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El alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, denunció amenazas en su contra después de iniciar el desalojo de las personas que invadieron el Jarillón del río Cauca, en el sector conocido como Brisas del nuevo amanecer. Los operativos en el lugar iniciaron el 31 de agosto, donde se derrumbaron cerca de 200 cambuches que se habían construido de manera ilegal.
“Tenemos allí a todas las secretarías trabajando. Se han identificado algunas víctimas del conflicto que tienen inmediatamente la atención del Estado. Aquellos que vienen amenazando o aquellos políticos que promocionan la ocupación del Jarillón, les quiero decir que serán trasladados a la Fiscalía General de la Nación”, sostuvo el mandatario.
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Ospina mandó un mensaje, presuntamente, a los políticos que han estado promoviendo la invasión de este lugar, que está cerca del río Cauca. “Hagan política de calidad, no la hagan promocionando la invasión de un espacio que es cordón de vida, dan lastima. Al estimular la construcción de viviendas en sitios donde todos corren peligro”, sostuvo.
Hasta este 1 de septiembre se habían hecho cuatro operativos para desalojar a las personas que han invadido ese espacio. Eli Shnaider Brener, líder del Plan Jarillón, explicó que el tramo invadido era conocido como Brisas de un Nuevo Amanecer y las familias que habitaban, en su momento fueron reasentadas. Sin embargo, las invasiones retornaron. “En los últimos tres meses vivimos unos procesos invasivos sin antecedentes. En un lapso de 48 horas, nos levantaron en esta zona entre 1000 y 1600 cambuches o demarcaciones”, dijo el funcionario.
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El secretario de Gestión del Riesgo, Rodrigo Zamorano, explicó que la importancia de mantener despejado este lugar radica en que de llegar a colapsar puede inundar hasta 900 mil personas. “El Jarillón debe ser sismorresistente, pero los humanos le agregamos peso, producimos desperdicios que atraen a las hormigas, el tránsito de carros también lo afecta, lo mismo que plantar árboles”, aseguró.