“Hubiera preferido que me matara a mí y no a una niña”: esposa de Brayan Campo
La mujer señaló que su esposo le sostuvo hasta el final que no era culpable, así como insiste en que no estaría involucrada en el feminicidio de Sofía Delgado.
Por el feminicidio de Sofía Delgado, de 12 años, las autoridades han señalado a Brayan Campo, confeso asesino, quien terminó dando la ubicación del cañaduzal dónde enterró el cuerpo de la niña, así como a su pareja Evelyn Rodas, quien fue dejada en libertad, pero continúa ligada al proceso. Esta última ha señalado en reiteradas ocasiones, a través de sus redes sociales, que no tenía conocimiento del crimen que cometió su esposo, mientras que en una entrevista a un medio local dio detalles de lo que ha ocurrido en los últimos días.
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“Yo no estoy acostumbrada a esto del encierro”, comienza diciendo Rodas a Jay Alarcón, quien la entrevistó desde el lugar que la mujer se encuentra resguardada ante el temor que le lleguen a hacer algo. Asegura que ha recibido amenazas de personas que viven hasta en México. “Quemaron todo, me dejaron sin nada”, señaló refiriéndose a la casa y la veterinaria que tenía en el municipio de Villagorgona, en Candelaria. “Con esa tienda era que yo sostenía a mi hija. Me quedé sin nada, solo con lo que tenía puesto. Se llevaron hasta mis animales”
Lo que pasó el día de la desaparición de Sofía Delgado
La mujer cuenta que el domingo 29 de septiembre ella salió como cada quincena a mercar. “Solo pasé (a la veterinaria) a las 10:30 de la mañana a dejar una calculadora”. Añade que ese día no se acercó al local, solo hasta el lunes siguiente que ella abrió el negocio y no notó nada extraño dentro del lugar.
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Esa tarde, Rodas señala que Campo le dijo que iría al mecánico, pero en ese momento habría dejado el cuerpo de Sofía Delgado en el cañaduzal. Posteriormente, el sujeto habría vuelto a la casa y no habría tenido ningún comportamiento diferente. “Era completamente normal, nunca me mostró nervios. Todos los domingos veíamos una o dos películas en la noche y eso hicimos. Él nunca me mostró nerviosismo, nunca me mostró nada”, dijo la mujer a Jay Alarcón.
“Me enteré solo al día siguiente de la captura”
Rodas resalta que no sabía nada de lo que pasó. “Yo no me enteraba de nada. Incluso el día de la captura estaba en total negación, porque a mí no me cabía como yo podía estar involucrada en eso”. La mujer explicó que le preguntó a Campo si era responsable del asesinato, a lo que mirándola a los ojos le habría dicho en dos ocasiones que no.
La mujer indicó a Jay Alarcón que luego de los primeros allanamientos, Campo le había asegurado que lo tenían como sospechoso por la anterior acusación de abuso sexual a menor de 14 años, por la que estuvo un año y dos meses en la cárcel. “Él me decía que tenía miedo porque había pagado por una injusticia y ahora tendría que pagar por otra (...). Ellos (la Policía) empezaron a frecuentar todo el día mi casa y me vigilaban todo el tiempo”, afirmó Rodas.
Una vez capturados, la mujer indica que los investigadores le pidieron que le hablara a Campo, que le preguntara si había cometido el feminicidio. En la última ocasión que le preguntó, un día después de la captura, mientras se encontraban esposados en la misma sala, el sujeto miró al suelo y no dijo nada. “Sentía rabia de que fuera cierto. Él nunca me había dicho una mentira así tan grande. Cuando lo vi en esa actitud pedí que me separaran de él, porque yo lo iba a golpear”.
Rodas añade que conocía desde hace ocho años a Campo, que nunca lo vio con una actitud diferente hacia las niñas, incluso con su hija, a la que no se atrevía ni a bañar. La mujer añade que en muchas ocasiones lo dejó solo con la menor de edad, debido a que ella estudiaba en el SENA de Buga.
Asimismo, insistió, como lo ha hecho en los últimos días en sus redes sociales, que es inocente. “Por el hecho de que yo sea la esposa, no quiere decir que yo tenga que responder”. Además, envió un mensaje a la mamá de Sofía Delgado.
“A la señora Lady quiero pedirle una disculpa en nombre de Brayan, porque no me parece justo lo que hizo. Hubiera preferido que me matara a mí y no a una niña, porque yo también soy mamá y también tengo a mi hija y también se llama Sofía”, concluyó.
¿Qué le pasó a Sofía Delgado?
La niña de 12 años desapareció el pasado 29 de septiembre en el corregimiento de Villagorgona, en Candelaria, Valle, cuando salió de la casa de su abuela hacia la vivienda donde vivía con sus papás a buscar un champú para bañar a un perro. Lo último que se conoció de la niña es un video de una cámara de seguridad en la que se ve que ella va caminando con normalidad.
Los días siguientes, tanto la alcaldía de Candelaria como la gobernación del Valle ofrecieron recompensas por su paradero, mientras que la Policía desplegó un operativo en el que participaron más de 70 uniformados que hicieron la búsqueda casa por casa y hasta con drones.
En ese tiempo las autoridades siguieron dos pistas, un carro blanco que estuvo rondando el sector donde desapareció la niña y un comerciante, Brayan Campo, quien el mismo día de la desaparición de Sofía intentó raptar a otra niña de 12 años.
Tras tres allanamientos, las autoridades lograron determinar que fluidos que fueron hallados en zapatos DE Campo y el baño de la veterinaria, correspondían a sangre de Sofía Delgado. A 19 días de la desaparición se conoció que la niña fue enterrada en un cañaduzal por dicho sujeto, quien un día antes fue capturado y confesó lo ocurrido ante las autoridades.
Por el feminicidio de Sofía Delgado, de 12 años, las autoridades han señalado a Brayan Campo, confeso asesino, quien terminó dando la ubicación del cañaduzal dónde enterró el cuerpo de la niña, así como a su pareja Evelyn Rodas, quien fue dejada en libertad, pero continúa ligada al proceso. Esta última ha señalado en reiteradas ocasiones, a través de sus redes sociales, que no tenía conocimiento del crimen que cometió su esposo, mientras que en una entrevista a un medio local dio detalles de lo que ha ocurrido en los últimos días.
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“Yo no estoy acostumbrada a esto del encierro”, comienza diciendo Rodas a Jay Alarcón, quien la entrevistó desde el lugar que la mujer se encuentra resguardada ante el temor que le lleguen a hacer algo. Asegura que ha recibido amenazas de personas que viven hasta en México. “Quemaron todo, me dejaron sin nada”, señaló refiriéndose a la casa y la veterinaria que tenía en el municipio de Villagorgona, en Candelaria. “Con esa tienda era que yo sostenía a mi hija. Me quedé sin nada, solo con lo que tenía puesto. Se llevaron hasta mis animales”
Lo que pasó el día de la desaparición de Sofía Delgado
La mujer cuenta que el domingo 29 de septiembre ella salió como cada quincena a mercar. “Solo pasé (a la veterinaria) a las 10:30 de la mañana a dejar una calculadora”. Añade que ese día no se acercó al local, solo hasta el lunes siguiente que ella abrió el negocio y no notó nada extraño dentro del lugar.
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Esa tarde, Rodas señala que Campo le dijo que iría al mecánico, pero en ese momento habría dejado el cuerpo de Sofía Delgado en el cañaduzal. Posteriormente, el sujeto habría vuelto a la casa y no habría tenido ningún comportamiento diferente. “Era completamente normal, nunca me mostró nervios. Todos los domingos veíamos una o dos películas en la noche y eso hicimos. Él nunca me mostró nerviosismo, nunca me mostró nada”, dijo la mujer a Jay Alarcón.
“Me enteré solo al día siguiente de la captura”
Rodas resalta que no sabía nada de lo que pasó. “Yo no me enteraba de nada. Incluso el día de la captura estaba en total negación, porque a mí no me cabía como yo podía estar involucrada en eso”. La mujer explicó que le preguntó a Campo si era responsable del asesinato, a lo que mirándola a los ojos le habría dicho en dos ocasiones que no.
La mujer indicó a Jay Alarcón que luego de los primeros allanamientos, Campo le había asegurado que lo tenían como sospechoso por la anterior acusación de abuso sexual a menor de 14 años, por la que estuvo un año y dos meses en la cárcel. “Él me decía que tenía miedo porque había pagado por una injusticia y ahora tendría que pagar por otra (...). Ellos (la Policía) empezaron a frecuentar todo el día mi casa y me vigilaban todo el tiempo”, afirmó Rodas.
Una vez capturados, la mujer indica que los investigadores le pidieron que le hablara a Campo, que le preguntara si había cometido el feminicidio. En la última ocasión que le preguntó, un día después de la captura, mientras se encontraban esposados en la misma sala, el sujeto miró al suelo y no dijo nada. “Sentía rabia de que fuera cierto. Él nunca me había dicho una mentira así tan grande. Cuando lo vi en esa actitud pedí que me separaran de él, porque yo lo iba a golpear”.
Rodas añade que conocía desde hace ocho años a Campo, que nunca lo vio con una actitud diferente hacia las niñas, incluso con su hija, a la que no se atrevía ni a bañar. La mujer añade que en muchas ocasiones lo dejó solo con la menor de edad, debido a que ella estudiaba en el SENA de Buga.
Asimismo, insistió, como lo ha hecho en los últimos días en sus redes sociales, que es inocente. “Por el hecho de que yo sea la esposa, no quiere decir que yo tenga que responder”. Además, envió un mensaje a la mamá de Sofía Delgado.
“A la señora Lady quiero pedirle una disculpa en nombre de Brayan, porque no me parece justo lo que hizo. Hubiera preferido que me matara a mí y no a una niña, porque yo también soy mamá y también tengo a mi hija y también se llama Sofía”, concluyó.
¿Qué le pasó a Sofía Delgado?
La niña de 12 años desapareció el pasado 29 de septiembre en el corregimiento de Villagorgona, en Candelaria, Valle, cuando salió de la casa de su abuela hacia la vivienda donde vivía con sus papás a buscar un champú para bañar a un perro. Lo último que se conoció de la niña es un video de una cámara de seguridad en la que se ve que ella va caminando con normalidad.
Los días siguientes, tanto la alcaldía de Candelaria como la gobernación del Valle ofrecieron recompensas por su paradero, mientras que la Policía desplegó un operativo en el que participaron más de 70 uniformados que hicieron la búsqueda casa por casa y hasta con drones.
En ese tiempo las autoridades siguieron dos pistas, un carro blanco que estuvo rondando el sector donde desapareció la niña y un comerciante, Brayan Campo, quien el mismo día de la desaparición de Sofía intentó raptar a otra niña de 12 años.
Tras tres allanamientos, las autoridades lograron determinar que fluidos que fueron hallados en zapatos DE Campo y el baño de la veterinaria, correspondían a sangre de Sofía Delgado. A 19 días de la desaparición se conoció que la niña fue enterrada en un cañaduzal por dicho sujeto, quien un día antes fue capturado y confesó lo ocurrido ante las autoridades.