Paro Nacional: disturbios en inmediaciones del estadio de Barranquilla
En disturbios terminó un plantón que se mantuvo durante varias horas en inmediaciones del estadio Romelio Martínez. Los manifestantes pedían que se cancelara el partido que se disputará a las 7:00 p.m. entre Junior y River Plate de Argentina.
Luego de que un grupo de manifestantes lograra pasar el primer filtro de seguridad que dispuso la Policía alrededor del estadio, algunas personas se enfrentaron con miembros de la fuerza pública. En videos que circulan por redes sociales se observa que agentes del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) utilizan aturdidoras y gases lacrimógenos para dispersar a los cientos de personas que le pedían a las autoridades locales y a la Conmebol que cancelara el partido de Copa Libertadores.
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En horas de la mañana el alcalde de la ciudad, Jaime Pumarejo, se refirió a la jornada de movilizaciones que estaban planeadas para hoy, el décimo quinto día de protestas en el marco del Paro Nacional. Afirmó que su administración es garante del derecho a la manifestación, pero que de igual manera debía garantizar que el resto de ciudadanía que no se manifiesta pueda cumplir las actividades que tienen previstas. Pumarejo le dijo a El Heraldo que “el partido se va a jugar y también se van a hacer miles de otras actividades en la ciudad de Barranquilla porque la vida no depende de la voluntad de un manifestante u otro, sino de las personas que hacen su vida, su comercio, su trabajo. La Conmebol ha decidido que el partido se siga jugando y son los únicos que pueden tomar esa decisión”.
De acuerdo al anuncio del mandatario, hacia el mediodía se desplegó un nutrido cordón de seguridad en los alrededores del escenario deportivo. A raíz de este operativo miles de manifestantes se dieron cita en el lugar para oponerse a la realización del partido.
Sin embargo, la mayoría de las movilizaciones que tuvieron lugar en la ciudad se desarrollaron de forma pacífica.
Ambos clubes llegaron al estadio sin problemas. Al cierre de esta nota la Conmebol no había cancelado el encuentro por la cuarta fecha de la fase de grupos de la Copa Libertadores.
Luego de que un grupo de manifestantes lograra pasar el primer filtro de seguridad que dispuso la Policía alrededor del estadio, algunas personas se enfrentaron con miembros de la fuerza pública. En videos que circulan por redes sociales se observa que agentes del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) utilizan aturdidoras y gases lacrimógenos para dispersar a los cientos de personas que le pedían a las autoridades locales y a la Conmebol que cancelara el partido de Copa Libertadores.
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En horas de la mañana el alcalde de la ciudad, Jaime Pumarejo, se refirió a la jornada de movilizaciones que estaban planeadas para hoy, el décimo quinto día de protestas en el marco del Paro Nacional. Afirmó que su administración es garante del derecho a la manifestación, pero que de igual manera debía garantizar que el resto de ciudadanía que no se manifiesta pueda cumplir las actividades que tienen previstas. Pumarejo le dijo a El Heraldo que “el partido se va a jugar y también se van a hacer miles de otras actividades en la ciudad de Barranquilla porque la vida no depende de la voluntad de un manifestante u otro, sino de las personas que hacen su vida, su comercio, su trabajo. La Conmebol ha decidido que el partido se siga jugando y son los únicos que pueden tomar esa decisión”.
De acuerdo al anuncio del mandatario, hacia el mediodía se desplegó un nutrido cordón de seguridad en los alrededores del escenario deportivo. A raíz de este operativo miles de manifestantes se dieron cita en el lugar para oponerse a la realización del partido.
Sin embargo, la mayoría de las movilizaciones que tuvieron lugar en la ciudad se desarrollaron de forma pacífica.
Ambos clubes llegaron al estadio sin problemas. Al cierre de esta nota la Conmebol no había cancelado el encuentro por la cuarta fecha de la fase de grupos de la Copa Libertadores.