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En los últimos días ha aumentado la presencia de migrantes en el occidente de Colombia, que llegan al país a través de la frontera con Ecuador. El cálculo habla de al menos 1.500 personas que cruzan diariamente atravesando el territorio nacional hasta llegar al Tapón del Darién, selva que marca el límite con Panamá.
En su mayoría son de nacionalidad haitiana y su propósito es llegar finalmente a Estados Unidos. Sin embargo, quedan varados en algunas ciudades como Cali.
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Allí la Secretaría de Bienestar Social de la alcaldía les brindó atención humanitaria en la Terminal de Transporte (Mi Terminal Cali) en donde desde hace dos semanas se dispuso un espacio de apoyo con servicio médico, vacunación en niños para la rubeola y pruebas covid-19 como una primera atención.
Los migrantes no buscan quedarse en el país sino continuar el recorrido, pero las medidas del Gobierno Nacional han dificultado que estas personas accedan a los transportes. Por eso quedan varados en las ciudades.
“El llamado al Gobierno Nacional para que nos solucione, ya sea permitiendo la venta de tiquetes terrestres de manera legal para que no haya piratería ni abuso en estos momentos con ellos por parte de algunos transportadores, o que se haga trámite de deportación o un corredor humanitario”, afirmó María Fernanda Penilla Quintero, secretaria de Bienestar Social.
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Una solución definitiva es lo que pide el gerente de Mi Terminal Cali, Ivanov Russi. “Que se habilite un corredor humanitario para que estas personas puedan transitar por todo el país y, finalmente, llegar a Panamá y Estados Unidos”.
“En este momento, hay una restricción por parte de Migración Colombia; hay una resolución vigente que está haciendo cumplir la Policía y que impide que el transporte intermunicipal los movilice”, insistió Russi.
Los servidores públicos coinciden en el reclamo hacia Migración Colombia y le piden a la entidad que resuelva el problema que no solo es de Cali sino de un gran número de municipios entre Pasto y Necoclí.
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“Vamos a hacer una mesa técnica con Migración Colombia para que nos ayuden a darle una solución a esta problemática. No tenemos un número exacto, vienen por grupos y así mismo se van. Ellos no se quieren quedar en la ciudad, ellos cuentan con recursos para salir. Vamos a concertar con el Alcalde y es una de las solicitudes para que ellos sigan con su tránsito”, dijo Carlos Patiño, asesor del despacho de la Alcaldía de Cali.
Jean Loupens Desrosiers, es uno de los migrantes haitianos que tuvo que caminar 10 días para ir de Pasto a Cali, puesto que ninguna empresa le vendió un pasaje por tierra. “Nosotros queremos irnos. No nos queremos quedar aquí pero estamos gastando mucho dinero”, contó.
“No nos quieren vender tiquetes para viajar ni nos quieren alquilar una habitación aunque tenemos el dinero para pagar. Hemos tenido que dormir en la calle con nuestras familias”, relató el migrante.
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Añadió que todo representa para ellos un gasto. “Por una botella de agua pequeña nos piden más de 3 mil pesos. Tengo amigos que les han cobrado 600 dólares por cabeza para llevarlos a Necoclí y luego el conductor no aparece o dejan a la gente tirada en medio de la carretera. Ya es difícil confiar en lo que le dicen a uno y con mayor razón si nos ofrecen algo gratis”.
Finalmente, el gobernador de Nariño, Jhon Rojas, alertó de la posible llegada de más de 4.000 migrantes haitianos que vienen desde Ecuador. El mandatario dice tener información sobre la decisión de más de 180.000 personas de trasladarse hasta Estados Unidos.