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Los habitantes del barrio Por Fin, en el suroccidente de Barranquilla, amanecieron este 15 de septiembre con temor ante la presencia de caracoles africanos cerca de sus hogares. Los animales estarían proliferándose desde un terreno baldío hasta zonas comunes e incluso algunos hogares de la comunidad.
Según el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), esta especie puede generar enfermedades intestinales, meningitis, inflamación de tejidos, diarrea, fiebre e incluso la muerte.
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Respecto al lote baldío, Silvana Rodríguez, habitante del barrio, le dijo al diario El Heraldo que “este lote es un problema porque el dueño no lo quiere limpiar y están esos animales que son venenosos. Eso nos está perjudicando porque nosotros tenemos hijos y si tocan un caracol de esos puede ocasionarle un daño en su salud”.
Otra residente del Por Fin, Luz Marina Soto, confirmó esta versión y dijo que en reiteradas ocasiones varios vecinos le han pedido al dueño del lote que “nos colabore con eso, porque esa esquina se ha convertido en un tiradero de basura, animales muertos y ahora hay una cantidad de caracoles africanos que nos tienen asustados”.
Al respecto, la autoridad ambiental del Distrito, Barranquilla Verde, indicó que han atendido los llamados de la comunidad cuando reportan que hay moluscos en sus patios, zonas comunes y parques.
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“Lo primero que hay que hacer es realizar la recolección manual de los individuos, siempre con todas las medidas de protección y disposición adecuada de los animales y se brinda la respectiva información a los ciudadanos para que sepan que se debe hacer para evitar la proliferación de los animales”, explicó Barranquilla Verde.
Por lo pronto, esta autoridad ambiental recomendó a los ciudadanos utilizar guantes y botas de caucho en caso de recoger los caracoles, colocarlos dentro de una bolsa roja y, una vez se haga el llamado, hacer la entrega a la patrulla ambiental que pasará a recolectarlos.