Fuentes cercanas a los diálogos entre el Gobierno y las bandas del Valle de Aburrá (subregión que contempla a 10 municipios e incluye a Medellín) afirman que la instalación de la mesa de paz con miras al sometimiento de esos grupos se realizaría este viernes en el municipio de Itagüí.
De acuerdo con la información suministrada, el acto de instalación sería en la cárcel de máxima seguridad de Itagüí, donde están varias de las cabezas de esas estructuras ilegales como José Leonardo Muñoz (conocido como Douglas), Juan Carlos Mesa (con el alias de Tom) y Freyner Ramírez (Carlos Pesebre), y desde donde el pasado 28 de abril el alto Comisionado de Paz, Danilo Rueda, dio la noticia de la mesa y de otros acuerdos logrados con las bandas.
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Por ahora, los decretos con los nombres de los delegados en la mesa por parte del Gobierno y de esas estructuras armadas ya estarían listos en la Oficina del Alto Comisionado de Paz, que debe pasarlos para firma del presidente Gustavo Petro.
Además, se dará a conocer un protocolo que sea una especia de hoja de ruta para resolver situaciones, problemas, inconvenientes que se puedan presentar sobre la marcha en el proceso.
Este diálogo busca un sometimiento a la justicia de grandes estructura criminales que operan en esa zona como La Oficina y Los Pachelly, entre otras. Según Joge Mejía, uno de los facilitadores y quien hace unas semanas habló con Colombia+20, el proceso involucraría a unas 14.000 personas que pertenecen a entre 350 a 400 bandas y combos.
En una entrevista publicada el pasado lunes por este diario, el grupo de Los Pachelly habló sobre sus expectativas en este proceso y dijo que hay una voluntad de paz que “se ha intensificado en los últimos años” y que la mesa de diálogos con el Gobierno en el marco de la política de Paz Total ha sido recibida “como un espacio de reconciliación para la paz urbana”.
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Este proceso ha significado, según datos de la Alcaldía de Medellín, una reducción de hasta el 40% en los homicidios en la ciudad y que se ha profundizado en los primeros meses de este año.
“Es una decisión que sale de los barrios, pero es producto del llamado de un liderazgo que sale de las cárceles, todos caminamos en esa misma función”, afirmaron Los Pachelly.
La tras escena de los diálogos ha estado mediada por facilitadores que han acercado a los líderes y voceros de las bandas con el Gobierno Nacional. En ese papel han estado la excomisionada de la Verdad Lucía González, la congresista Isabel Zuleta y el exsecretario de Gobierno de Antioquia, Jorge Mejía, quienes también suenan como posibles delegados del Gobierno.
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Todos han hecho un mapeo en los barrios de Medellín y en la cárcel de Itagüí para saber de primera mano cuáles son las peticiones de estas estructuras armadas, qué alcances pueden tener los diálogos de paz al interior de estas estructuras tan numerosas y cómo un sometimiento a la justicia puede conllevar a una pacificación del Valle de Aburrá.