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En un cañaduzal sobre la vía que conduce del municipio de Candelaria al de Florida, las autoridades encontraron el cuerpo sin vida de Sofía Delgado, la niña de 12 años que desapareció el pasado 29 de septiembre luego de que salió de la casa de su abuela hacia su vivienda en busca de un champú para bañar a su perro.
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El cuerpo de la niña, que estaría enterrado entre bolsas, fue encontrado por las autoridades luego de que al parecer los responsables confesaron el crimen. En la zona se encuentran integrantes del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía realizando las correspondientes inspecciones.
Siguiendo las pistas de un carro blanco y las acusaciones contra un comerciante del corregimiento, se hicieron tres allanamientos, en medio de los cuales se encontraron rastros de sangre. Tras indagaciones se dio con la captura de un hombre y una mujer, dueños de una veterinaria. El sujeto confesó el crimen y dio a las autoridades la información de donde había enterrado el cuerpo.
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La desaparición de Sofía Delgado generó indignación en el país. La niña había salido de la vivienda de su abuela para conseguir un champú para bañar a su perro, pero con el paso del tiempo la menor de edad no regresó y sus familiares comenzaron la búsqueda.
Primero se conocieron imágenes de una cámara de seguridad en la que se ve a la niña dirigirse hacia su vivienda. En medio de la incertidumbre, la madre de Sofía, Lady Zúñiga, indicó que vecinos les señalaron que un vehículo blanco había estado transitando la zona donde desapareció la niña, por lo que esta se convirtió en una de las pistas clave de las autoridades.
En su búsqueda, tanto la alcaldía de Candelaria como la gobernación del Valle anunciaron millonarias recompensas por información del paradero de la niña, mientras que la Policía desplegó un operativo que contó con más de 70 uniformados, rastreos con drones, así como trabajos articulados con la Fiscalía.
De igual forma, en el municipio se realizaron manifestaciones pidiendo el regreso de Sofía Delgado, mientras que la familia guardaba la fe de que la niña aún estuviera con vida. “Dios es el que me da fe. Todos los días le oro porque, como lo he repetido, hasta que mi hija aparezca, para mí ella está viva y va a seguir viva”, había indicado el pasado miércoles 16 de octubre a Noticias Caracol la madre de la niña.