La paz desde las emisoras comunitarias
El punto 2 de los acuerdos de La Habana habla de fortalecer las emisoras comunitarias para que contribuyan a la paz y la convivencia, pero estas historias demuestran que hace 18 años, cientos de radialistas lo vienen haciendo en medio del conflicto. Voces de resistencia.
Gloria Castrillón / @glocastri
La voz de las comunas
Por Dione Patiño
LA ESQUINA RADIO, MEDELLÍN
SR STÉREO, TIERRALTA, CÓRDOBA
Por Yoiner Palomeque
VIGÍA STÉREO, VIGÍA DEL FUERTE, ANTIOQUIA
“La emisora existe hace cinco años. Nació como una iniciativa de la alcaldesa Miriam del Carmen Serna y un grupo de jóvenes que le propusimos comprar los equipos. Ya veníamos emitiendo con un transmisor hechizo. Antes existió otra emisora, pero por la violencia desapareció.
Esa primera emisora la coordinaban dos personajes del pueblo, Chucho y Arley Asprilla, ellos entregaban su trabajo voluntario. Desde niño soñé con ser locutor; me metía al estudio, quería mirar, pero no me dejaban tocar nada, porque el LP o el CD se dañaban. Yo miraba desde la ventana y me repetía que algún día iba a ser locutor. Esa emisora era el único medio local, de vez en cuando si usted ponía una antena larga se escuchaban las cadenas nacionales. La emisora funcionaba en un segundo piso en la casa de un señor que prestó la piecita para ponerla. Prendían una plantica para emitir por raticos, pero si la gente aportaba para el galón de gasolina, pues había emisora para rato.
Todo empezó con una incursión del Eln en 1995, asesinaron a un policía en la antigua escuela. Los policías habían llegado a la escuela porque no tenían comando y porque las clases estaban suspendidas por los rumores de violencia. Después llegaron las autodefensas, había mucho temor, desplazamiento, amenazas, la gente era sacada de sus casas. Tú preferías emborracharte para dormir, era la única forma de no escuchar que se llevaron a fulano o sacaron a zutano.
A principios del 2000 hubo un combate entre las AUC y la policía, porque cambiaron al comandante de la policía y ese sargento les exigió que salieran del pueblo, y ellos no hicieron caso. El enfrentamiento empezó como a las siete de la noche; los “paras” se salieron del pueblo y los muchachos de la emisora se fueron amenazados. La guerrilla se tomó los equipos y montó Conga Stéreo. La señal era buena, invitaban a unirse a las filas, saludaban a la gente del pueblo. No había más que escuchar, ponían música guerrillera y de otros artistas. Así fue hasta 2002.
Ese año hubo una incursión paramilitar en Vigía del Fuerte por parte del bloque Élmer Cárdenas, con el comandante Camilo. Entraron de forma pacífica, no hubo violencia como en el 95. Me acuerdo que estábamos en misa cuando llegaron, pero no dispararon, ordenaron reunir al pueblo y explicaron que no nos pasaría nada. Leyeron un listado de personas: “tal persona tiene un hijo guerrillero, pero no vamos a proceder; sabemos que fulano de tal roba, pero no vamos a proceder, les recomendamos cambiar y mejorar…”. La gente no les creyó esa carreta.
Luego vino la retoma de Vigía del Fuerte por parte de las Farc. Llegaron a las 6:10 de la mañana del 1 de mayo de 2002, en los enfrentamientos falleció el comandante Camilo. La autodefensa combatió todo el día y perdió, aunque resistió porque eran muchos más guerrilleros. El 2 de mayo se salieron del pueblo para Bellavista. Nosotros armamos una comisión, íbamos a pasar por el río para ver cómo estaban allá. Yo trabajaba con un grupo de jóvenes con Unicef y tratamos de pasar en una lancha, pero no valió la bandera blanca, ni de la ONU ni insignias de la Cruz Roja, nos dispararon, íbamos con el cura y nos devolvimos. A las 11:20 escuchamos el estruendo del cilindro, después nos autorizaron para pasar, pero ya era tarde, ya venía la gente herida.
Después entró el ejército para tomarse el lugar, desapareció Conga Stereo y nos volvimos a quedar sin emisora, hasta finales del 2003 que llegó un buque de la Infantería de Marina y transmitía mientras recorría el río. Cuando se iba nos quedábamos sin emisora, cuando volvía se nos alegraba la vida.
Ahí fue que buscamos un transmisor hechizo, hasta que en 2010 la alcaldesa compró los equipos, pero se necesitaban una cantidad de plata y de trámites, entonces empezamos a tirar música las 24 horas, pero no identificábamos la emisora por miedo a que nos cerraran. Hicimos los trámites para la licencia, mientras unos amigos nos enseñaron a transmitir online. Ahora tenemos www.vigiaestereo.com, estamos en play store, en Facebook, en Twitter y la frecuencia en FM. Nos escuchan en todo el casco urbano nos escuchan en Bojayá, en el río Aquía, donde habrá punto de concentración.
Tenemos un programa que se llama “Hablemos de paz en Vigía”. El otro día, mientras entrevistaba a una persona, me llegó tanta gente que quería hablar, que me tocó abrir los micrófonos y estuvimos de 3 a 6 de la tarde. Tenemos un espacio que se llama “Atrateando las etnias”, sobre las costumbres ancestrales; tenemos un programa para los emberas, ellos lo hacen en su lengua. Los estudiantes más adelantados tienen su programa para ayudarles a los que están más quedados”.
La voz de las comunas
Por Dione Patiño
LA ESQUINA RADIO, MEDELLÍN
SR STÉREO, TIERRALTA, CÓRDOBA
Por Yoiner Palomeque
VIGÍA STÉREO, VIGÍA DEL FUERTE, ANTIOQUIA
“La emisora existe hace cinco años. Nació como una iniciativa de la alcaldesa Miriam del Carmen Serna y un grupo de jóvenes que le propusimos comprar los equipos. Ya veníamos emitiendo con un transmisor hechizo. Antes existió otra emisora, pero por la violencia desapareció.
Esa primera emisora la coordinaban dos personajes del pueblo, Chucho y Arley Asprilla, ellos entregaban su trabajo voluntario. Desde niño soñé con ser locutor; me metía al estudio, quería mirar, pero no me dejaban tocar nada, porque el LP o el CD se dañaban. Yo miraba desde la ventana y me repetía que algún día iba a ser locutor. Esa emisora era el único medio local, de vez en cuando si usted ponía una antena larga se escuchaban las cadenas nacionales. La emisora funcionaba en un segundo piso en la casa de un señor que prestó la piecita para ponerla. Prendían una plantica para emitir por raticos, pero si la gente aportaba para el galón de gasolina, pues había emisora para rato.
Todo empezó con una incursión del Eln en 1995, asesinaron a un policía en la antigua escuela. Los policías habían llegado a la escuela porque no tenían comando y porque las clases estaban suspendidas por los rumores de violencia. Después llegaron las autodefensas, había mucho temor, desplazamiento, amenazas, la gente era sacada de sus casas. Tú preferías emborracharte para dormir, era la única forma de no escuchar que se llevaron a fulano o sacaron a zutano.
A principios del 2000 hubo un combate entre las AUC y la policía, porque cambiaron al comandante de la policía y ese sargento les exigió que salieran del pueblo, y ellos no hicieron caso. El enfrentamiento empezó como a las siete de la noche; los “paras” se salieron del pueblo y los muchachos de la emisora se fueron amenazados. La guerrilla se tomó los equipos y montó Conga Stéreo. La señal era buena, invitaban a unirse a las filas, saludaban a la gente del pueblo. No había más que escuchar, ponían música guerrillera y de otros artistas. Así fue hasta 2002.
Ese año hubo una incursión paramilitar en Vigía del Fuerte por parte del bloque Élmer Cárdenas, con el comandante Camilo. Entraron de forma pacífica, no hubo violencia como en el 95. Me acuerdo que estábamos en misa cuando llegaron, pero no dispararon, ordenaron reunir al pueblo y explicaron que no nos pasaría nada. Leyeron un listado de personas: “tal persona tiene un hijo guerrillero, pero no vamos a proceder; sabemos que fulano de tal roba, pero no vamos a proceder, les recomendamos cambiar y mejorar…”. La gente no les creyó esa carreta.
Luego vino la retoma de Vigía del Fuerte por parte de las Farc. Llegaron a las 6:10 de la mañana del 1 de mayo de 2002, en los enfrentamientos falleció el comandante Camilo. La autodefensa combatió todo el día y perdió, aunque resistió porque eran muchos más guerrilleros. El 2 de mayo se salieron del pueblo para Bellavista. Nosotros armamos una comisión, íbamos a pasar por el río para ver cómo estaban allá. Yo trabajaba con un grupo de jóvenes con Unicef y tratamos de pasar en una lancha, pero no valió la bandera blanca, ni de la ONU ni insignias de la Cruz Roja, nos dispararon, íbamos con el cura y nos devolvimos. A las 11:20 escuchamos el estruendo del cilindro, después nos autorizaron para pasar, pero ya era tarde, ya venía la gente herida.
Después entró el ejército para tomarse el lugar, desapareció Conga Stereo y nos volvimos a quedar sin emisora, hasta finales del 2003 que llegó un buque de la Infantería de Marina y transmitía mientras recorría el río. Cuando se iba nos quedábamos sin emisora, cuando volvía se nos alegraba la vida.
Ahí fue que buscamos un transmisor hechizo, hasta que en 2010 la alcaldesa compró los equipos, pero se necesitaban una cantidad de plata y de trámites, entonces empezamos a tirar música las 24 horas, pero no identificábamos la emisora por miedo a que nos cerraran. Hicimos los trámites para la licencia, mientras unos amigos nos enseñaron a transmitir online. Ahora tenemos www.vigiaestereo.com, estamos en play store, en Facebook, en Twitter y la frecuencia en FM. Nos escuchan en todo el casco urbano nos escuchan en Bojayá, en el río Aquía, donde habrá punto de concentración.
Tenemos un programa que se llama “Hablemos de paz en Vigía”. El otro día, mientras entrevistaba a una persona, me llegó tanta gente que quería hablar, que me tocó abrir los micrófonos y estuvimos de 3 a 6 de la tarde. Tenemos un espacio que se llama “Atrateando las etnias”, sobre las costumbres ancestrales; tenemos un programa para los emberas, ellos lo hacen en su lengua. Los estudiantes más adelantados tienen su programa para ayudarles a los que están más quedados”.