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A través de un comunicado que se conoció este miércoles 26 de julio, la Oficina del Alto Comisionado para la Paz informó que se tomó la decisión de revocar algunas de las resoluciones de facilitación de paz con el Clan del Golfo (grupo ilegal también conocido como AGC).
“Ante la ausencia de resultados concretos y faltas a la discreción que amerita el proceso, hemos decidido revocar algunas de las resoluciones de facilitación de paz con este grupo armado, haciendo valer los parámetros de la función de los facilitadores”, se lee en el documento.
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Aunque no hay más información sobre esas resoluciones, se trata de un claro llamado del gobierno para que esa organización manifieste hechos de paz y cese la violencia. En el comunicado, la Oficina del Alto Comisionado también reiteró la voluntad del gobierno Petro de avanzar en la construcción de la paz e invitó al Clan del Golfo a atender el clamor de las víctimas de “no más temor, zozobra y desesperanza”.
Este fue uno de los cinco grupos que acordó un cese al fuego bilateral con el presidente Gustavo Petro del 1 de enero al 30 de junio de 2023. Sin embargo, tres meses después de iniciar la tregua, este grupo grupo atacó a agentes de Policía y cometió actos de violencia en el marco del paro minero de 33 días en la región del Bajo Cauca antioqueño, hecho del que llevó a que el cese se rompiera.
“El ataque con fusil a la fuerza disponible de la policía por parte del Clan del Golfo rompe el cese al fuego. A partir de este momento no hay cese al fuego. La fuerza pública debe actuar de inmediato contra las estructuras de la organización mafiosa”, manifestó el presidente Gustavo Petro en su cuenta de Twitter el 19 de marzo.
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Pese a la ruptura del acuerdo, desde la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, en cabeza de Danilo Rueda, se continuaron las labores de acercamiento para entablar una negociación sólida con este grupo, pero el reciente comunicado de esta entidad muestra que los desafíos persisten.
Entre los retos principales para avanzar con este grupo está la definición de una estrategia de participación social y la reactivación del cese al fuego.
Este miércoles, el gobierno le hizo un nuevo llamado al Clan a sumarse en la construcción de confianza en los territorios que posibilite una paz territorial donde se respeten los derechos humanos y el Derecho Internacional Humanitario para llevar a buen puerto las negociaciones y calmar la crisis humanitaria.
¿Quiénes forman el Clan del Golfo y donde delinquen?
El Clan del Golfo o las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), como se autodenominan, son una estructura heredera del paramilitarismo, derivada de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
El Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) estableció que la mayoría de miembros iniciales de lo que hoy se conoce como AGC o Clan del Golfo fueron paramilitares rearmados, provenientes sobre todo del antiguo Bloque Centauros, en los llanos, donde operaba alias Otoniel, y del llamado Bloque Mineros en el Bajo Cauca, que estuvo al mando del extraditado Ramiro ‘Cuco Vanoy’.
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Su máximo líder, Dairo Antonio Úsuga, ‘Otoniel’, fue capturado en octubre de 2021 y extraditado en mayo de 2022. Al mando quedó Jovanis de Jesús Ávila Villadiego, conocido como ‘Chiquito Malo’.
Tras la captura de Otoniel, el grupo evidenció su alcance al declarar un paro armado que afectó a más de 11 departamentos con bloqueos, confinamientos y más 24 personas muertas. El Clan del Golfo anunció su disposición de participar en la Paz total a finales de 2022.
Según la Defensoría del Pueblo, este grupo armado ilegal tiene presencia en 23 de los 32 departamentos del país y en el último año se ha expandido desde el occidente al oriente del país, teniendo tropas actualmente en departamentos como Vichada.