Las lecciones del conflicto en El Salvador para Colombia
A pesar de la politización y polarización dentro de la sociedad salvadoreña se pudo lograr la desmovilización y la reincorporación del Frente Farabundo Martí. Los efectos del conflicto armado en El Salvador durante los años 80 ejercieron una gran presión para que se lograra una salida negociada del conflicto.
Colombia2020 / @EEColombia2020
El conflicto salvadoreño se origina en la confrontación entre los gobiernos militares (1931-1979) y el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), entre otras guerrillas. Después de un largo proceso de negociación llegaron al Acuerdo de Chapultepec en 1992.
En el proceso reintegración participaron más de 7,000 ex-combatientes del FMLN e incluyó su participación política, la reforma de los organismos de seguridad y proyectos de reconstrucción económica que beneficiaron igualmente a las comunidades locales. Este proceso de reintegración del FMLN fue globalmente exitoso a pesar de los grandes retos que supone la reconstrucción de la confianza, la participación política y el fortalecimiento de la institucionalidad.
Puede ver: La Aldela: historias para conversar
Catalina Buitrago, profesora de Ciencias Sociales e investigadora de ClickArte, cuenta cómo fue el proceso de investigación para llevar a cabo la segunda historia de La Aldea, basada en el conflicto salvadoreño. "En el tema de la justicia tomamos el ejemplo de este país, nos fijamos en los temas más relevantes dentro de su proceso de paz, por ejemplo, en el tema de la memoria, tuvimos en cuenta el papel que juegan las víctimas y la importancia de escucharlas".
La investigación que hicieron estuvo dividida en dos partes, una puramente teórica y otra con testimonios directos para que los personajes de La Aldea pudieran hablar desde esas voces. Las obras de arte basadas en el conflicto también fueron clave en el proceso de investigación de cada caso, explica Catalina.
En el segundo fascículo, "Un día volvieron", los personajes se enfrentan a injusticias e inseguridades que los llevan a tomar decisiones trascendentales para el desarrollo de la historia. Deben decidir si darle una segunda oportunidad a Paco, uno de los protagonistas, de retornar a La Aldea para resolver los conflictos de la comunidad a través del diálogo. Una lección que dejan los procesos de paz de otros países para lograr un avance exitoso a la paz.
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"Cada uno de los animales representa una tensión. Por ejemplo, Paco es un personaje muy insistente en temas de justicia durante esta historia. Enrique representa una figura que cambia depende cada situación según sus emociones. Cada personaje identifica emociones y características de las lecciones que encontramos en el proceso de investigación de cada país que tomamos como referencia”, cuenta la investigadora de ClickArte.
Las ocho historias salen cada viernes de forma gratuita junto a la edición impresa de El Espectador hasta el próximo 8 de noviembre.
Esta es una iniciativa creada por Colombia2020 y ClickArte con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud), la Unión Europea y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados (Acnur).
El conflicto salvadoreño se origina en la confrontación entre los gobiernos militares (1931-1979) y el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), entre otras guerrillas. Después de un largo proceso de negociación llegaron al Acuerdo de Chapultepec en 1992.
En el proceso reintegración participaron más de 7,000 ex-combatientes del FMLN e incluyó su participación política, la reforma de los organismos de seguridad y proyectos de reconstrucción económica que beneficiaron igualmente a las comunidades locales. Este proceso de reintegración del FMLN fue globalmente exitoso a pesar de los grandes retos que supone la reconstrucción de la confianza, la participación política y el fortalecimiento de la institucionalidad.
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La investigación que hicieron estuvo dividida en dos partes, una puramente teórica y otra con testimonios directos para que los personajes de La Aldea pudieran hablar desde esas voces. Las obras de arte basadas en el conflicto también fueron clave en el proceso de investigación de cada caso, explica Catalina.
En el segundo fascículo, "Un día volvieron", los personajes se enfrentan a injusticias e inseguridades que los llevan a tomar decisiones trascendentales para el desarrollo de la historia. Deben decidir si darle una segunda oportunidad a Paco, uno de los protagonistas, de retornar a La Aldea para resolver los conflictos de la comunidad a través del diálogo. Una lección que dejan los procesos de paz de otros países para lograr un avance exitoso a la paz.
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"Cada uno de los animales representa una tensión. Por ejemplo, Paco es un personaje muy insistente en temas de justicia durante esta historia. Enrique representa una figura que cambia depende cada situación según sus emociones. Cada personaje identifica emociones y características de las lecciones que encontramos en el proceso de investigación de cada país que tomamos como referencia”, cuenta la investigadora de ClickArte.
Las ocho historias salen cada viernes de forma gratuita junto a la edición impresa de El Espectador hasta el próximo 8 de noviembre.
Esta es una iniciativa creada por Colombia2020 y ClickArte con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud), la Unión Europea y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados (Acnur).