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Vuelve y juega el cruce de cartas, en época de pandemia, entre los antiguos comandantes de las Farc y gestores de paz como Álvaro Leyva Durán, quien estuvo detrás de la redacción del Acuerdo de Paz de La Habana (Cuba). Este lunes, recibió la misiva de parte de ocho excomandantes, antiguos miembros del Secretariado de la extinta guerrilla, quienes le expresaron que “están dispuestos a que la verdad trascienda sin ninguna clase de tapujos”. Y advirtieron que algunos sectores quieren manipularla y distorsionarla. Uno de los firmantes es Rodrigo Londoño (Timochenko), actual director del partido político FARC.
El pasado 20 de agosto, el exministro Leyva le envió una carta a Timochenko y a su antiguo enemigo en la guerra, Salvatore Mancuso, exjefe de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), a quienes instó a contar cuanto antes sus versiones de la verdad del conflicto armado en el país.
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“Me tomo la libertad de pedirles a ustedes, y a otros exintegrantes de las AUC, que así hayan sido enemigos encarnizados de todas las horas, se pongan de acuerdo para dar prontamente los pasos pertinentes con el propósito de que las víctimas y la opinión nacional conozcan de manera directa la verdad que está por relatarse. Sugiero, con la mayor consideración, que, con la aquiescencia de la Comisión de la Verdad, se recurra a medios de difusión que permitan que quienes quieran escucharlos lo puedan hacer”, les escribió Leyva.
Por eso, en la respuesta los excomandantes guerrilleros también le aclaran que seguirán conversando con sus enemigos de otras épocas “para que, ya por separado, ya conjuntamente, demos a conocer la verdad”. Y agregaron: “Aspiramos que esta llegue a todos los rincones de nuestra adolorida patria porque queremos un país distinto. Buscaremos a la Comisión de la Verdad para que se convierta en el aglutinante de una verdad pública. Pensamos en las víctimas, pensamos en Colombia. Somos los más interesados en el cumplimiento integral del Acuerdo de Paz”.
Este cruce de cartas se ha dado en medio de la incertidumbre del regreso del excomandante paramilitar Mancuso, quien terminó de pagar su condena en Estados Unidos por narcotráfico y está a la espera de regresar a Colombia para enfrentar la justicia por sus crímenes durante la guerra. También en medio de la tensión por su extradición, porque se anuncia que será un ventilador de sus relaciones con los políticos ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) que aún estudia su solicitud de sometimiento como tercero civil. Por lo pronto, la Comisión de la Verdad, también espera escucharlo para responder tantas preguntas que aún tienen sus víctimas.
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Cabe recordar que Timochenko y Mancuso han cruzado cartas de cara a este propósito. El 30 de julio de este año, hablaron de la importancia de que la verdad del conflicto se conozca a la luz de la JEP y de la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad. “Esta mañana conversaron estos personajes dado el compromiso de ambos con la paz, con las víctimas y la verdad. Los señores Londoño y Mancuso manifestaron su interés en continuar el diálogo iniciado en la mañana de hoy… coincidieron en la importancia de los derechos de las víctimas y en condenar los intentos de satanización de la JEP, particularmente de la Comisión de la Verdad, de los comisionados mismos y de su director, el sacerdote jesuita Francisco de Roux; y estimaron necesario defender la independencia de esta justicia”, escribió en un comunicado el exministro Leyva en julio pasado.