Infiltrados en Minga indígena de Cali pedirán perdón

Las autoridades de Cali retirarán la recompensa de $20 millones, que se había ofrecido para capturar a los jóvenes infiltrados en la minga indígena el pasado 10 de diciembre. Además, se conciliará la denuncia penal interpuesta en la Fiscalía por el delito de ataque contra funcionario público y habrá un acto de perdón el 13 de diciembre, en el que estarán presentes los responsables.

Estas personas agredieron al secretario de seguridad, Carlos Soler, sobre las 10 de la mañana del viernes y lo obligaron a retirarse de las manifestaciones. “Se pusieron a prueba todos estos acuerdos cuando se presentan diez jóvenes desadaptados, los conocemos a todos y bajo efectos de las drogas, borrachos, intentan atacar y decir algunas cosas. Varios de ellos tienen órdenes de captura”, dijo el secretario cuando ocurrieron los hechos.

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Ahora, Soler dice que sería conveniente una conciliación. “Los muchachos que aparecen en las fotos y en los videos, a través de la Arquidiócesis de Cali buscan una mediación en el entendido en que uno de esos jóvenes es menor de edad y hay otro que está muy asustado porque ese día estaba muy exaltado y quieren pedir excusas públicos porque se sienten amenazados. Son conscientes de que sus acciones no estuvieron bien ni por Cali ni tampoco para la Minga”, aseguró el funcionario.

El secretario también aclaró que estos jóvenes no estaban en la minga y que las comunidades indígenas coordinaron todo para que la manifestación fuera pacífica. Las protestas de los líderes y lideresas estuvieron centradas en la violencia que devasta a sus territorios y en el creciente reclutamiento forzado.

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Este fue el único momento de tensión durante el paso de la minga indígena. La movilización contó con el acompañamiento de organizaciones internacionales y del ministerio público. “Agradecerles a todos ustedes el trabajo, la dedicación del día de hoy. Agradecer el haber mantenido la calma y ayudar a que esto saliera como salió. Creo que el ejercicio democrático de protesta, como debe ser una protesta pacífica, se llevó a cabo”, dijo Soler en el Puesto de Mando Unificado que se llevó a cabo al terminar las manifestaciones.

Las autoridades de Cali retirarán la recompensa de $20 millones, que se había ofrecido para capturar a los jóvenes infiltrados en la minga indígena el pasado 10 de diciembre. Además, se conciliará la denuncia penal interpuesta en la Fiscalía por el delito de ataque contra funcionario público y habrá un acto de perdón el 13 de diciembre, en el que estarán presentes los responsables.

Estas personas agredieron al secretario de seguridad, Carlos Soler, sobre las 10 de la mañana del viernes y lo obligaron a retirarse de las manifestaciones. “Se pusieron a prueba todos estos acuerdos cuando se presentan diez jóvenes desadaptados, los conocemos a todos y bajo efectos de las drogas, borrachos, intentan atacar y decir algunas cosas. Varios de ellos tienen órdenes de captura”, dijo el secretario cuando ocurrieron los hechos.

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Ahora, Soler dice que sería conveniente una conciliación. “Los muchachos que aparecen en las fotos y en los videos, a través de la Arquidiócesis de Cali buscan una mediación en el entendido en que uno de esos jóvenes es menor de edad y hay otro que está muy asustado porque ese día estaba muy exaltado y quieren pedir excusas públicos porque se sienten amenazados. Son conscientes de que sus acciones no estuvieron bien ni por Cali ni tampoco para la Minga”, aseguró el funcionario.

El secretario también aclaró que estos jóvenes no estaban en la minga y que las comunidades indígenas coordinaron todo para que la manifestación fuera pacífica. Las protestas de los líderes y lideresas estuvieron centradas en la violencia que devasta a sus territorios y en el creciente reclutamiento forzado.

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Este fue el único momento de tensión durante el paso de la minga indígena. La movilización contó con el acompañamiento de organizaciones internacionales y del ministerio público. “Agradecerles a todos ustedes el trabajo, la dedicación del día de hoy. Agradecer el haber mantenido la calma y ayudar a que esto saliera como salió. Creo que el ejercicio democrático de protesta, como debe ser una protesta pacífica, se llevó a cabo”, dijo Soler en el Puesto de Mando Unificado que se llevó a cabo al terminar las manifestaciones.