Primer bombardeo de la era Petro: la respuesta a los ataques de Mordisco en Cauca
Aunque la acción no cambia la directriz del Ministerio de Defensa sobre no usar esa herramienta en medio de civiles, sí evidencia la crisis que se está dando en ese departamento por cuenta de hombres de la disidencia Estado Mayor Central (EMC ) que no están en la mesa de diálogos y con los que no hay cese al fuego.
Cindy A. Morales Castillo
La directriz se conoció apenas unos días después de la posesión del presidente Gustavo Petro en agosto de 2022: “los bombardeos deben ser suspendidos”, dijo entonces el ministro de Defensa, Iván Velásquez.
La decisión fue sin duda un giro enorme en la política de seguridad que hasta ese momento tenía el país, pero era parte de los cambios en la estrategia nacional que planteó el mandatario e iban en concordancia con su apuesta de negociaciones en lo que se ha denominado la paz total.
“Vamos a evaluar el momento específico en que como una directriz absoluta se pueda disponer (de hacer los bombardeos) (…) Hay que privilegiar siempre la vida sobre la muerte”, reafirmó entonces el ministro Velásquez.
Con esa directriz, que también respondía a los múltiples hechos en los que quedaba se afectaba a la población civil y menores de edad —reclutados por los grupos armados— no quedaron prohibidos los bombardeos, pero sí eran muy inflexibles los requerimientos de hacerlos dentro de las operaciones militares.
Por eso sorprendió que el miércoles, la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) realizara en Cauca el primer bombardeo durante el Gobierno Petro, según las cuentas del Ministerio de Defensa, en un hecho que si bien no cambia la directriz del Ministerio de Defensa sí dice mucho sobre la crisis que se está dando en ese departamento por cuenta de hombres de la disidencia Estado Mayor Central (EMC) que no están en la mesa de diálogos, y también lo que se está llevando a cabo con la denominada Misión Cauca de las fuerzas militares. La otra facción que sí está en el proceso es la de Calarcá Córdoba.
“No hubo bombardeos contra objetivos humanos, los bombardeos se realizaron para garantizar la seguridad, dispersando de cualquier lugar, pero especialmente frente a la gran posibilidad de existencia de minas y artefactos explosivos en la zona donde debía entrar este bloque de soldados, de manera que no corrieran ningún riesgo”, dijo Velásquez la noche del miércoles, donde explicó que esa operación beta —así se llaman esos operativos— se dio en una zona sin población civil, pero donde se había ubicado un campo minado que le impedía a los soldados seguir realizando trabajos terrestres.
El campo está ubicado nada menos que en El Plateado, un corregimiento de Argelia, de apenas unos 8.000 habitantes, que se ha convertido en una zona de grave disputa entre el Ejército y hombres del EMC, con los que no hay un cese al fuego vigente.
Velásquez dijo que el objetivo final era “liberar” a El Plateado y a Argelia “de todas estas organizaciones criminales”. Además, quieren dar con el paradero de Andrés Patiño o el Mocho, máximo comandante del Bloque Occidental Jacobo Arenas, con injerencia en esa zona, y de un hombre conocido como Kevin, cabecilla del frente Carlos Patiño.
El bombardeo se dio horas después de que un grupo armado lanzaran el martes explosivos con un dron en ese corregimiento de El Plateado, lo que causó una decena de personas heridas y acabó con la vida de un menor de edad. Las víctimas se encontraban en una cancha de microfútbol. Desde el Ejército se afirma que esta acción fue hecha presuntamente por las disidencias de las FARC comandadas por Iván Mordisco, pero esto genera dudas dado que como ese grupo controla ese territorio no sería lógica un ataque.
Dentro del cañón del Micay —ubicado entre los municipios de Argelia, El Tambo y López de Micay—, el corregimiento de El Plateado se alza como el fortín más custodiado por la disidencia de Iván Mordisco. En menos de 20 años, ese caserío creció hasta triplicar en tamaño y población al casco urbano de Argelia y convertirse en una de las zonas más disputadas del sur del país.
Ese punto siempre fue el talón de Aquiles de la negociación de paz cuando se llevaba con todo los bloques. Entre otras cosas, porque su conexión geográfica lo convierte en un corredor estratégico de economías ilícitas que nutren el poder económico de esa disidencia. Por ello, el Gobierno ha intentado tomar el control y que en ese punto se haga el plan piloto para implementar la política de sustitución de cultivos de uso ilícito.
Al principio de este mes, el alcalde de Cali, Alejandro Eder, le había hecho un llamado al Gobierno para que no descartara la utilización de bombardeos para combatir a esa disidencia, que desde el pasado 17 de marzo cuando Petro ordenó el levantamiento del cese regional en Nariño, Cauca y Valle del Cauca ha azotado a esos departamentos.
Además: Escándalo de camionetas de UNP podría ser la mayor crisis con disidencia de Calarcá
El cañón del Micay y la Misión Cauca
El cañón del Micay, un complejo de montañas que son el corazón de esa zona, ha sido un territorio en disputa no solo con el Ejército, sino entre los grupos armados por ser un corredor estratégico de droga. Esa zona concentra el 75 % de los cultivos de esa hoja que existen en el Cauca.
El operativo, además, hace parte de la Misión Cauca, una estrategia que lanzó el presidente Petro el pasado 21 de junio y que confirma la sentencia de ofensiva total contra los frentes del EMC que se alejaron de la mesa de negociación.
Lea también: Suspensión del cese al fuego muestra que Cauca es el talón de Aquiles de la negociación con disidencia
Desde el levantamiento del cese al fuego, las estructuras leales a Mordisco han realizado varios acciones violentas, especialmente en Cauca y Valle del Cauca. Entre ellas, el secuestro de miembros del CTI en Cauca por parte de ese grupo armado ocurrido el 20 de abril, varios combates con el Ejército, y sendos atentados en Popayán y Jamundí, incluido la explosión de carrobombas. Además, también lanzaron hace una semana sendas amenazas contra la COP16, el principal evento internacional que se celebrará en Colombia en octubre de 2024.
“La COP16 fracasará aunque militarice con gringos la ciudad. Señor Gustavo Petro, su discurso de protección de la naturaleza se derrumbará”, escribió el grupo armado a través de su cuenta en X (antes Twitter), en referencia a la convención ambiental, que tendrá lugar en Cali en el mes de octubre.
Según el Ministerio de Defensa, para la operación que desde hace día se libra en El Plateado —y que incluyó ese bombardeo— se desplegaron desde diferentes departamentos del país helicópteros Black Hawk y tropas “que están siendo insertadas a lo largo y ancho del Cañón del Micay (…) El único propósito de esta acción decisiva de la Fuerza Pública es proteger a los colombianos y a la infraestructura de Argelia, Cauca, donde el EMC atenta contra la seguridad e integridad de las comunidades”, explicó esa cartera en su cuenta de X (antes Twitter).
El presidente Petro también se pronunció en esa red sobre el objetivo de esa operación y dijo que su meta “es que los campesinos puedan progresar con economías lícitas, alimentando a Colombia y al mundo. De lo ilícito a la paz”, explicó.
Con estas acciones queda más que descartada la posibilidad de que se puede restablecer el diálogo con las facciones de Mordisco.
✉️ Si tiene información o denuncias sobre temas relacionadas con la paz, el conflicto, las negociaciones de paz o algún otro tema que quiera compartirnos o que trabajemos, puede escribirnos a: cmorales@elespectador.com; jrios@elespectador.com; pmesa@elespectador.com o aosorio@elespectador.com
La directriz se conoció apenas unos días después de la posesión del presidente Gustavo Petro en agosto de 2022: “los bombardeos deben ser suspendidos”, dijo entonces el ministro de Defensa, Iván Velásquez.
La decisión fue sin duda un giro enorme en la política de seguridad que hasta ese momento tenía el país, pero era parte de los cambios en la estrategia nacional que planteó el mandatario e iban en concordancia con su apuesta de negociaciones en lo que se ha denominado la paz total.
“Vamos a evaluar el momento específico en que como una directriz absoluta se pueda disponer (de hacer los bombardeos) (…) Hay que privilegiar siempre la vida sobre la muerte”, reafirmó entonces el ministro Velásquez.
Con esa directriz, que también respondía a los múltiples hechos en los que quedaba se afectaba a la población civil y menores de edad —reclutados por los grupos armados— no quedaron prohibidos los bombardeos, pero sí eran muy inflexibles los requerimientos de hacerlos dentro de las operaciones militares.
Por eso sorprendió que el miércoles, la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) realizara en Cauca el primer bombardeo durante el Gobierno Petro, según las cuentas del Ministerio de Defensa, en un hecho que si bien no cambia la directriz del Ministerio de Defensa sí dice mucho sobre la crisis que se está dando en ese departamento por cuenta de hombres de la disidencia Estado Mayor Central (EMC) que no están en la mesa de diálogos, y también lo que se está llevando a cabo con la denominada Misión Cauca de las fuerzas militares. La otra facción que sí está en el proceso es la de Calarcá Córdoba.
“No hubo bombardeos contra objetivos humanos, los bombardeos se realizaron para garantizar la seguridad, dispersando de cualquier lugar, pero especialmente frente a la gran posibilidad de existencia de minas y artefactos explosivos en la zona donde debía entrar este bloque de soldados, de manera que no corrieran ningún riesgo”, dijo Velásquez la noche del miércoles, donde explicó que esa operación beta —así se llaman esos operativos— se dio en una zona sin población civil, pero donde se había ubicado un campo minado que le impedía a los soldados seguir realizando trabajos terrestres.
El campo está ubicado nada menos que en El Plateado, un corregimiento de Argelia, de apenas unos 8.000 habitantes, que se ha convertido en una zona de grave disputa entre el Ejército y hombres del EMC, con los que no hay un cese al fuego vigente.
Velásquez dijo que el objetivo final era “liberar” a El Plateado y a Argelia “de todas estas organizaciones criminales”. Además, quieren dar con el paradero de Andrés Patiño o el Mocho, máximo comandante del Bloque Occidental Jacobo Arenas, con injerencia en esa zona, y de un hombre conocido como Kevin, cabecilla del frente Carlos Patiño.
El bombardeo se dio horas después de que un grupo armado lanzaran el martes explosivos con un dron en ese corregimiento de El Plateado, lo que causó una decena de personas heridas y acabó con la vida de un menor de edad. Las víctimas se encontraban en una cancha de microfútbol. Desde el Ejército se afirma que esta acción fue hecha presuntamente por las disidencias de las FARC comandadas por Iván Mordisco, pero esto genera dudas dado que como ese grupo controla ese territorio no sería lógica un ataque.
Dentro del cañón del Micay —ubicado entre los municipios de Argelia, El Tambo y López de Micay—, el corregimiento de El Plateado se alza como el fortín más custodiado por la disidencia de Iván Mordisco. En menos de 20 años, ese caserío creció hasta triplicar en tamaño y población al casco urbano de Argelia y convertirse en una de las zonas más disputadas del sur del país.
Ese punto siempre fue el talón de Aquiles de la negociación de paz cuando se llevaba con todo los bloques. Entre otras cosas, porque su conexión geográfica lo convierte en un corredor estratégico de economías ilícitas que nutren el poder económico de esa disidencia. Por ello, el Gobierno ha intentado tomar el control y que en ese punto se haga el plan piloto para implementar la política de sustitución de cultivos de uso ilícito.
Al principio de este mes, el alcalde de Cali, Alejandro Eder, le había hecho un llamado al Gobierno para que no descartara la utilización de bombardeos para combatir a esa disidencia, que desde el pasado 17 de marzo cuando Petro ordenó el levantamiento del cese regional en Nariño, Cauca y Valle del Cauca ha azotado a esos departamentos.
Además: Escándalo de camionetas de UNP podría ser la mayor crisis con disidencia de Calarcá
El cañón del Micay y la Misión Cauca
El cañón del Micay, un complejo de montañas que son el corazón de esa zona, ha sido un territorio en disputa no solo con el Ejército, sino entre los grupos armados por ser un corredor estratégico de droga. Esa zona concentra el 75 % de los cultivos de esa hoja que existen en el Cauca.
El operativo, además, hace parte de la Misión Cauca, una estrategia que lanzó el presidente Petro el pasado 21 de junio y que confirma la sentencia de ofensiva total contra los frentes del EMC que se alejaron de la mesa de negociación.
Lea también: Suspensión del cese al fuego muestra que Cauca es el talón de Aquiles de la negociación con disidencia
Desde el levantamiento del cese al fuego, las estructuras leales a Mordisco han realizado varios acciones violentas, especialmente en Cauca y Valle del Cauca. Entre ellas, el secuestro de miembros del CTI en Cauca por parte de ese grupo armado ocurrido el 20 de abril, varios combates con el Ejército, y sendos atentados en Popayán y Jamundí, incluido la explosión de carrobombas. Además, también lanzaron hace una semana sendas amenazas contra la COP16, el principal evento internacional que se celebrará en Colombia en octubre de 2024.
“La COP16 fracasará aunque militarice con gringos la ciudad. Señor Gustavo Petro, su discurso de protección de la naturaleza se derrumbará”, escribió el grupo armado a través de su cuenta en X (antes Twitter), en referencia a la convención ambiental, que tendrá lugar en Cali en el mes de octubre.
Según el Ministerio de Defensa, para la operación que desde hace día se libra en El Plateado —y que incluyó ese bombardeo— se desplegaron desde diferentes departamentos del país helicópteros Black Hawk y tropas “que están siendo insertadas a lo largo y ancho del Cañón del Micay (…) El único propósito de esta acción decisiva de la Fuerza Pública es proteger a los colombianos y a la infraestructura de Argelia, Cauca, donde el EMC atenta contra la seguridad e integridad de las comunidades”, explicó esa cartera en su cuenta de X (antes Twitter).
El presidente Petro también se pronunció en esa red sobre el objetivo de esa operación y dijo que su meta “es que los campesinos puedan progresar con economías lícitas, alimentando a Colombia y al mundo. De lo ilícito a la paz”, explicó.
Con estas acciones queda más que descartada la posibilidad de que se puede restablecer el diálogo con las facciones de Mordisco.
✉️ Si tiene información o denuncias sobre temas relacionadas con la paz, el conflicto, las negociaciones de paz o algún otro tema que quiera compartirnos o que trabajemos, puede escribirnos a: cmorales@elespectador.com; jrios@elespectador.com; pmesa@elespectador.com o aosorio@elespectador.com