Es oficial la instalación del quinto ciclo de diálogos de paz entre el Gobierno y una parte de la disidencia de las extintas FARC, conocida como Estado Mayor Central (EMC). En un comunicado con fecha del 14 de junio, los delegados de la mesa también anunciaron que el ciclo, que se llevará a cabo en la ciudad de Bogotá, se tuvo que posponer.
Si bien el Gobierno Nacional había anunciado que la ronda de conversaciones de paz iban a iniciar el próximo 20 de junio, con los frentes que se mantienen firmes en el proceso, este viernes las delegaciones confirmaron que el quinto ciclo finalmente se desarrollará entre el 4 y 10 de julio de 2024.
Dentro de las principales razones para mover la fecha de inicio es que el calendario se cruza con la instalación de la mesa de diálogo con otra disidencia de las extintas FARC, la Segunda Marquetalia, bajo el comando de Iván Márquez. Las conversaciones con ese grupo armado está previsto que se adelanten en Venezuela del 25 al 29 de junio de este año.
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Ese calendario con la Segunda Marquetalia se conoció tras una reunión que tuvieron ambas partes en Venezuela y a la que también asistieron el alto Comisionado de Paz, Otty Patiño, el mismo Márquez; Armando Novoa, jefe de la delegación de Gobierno en ese proceso. Además, estuvieron presentes representantes de Cuba, Noruega y Venezuela, el delegado del Representante Especial del Secretario General de la ONU y de la Conferencia Episcopal de Colombia; y un facilitador. También estuvo monseñor Héctor Fabio Henao.
Por ese motivo, el inicio de los diálogos con el EMC se movió hasta principios de julio, con el fin de no cruzar las mesas de conversación.
El pasado 9 de junio, el jefe negociador del Gobierno con el EMC, Camilo González Posso, se refirió a los graves enfrentamientos entre estructuras del EMC y la Segunda Marquetalia en el municipio de San José del Fragua, Caquetá.
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“Es un contraste entre lo que va en la mesa -con observancia de cese al fuego, transformaciones territoriales como apuesta, una construcción de agenda- y lo que está sucediendo en el Cauca y en esta zona del sur de Colombia con acontecimientos de escalamientos de conflicto y acciones violentas que perturban a la población y le restan credibilidad a un propósito de paz. Pero la paz, a pesar de todos estos retos, es una tarea impostergable”, aseguró el jefe negociador.
Según contó, actualmente se está avanzando en la mesa de negociación con el EMC en Caquetá, “con actividades importantes, reuniones con más de 3.000 delegados de Juntas de Acción Comunal”, que también se han replicado en el departamento de Norte de Santander.