Colombia dará lecciones de paz a Ucrania cuando termine la guerra: Max Lucks
Max Lucks, portavoz de política exterior para Latinoamérica, dice que la Unión Europea debe nombrar un enviado especial para acompañar la negociación con el ELN.
Gloria Castrillón Pulido
Max Lucks, portavoz de política exterior para Latinoamérica del Partido Verde en el parlamento alemán, es un joven de 26 años que estuvo de visita en Colombia durante tres días. Vino a ratificar la necesidad de fortalecer las relaciones entre ambas naciones y ver de cerca los avances en la construcción de paz. Se reunió con funcionarios del Gobierno, magistrados de la Jurisdicción Especial para la Paz y organizaciones de la sociedad civil y viajó a la Comunidad de Paz de San José de Apartadó, en Antioquia. Estas son sus impresiones sobre los espacios comunes de cooperación.
¿Qué lugar ocupan América Latina y Colombia en la política exterior de Alemania?
Latinoamérica y sobre todo Colombia están muy alto entre las prioridades de la política exterior alemana. Como relator para América Latina y el Caribe en el parlamento alemán, presentamos en la Comisión de Asuntos de Exteriores una solicitud de resolución para fortalecer y ampliar las relaciones entre Alemania y Colombia, en el marco de la defensa de los derechos humanos, de las minorías, las mujeres, los indígenas y los grupos LGBTI, entre otros. Tenemos como trasfondo que la derecha global y los países que han caído en la derechización están cuestionando la Declaración de Naciones Unidas sobre los Derechos Humanos. El presidente Gustavo Petro está apoyando y fortaleciendo a los grupos vulnerables. Eso nos parece muy importante y por eso admiramos a Colombia.
En contexto: Alemania apoya la paz y la transición energética
¿La guerra en Ucrania no ha afectado esa visión?
La guerra en Ucrania nos hizo reflexionar y repensar nuestras relaciones. Nos dimos cuenta de que dejamos de lado a Latinoamérica y el Caribe, situación que vamos a modificar. Estamos empujando una cooperación más fuerte y esto se ha mostrado en el acuerdo del clima y energía que se firmó hace poco con Colombia. Una de las razones de mi viaje es fortalecer las buenas relaciones que existen entre los dos países.
¿En cuáles temas se verá ese fortalecimiento?
Lo lindo de la cooperación con Colombia este que no tenemos un solo tema. Obviamente tenemos relaciones económicas, como con otros países, pero no se trata solo de importar o exportar, se trata de fortalecer las cadenas de valor agregado en los dos países que ayuden a fortalecer y mejorar la vida de las personas y del clima en Colombia y Alemania. Vamos a cooperar en producción de hidrógeno verde y con estos proyectos tendremos un intercambio muy productivo para los dos lados. Hemos participado activamente en los temas de la paz, tenemos el instituto de investigaciones Capaz, hemos participado en las negociaciones en La Habana. Nos interesa mucho la paz y lo que está implementando Colombia. Hay una guerra en Europa provocada por Rusia y mientras ustedes están implementando la paz, nosotros estamos aportando militarmente para fortalecer a Ucrania. porque queremos obligar a Rusia a sentarse a la mesa de negociación. En ese momento vamos a recurrir a todo el conocimiento y la experiencia que tiene Colombia en la paz.
¿Qué lecciones puede darle Colombia a Europa en ese tema?
De Colombia podemos aprender, por ejemplo, cuán importante es poner en el centro del pensamiento a las víctimas, a las personas que han sido asesinadas, a los desaparecidos, para que tengan visibilidad. Ese es un logro de Colombia y deberíamos tender a eso, porque en una guerra la que más sufre es la población civil.
Alemania es un veedor del punto 5 del Acuerdo Final sobre víctimas, ¿cómo ven esa implementación?
Tenemos una gran esperanza con respecto al macrocaso 11, en el que investigarán los crímenes sexuales contra las mujeres y otros grupos minoritarios como indígenas y población LGBTI. Vamos a estar observando el desarrollo de ese macrocaso. Donde se nos permita participar en una posición de observador lo haremos. Recuerdo el trabajo que hizo mi colega en el partido Tom Koenings, quien participó activamente como enviado para el proceso de paz.
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¿Alemania nombraría otro enviado especial para el proceso de paz con el ELN?
Tenemos un buen fundamento para apoyar estas negociaciones. Podría ser interesante que participemos a nivel europeo con un delegado especial.
¿Hay consenso en el parlamento europeo para el apoyo de Alemania al proceso con el ELN?
En el parlamento compartimos con Colombia muchos valores democráticos. A excepción de la extrema derecha, que naturalmente que no ve con buenos ojos el apoyo que se le da al presidente Petro. Alemania siempre va a apoyar, en el momento que se le pida. Colombia ha hecho un progreso increíble en la pacificación del país. Las negociaciones con ELN no son el único punto. Tenemos otros campos de cooperación: apoyamos a la JEP, visibilizamos a las víctimas, es un apoyo a un proceso de paz ampliado.
Se ha discutido la posibilidad de financiar al ELN mientras está en cese al fuego, ¿Alemania estaría dispuesto a hacerlo?
Es un paso difícil, creo que se perdería el enfoque de lo queremos hacer. Tenemos que fortalecer financieramente a pequeños campesinos, a las personas afectadas por la guerra. Si en algún momento tuviéramos que dar pasos hacia allá, no creo que esa sea la dirección que nosotros quisiéramos tomar. En este caso habría que conversar con todos los países europeos para llegar a un consenso de cómo aportar.
La apuesta del Gobierno es hablar con bandas criminales dedicadas al narcotráfico, ¿cómo ven ese esfuerzo?
Creo que el fin último es la paz y ese es un valor que debemos defender. Todos tenemos responsabilidad en la criminalidad porque el negocio de las drogas se ha internacionalizado, gracias a que hubo una política de prohibición de las drogas que, en mi forma de ver, no fue la correcta. La comunidad internacional tiene una responsabilidad que asumir y debería hacerlo ya.
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¿Ven con buenos ojos el nuevo enfoque de lucha antidrogas del presidente Petro?
Está claro que los problemas que tenemos en Alemania con respecto a las drogas no son los mismos, pero los compartimos, estamos en el mismo bote. Espero que este año en Alemania podamos legalizar la producción de cannabis y reflexionar de dónde vienen las drogas y cómo llegan allá, cuáles son las conexiones que se deben perseguir. Alemania y Colombia deben adoptar una posición conjunta ante Naciones Unidas y la Organización Mundial de la Salud para decir que el tono prohibitivo ha fracasado. No hay que perseguir a los consumidores ni a los pequeños campesinos, sino a las estructuras criminales internacionales y trasnacionales.
Han criticado a Petro por impulsar tantas reformas tan profundas al mismo tiempo, llevándolo a un talante antidemocrático, ¿cómo ven esta situación?
He hablado con personas en el Ministerio del Interior de Colombia que están más comprometidos con los derechos de la población LGBTI que en muchos países europeos. Eso no me parece antidemocrático del Gobierno. Él necesita el apoyo del parlamento y de sectores económicos para sacar adelante esas reformas sociales y parece que no lo tiene. Es un gran reto estratégico que debe asumir, no lo envidio. Seguramente no avanzará al paso que él quiere, pero me parece que se está gobernando con buena voluntad y espero que se pueda implementar.
¿Por qué va a San José de Apartadó?
Vamos a una comunidad de paz que desde hace muchísimos años ha resistido contra todos los grupos armados, han tenido muchas víctimas que lamentar por eso. Nosotros queremos aprender las lecciones que podemos sacar de ese sitio donde han podido defender la paz sin el uso de armas contra todo tipo de ataques.
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¿Qué lugar ocupan América Latina y Colombia en la política exterior de Alemania?
Latinoamérica y sobre todo Colombia están muy alto entre las prioridades de la política exterior alemana. Como relator para América Latina y el Caribe en el parlamento alemán, presentamos en la Comisión de Asuntos de Exteriores una solicitud de resolución para fortalecer y ampliar las relaciones entre Alemania y Colombia, en el marco de la defensa de los derechos humanos, de las minorías, las mujeres, los indígenas y los grupos LGBTI, entre otros. Tenemos como trasfondo que la derecha global y los países que han caído en la derechización están cuestionando la Declaración de Naciones Unidas sobre los Derechos Humanos. El presidente Gustavo Petro está apoyando y fortaleciendo a los grupos vulnerables. Eso nos parece muy importante y por eso admiramos a Colombia.
En contexto: Alemania apoya la paz y la transición energética
¿La guerra en Ucrania no ha afectado esa visión?
La guerra en Ucrania nos hizo reflexionar y repensar nuestras relaciones. Nos dimos cuenta de que dejamos de lado a Latinoamérica y el Caribe, situación que vamos a modificar. Estamos empujando una cooperación más fuerte y esto se ha mostrado en el acuerdo del clima y energía que se firmó hace poco con Colombia. Una de las razones de mi viaje es fortalecer las buenas relaciones que existen entre los dos países.
¿En cuáles temas se verá ese fortalecimiento?
Lo lindo de la cooperación con Colombia este que no tenemos un solo tema. Obviamente tenemos relaciones económicas, como con otros países, pero no se trata solo de importar o exportar, se trata de fortalecer las cadenas de valor agregado en los dos países que ayuden a fortalecer y mejorar la vida de las personas y del clima en Colombia y Alemania. Vamos a cooperar en producción de hidrógeno verde y con estos proyectos tendremos un intercambio muy productivo para los dos lados. Hemos participado activamente en los temas de la paz, tenemos el instituto de investigaciones Capaz, hemos participado en las negociaciones en La Habana. Nos interesa mucho la paz y lo que está implementando Colombia. Hay una guerra en Europa provocada por Rusia y mientras ustedes están implementando la paz, nosotros estamos aportando militarmente para fortalecer a Ucrania. porque queremos obligar a Rusia a sentarse a la mesa de negociación. En ese momento vamos a recurrir a todo el conocimiento y la experiencia que tiene Colombia en la paz.
¿Qué lecciones puede darle Colombia a Europa en ese tema?
De Colombia podemos aprender, por ejemplo, cuán importante es poner en el centro del pensamiento a las víctimas, a las personas que han sido asesinadas, a los desaparecidos, para que tengan visibilidad. Ese es un logro de Colombia y deberíamos tender a eso, porque en una guerra la que más sufre es la población civil.
Alemania es un veedor del punto 5 del Acuerdo Final sobre víctimas, ¿cómo ven esa implementación?
Tenemos una gran esperanza con respecto al macrocaso 11, en el que investigarán los crímenes sexuales contra las mujeres y otros grupos minoritarios como indígenas y población LGBTI. Vamos a estar observando el desarrollo de ese macrocaso. Donde se nos permita participar en una posición de observador lo haremos. Recuerdo el trabajo que hizo mi colega en el partido Tom Koenings, quien participó activamente como enviado para el proceso de paz.
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¿Alemania nombraría otro enviado especial para el proceso de paz con el ELN?
Tenemos un buen fundamento para apoyar estas negociaciones. Podría ser interesante que participemos a nivel europeo con un delegado especial.
¿Hay consenso en el parlamento europeo para el apoyo de Alemania al proceso con el ELN?
En el parlamento compartimos con Colombia muchos valores democráticos. A excepción de la extrema derecha, que naturalmente que no ve con buenos ojos el apoyo que se le da al presidente Petro. Alemania siempre va a apoyar, en el momento que se le pida. Colombia ha hecho un progreso increíble en la pacificación del país. Las negociaciones con ELN no son el único punto. Tenemos otros campos de cooperación: apoyamos a la JEP, visibilizamos a las víctimas, es un apoyo a un proceso de paz ampliado.
Se ha discutido la posibilidad de financiar al ELN mientras está en cese al fuego, ¿Alemania estaría dispuesto a hacerlo?
Es un paso difícil, creo que se perdería el enfoque de lo queremos hacer. Tenemos que fortalecer financieramente a pequeños campesinos, a las personas afectadas por la guerra. Si en algún momento tuviéramos que dar pasos hacia allá, no creo que esa sea la dirección que nosotros quisiéramos tomar. En este caso habría que conversar con todos los países europeos para llegar a un consenso de cómo aportar.
La apuesta del Gobierno es hablar con bandas criminales dedicadas al narcotráfico, ¿cómo ven ese esfuerzo?
Creo que el fin último es la paz y ese es un valor que debemos defender. Todos tenemos responsabilidad en la criminalidad porque el negocio de las drogas se ha internacionalizado, gracias a que hubo una política de prohibición de las drogas que, en mi forma de ver, no fue la correcta. La comunidad internacional tiene una responsabilidad que asumir y debería hacerlo ya.
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¿Ven con buenos ojos el nuevo enfoque de lucha antidrogas del presidente Petro?
Está claro que los problemas que tenemos en Alemania con respecto a las drogas no son los mismos, pero los compartimos, estamos en el mismo bote. Espero que este año en Alemania podamos legalizar la producción de cannabis y reflexionar de dónde vienen las drogas y cómo llegan allá, cuáles son las conexiones que se deben perseguir. Alemania y Colombia deben adoptar una posición conjunta ante Naciones Unidas y la Organización Mundial de la Salud para decir que el tono prohibitivo ha fracasado. No hay que perseguir a los consumidores ni a los pequeños campesinos, sino a las estructuras criminales internacionales y trasnacionales.
Han criticado a Petro por impulsar tantas reformas tan profundas al mismo tiempo, llevándolo a un talante antidemocrático, ¿cómo ven esta situación?
He hablado con personas en el Ministerio del Interior de Colombia que están más comprometidos con los derechos de la población LGBTI que en muchos países europeos. Eso no me parece antidemocrático del Gobierno. Él necesita el apoyo del parlamento y de sectores económicos para sacar adelante esas reformas sociales y parece que no lo tiene. Es un gran reto estratégico que debe asumir, no lo envidio. Seguramente no avanzará al paso que él quiere, pero me parece que se está gobernando con buena voluntad y espero que se pueda implementar.
¿Por qué va a San José de Apartadó?
Vamos a una comunidad de paz que desde hace muchísimos años ha resistido contra todos los grupos armados, han tenido muchas víctimas que lamentar por eso. Nosotros queremos aprender las lecciones que podemos sacar de ese sitio donde han podido defender la paz sin el uso de armas contra todo tipo de ataques.
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