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Tras conocerse la captura de ocho personas, que presuntamente estuvieron involucradas en el robo de $85.000 millones de una de las sedes de Prosegur, en Barranquilla, las autoridades dieron detalles del millonario hurto que fue superior al que se registró en los años 90, en la bóveda de un banco en Valledupar.
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De acuerdo con las autoridades, el robo a la empresa de transporte de valores se planeó con meses de anticipación y se comenzó a ejecutar desde cuatro semanas antes por una estructura criminal a la que denominaron “Los Usurpadores”, en la que cada uno de los capturados ocupó un papel, tanto antes como después del hecho.
Entre los detalles se destacó que los involucrados mantuvieron comunicación a través de un chat de WhatsApp, en el que utilizaban frases como “esto va a ser una bendición grande”, “En el nombre de Dios” y “Ya usted es millonario donde esté…”, que hacían parte de las claves que utilizaban para organizar el crimen.
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De igual forma, se conocieron imágenes del día en que se cometió el robo. En ellas se ve que son por lo menos 14 personas las que ingresan a la sede de la empresa y es una mujer la que abre la puerta y les da el paso.
El resto de lo que se ve en las imágenes hace parte de lo que ya se sabía, como que, por ejemplo, los sujetos intimidaron con armas a los guardias de seguridad, luego amordazaron a uno de ellos y redujeron a los demás, a los que obligaron a desactivar las alarmas de seguridad de la bóveda.
Al respecto, el comandante de la Policía de Barranquilla, el coronel Edwin Masleider Urrego Pedraza, indicó que es curioso cómo en las imágenes se ve la precisión con la que los sujetos sabían dónde está el dinero. Sumado a esto, señaló que habría sido una mujer, que trabajaba en el lugar, la encargada de facilitar el ingreso y de dar los detalles del manejo de la empresa para realizar el robo.
A pesar de que en un comienzo se dijo que el robo había sido por alrededor de $15.000 millones, las autoridades confirmaron que en realidad fue por $85.000 millones, lo que lo convierte en uno de los más grandes en la historia del país.
Las capturas
El día en que se registró el hurto, las autoridades capturaron a dos personas que presuntamente realizaban trabajos frente a la sede de Prosegur, en el barrio Rosario de Barranquilla, pero quedaron en libertad, debido a que las autoridades no lograron comprobar su participación.
Posteriormente, tras más de 50 actuaciones, que incluyeron la revisión de videos de cámaras de seguridad, interrogatorios y allanamientos, entre otros, se logró la recuperación de $835 mil millones, así como, a través de ocho operativos en los barrios Ciudad Jardín, Boston, San Francisco y Miramar, de Barranquilla; Los Cedros y Las Gaviotas, de Soledad; en el corregimiento de Salgar, en Puerto Colombia, y en el barrio Santa Marta, de Bogotá, se logró la captura de las personas señaladas.
¿Qué pasó con el dinero?
Las autoridades señalaron que en medio de los allanamientos se ha encontrado partes del dinero, así como una de las personas involucradas en el caso habría entregado $85 millones, que recibió por la adecuación de uno de los vehículos utilizados en el asalto.
Además, tienen claridad en que los involucrados han comprado vehículos de lujo, muebles y hasta uno de ellos habría usado el dinero para pagar una cirugía plástica de su pareja.
Los involucrados fueron puestos a disposición de las autoridades competentes, así como la Fiscalía les imputará los cargos de concierto para delinquir, hurto calificado y secuestro simple. Un juez ya legalizó su captura, por lo que se espera que el próximo 28 de noviembre continúen la diligencias contra las ocho personas capturadas.