contra de estas comunidades orientadas por Calarcá han sido extensos”. Sobre esto, se refieren al reciente desplazamiento de firmantes de paz del antiguo Espacio Territorial (ETCR) de Miravalle, y que al parecer sí habría sido ordenado por hombre de Calarcá.
¿En qué va el proceso de paz con la disidencia de Calarcá que sigue en la mesa?
La semana pasada, el proceso del Gobierno y los frentes de la disidencia del Estado Mayor Central que aún están en la mesa de diálogos pasaron por uno de los mayores escándalos que ha tenido ese proceso de paz: el episodio en el que fue detenida por el Ejército una caravana de carros de la Unidad Nacional de Protección (UNP) en la que se desplazaban delegados de esa guerrilla en el proceso de paz y en la que se encontraron varias irregularidades.
El hecho terminó con la captura de cuatro personas, un guerrillero con orden de captura vigente, y otros tres que portaban dos armas, documentos falsos y altas sumas de dinero. En los siete vehículos detenidos en un retén en la vía que conduce de Medellín a Anorí se movilizaban 14 personas, entre representantes en la mesa—algo permitido en virtud del proceso de paz y del acuerdo del cese al fuego—, esquemas de seguridad y un menor de edad que habría sido reclutado hace unos años por el grupo armado.
Aunque el viernes pasado toda la polémica pareció zanjarse y ambas partes decidieron continuar con el proceso, ese episodio mostró sombras en un proceso al que aún le falta fortalecerse. Por ahora en lo que se ha avanzado fue en la prórroga del cese al fuego por tres meses entre las partes y que se oficializó el pasado 16 de julio. El alto al fuego será con los bloques Jorge Suárez Briceño (compuesto de ocho frentes con presencia en Meta, Caquetá, Guaviare), Magdalena Medio Gentil Duarte (que cuenta con siete frentes) y el frente Raúl Reyes. Con esa decisión se descartó volver a esa medida con los frentes comandados por Mordisco.
El decreto también oficializó un inédito acuerdo sobre la georreferenciación, una especie de protocolo en el que la disidencia suministrará las coordenadas de los lugares donde están ubicados y que actualmente ocupan. Dicha información tendría una verificación por parte de las Fuerzas Militares. Las delegaciones también acordaron una ambiciosa agenda de diez puntos, la situación de los presos de ese grupo armado y una serie de acciones en los territorios.
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En el comunicado de Mordisco, el disidente advierte que las verdaderas intenciones de los grupos de Calarcá no es hacer la paz, “sino para refugiarse, ocultar los crímenes que están cometiendo y la violación a las normas de las FARC EP”. Y agrega: “No se acogen a una posibilidad de diálogo de forma sincera, se están dando tiempo para legalizar lo robado, tener una careta para sostenerse en la mesa que asaltaron a los verdaderos negociadores nombrados por las FARC EP. Funcionarios del gobierno en la mesa de diálogo, fueron avisados por nosotros, que Calarcá y demás no estaban autorizados por las FARC EP, que habían suplantado a nuestra comisión”.