Pico y cédula, Toque de queda y ley seca, las medidas que vuelven a Cali por el coronavirus
La Alcaldía de Cali decretó esas medidas para evitar la propagación del COVID-19. El decreto comienza a regir desde el jueves 17 de diciembre hasta el 23 del mismo mes.
El pico y cédula, el toque de queda y la ley seca se unieron a la declaratoria de alerta roja sanitaria en Cali. Las medidas de restricción tienen como objetivo evitar el aumento de casos de COVID-19, durante esta temporada decembrina.
El pico y cédula empieza desde el jueves 17 de diciembre con números impares, el viernes 18 con impares y así sucesivamente hasta el 22 de diciembre a las 11:59 p.m.. El Toque de queda va desde las 11 de la noche hasta las 5 de la mañana. Asimismo, la ley seca rige desde las 10:00 p.m. hasta las 5:00 a.m.. Todas esas medidas aplican hasta el 23 de diciembre a la cero horas y pueden extenderse dependiendo del comportamiento de los contagios.
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Estas medidas tienen excepciones para personal médico, trabajadores en la producción de eventos como la feria de Cali, casos de fuerza mayor, entre otros. “Entendemos el impacto que tienen estos decretos durante la dinámica de recuperación económica, pero la amenaza del virus nos obliga a hacerlo”, explica Carlos Alberto Rojas, secretario de Seguridad y Justicia de Cali.
Desde la Alcaldía habrá una reunión con comerciantes para llegar a un consenso y buscar estrategias que les permita continuar trabajando sin inconvenientes.
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En la capital de Valle del Cauca, también se declaró la alerta roja sanitaria, precisamente por el aumento de casos de COVID-19. Según la Secretaría de Salud, actualmente, el nivel de ocupación es del 90 %. “Ayer tuvimos una reunión con los directores de clínicas de alta complejidad y ellos mostraron un panorama complejo que, desde la Secretaría de Salud, se ha verificado con visitas en sitio. Nos preocupa la capacidad de respuesta para la comunidad en general”, detalla Miyerlandi Torres, secretaria de Salud de Cali.
Torres asegura que la velocidad de transmisión del virus es muy alta, la cual está por encima de 1,13. “Eso quiere decir que, de 10 personas infectadas, se están contagiando 11 personas nuevas más. No estamos controlando la pandemia, debemos tratar de reducir la velocidad, especialmente para que no afecte a personas con riesgo de complicaciones”, agrega la funcionaria.
El pico y cédula, el toque de queda y la ley seca se unieron a la declaratoria de alerta roja sanitaria en Cali. Las medidas de restricción tienen como objetivo evitar el aumento de casos de COVID-19, durante esta temporada decembrina.
El pico y cédula empieza desde el jueves 17 de diciembre con números impares, el viernes 18 con impares y así sucesivamente hasta el 22 de diciembre a las 11:59 p.m.. El Toque de queda va desde las 11 de la noche hasta las 5 de la mañana. Asimismo, la ley seca rige desde las 10:00 p.m. hasta las 5:00 a.m.. Todas esas medidas aplican hasta el 23 de diciembre a la cero horas y pueden extenderse dependiendo del comportamiento de los contagios.
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Estas medidas tienen excepciones para personal médico, trabajadores en la producción de eventos como la feria de Cali, casos de fuerza mayor, entre otros. “Entendemos el impacto que tienen estos decretos durante la dinámica de recuperación económica, pero la amenaza del virus nos obliga a hacerlo”, explica Carlos Alberto Rojas, secretario de Seguridad y Justicia de Cali.
Desde la Alcaldía habrá una reunión con comerciantes para llegar a un consenso y buscar estrategias que les permita continuar trabajando sin inconvenientes.
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En la capital de Valle del Cauca, también se declaró la alerta roja sanitaria, precisamente por el aumento de casos de COVID-19. Según la Secretaría de Salud, actualmente, el nivel de ocupación es del 90 %. “Ayer tuvimos una reunión con los directores de clínicas de alta complejidad y ellos mostraron un panorama complejo que, desde la Secretaría de Salud, se ha verificado con visitas en sitio. Nos preocupa la capacidad de respuesta para la comunidad en general”, detalla Miyerlandi Torres, secretaria de Salud de Cali.
Torres asegura que la velocidad de transmisión del virus es muy alta, la cual está por encima de 1,13. “Eso quiere decir que, de 10 personas infectadas, se están contagiando 11 personas nuevas más. No estamos controlando la pandemia, debemos tratar de reducir la velocidad, especialmente para que no afecte a personas con riesgo de complicaciones”, agrega la funcionaria.