El paro armado y las críticas a la inteligencia del Estado
Desde las regiones cuestionan la estrategia de seguridad del gobierno Duque y las acciones del Eln en la primera jornada del paro. Un congresista afirma que esta guerrilla ataca cobardemente en zonas donde no hay Fuerza Pública.
Diecisiete acciones armadas ejecutó la guerrilla del Eln durante el primero de los cuatro días del paro armado declarado por el Eln, según un balance preliminar del Observatorio de Indepaz. Por lo menos ocho personas resultaron heridas y un perro entrenado en detección de explosivos murió en Cúcuta. Los departamentos más afectados fueron Santander, Norte de Santander, Cesar, Valle del Cauca y Cauca.
(Lo invitamos a leer: Fronteras de Colombia: entre la migración, la violencia y el abandono)
Al comenzar la jornada de este miércoles el ministro de Defensa, Diego Molano, dijo que faltando 20 días para las elecciones “los terroristas del Eln anuncian paro armado y después un candidato habla de darles perdón social (…) Aquí no van a amedrentar a los colombianos para que luego otros los perdonen”, y señaló que “a los terroristas se les combate con decisión y contundencia”.
Contundencia que para algunos no se vio en el terreno. El hecho más grave se registró en la vía San Gil-Socorro, en el departamento de Santander, donde fue abandonado un artefacto que minutos después explotó dejando a lesionados a seis miembros del Instituto Nacional de Vías (Invias).
Otro ataque en la vía pública ocurrió en la zona rural de Pailitas (Cesar), donde fueron detonados unos explosivos que afectaron el puente Los Trujillos. Entretanto, en la vía Panamericana, entre Popayán y Cali, a la altura de la vereda El Descanso, en Caldono (Cauca), un vehículo de carga fue incinerado en un aparente retén armado.
En Cali, mientras tanto, se reportó la alteración en el servicio del transporte público desde esa ciudad hacia las rutas del sur del país debido a la afectación en el orden público. En Guapi (Cauca), guerrilleros del Eln quemaron dos embarcaciones.
Con ese escenario, para Fernando Quijano, director de la Corporación para la Paz y el Desarrollo Social (Corpades), en Medellín, “la pregunta que debemos hacernos es: ¿Por qué el Gobierno Nacional no tomó las medidas suficientes en las principales vías del país? Este paro armado apenas comienza y este miércoles hubo caída de puentes, personas heridas y camiones dañados. ¿Qué pasará mañana? ¿Dónde están las Fuerzas Militares, la Policía, la inteligencia y la estrategia de seguridad del Estado?
Wilfredo Cañizares, defensor de derechos humanos y director de la Fundación Progresar, en Cúcuta, aseguró que no tiene dudas de que el paro armado afectará el proceso electoral y que en 15 de los 40 municipios de Norte de Santander se va a menguar la participación ciudadana por la cada vez más visible presencia armada de diversos actores. Y esto paralelo a las acciones violentas contra candidatos que han sido vetados en algunos territorios y municipios. “Eso afectará la posibilidad de que la gente salga normalmente a votar”.
Añadió que lo que está ocurriendo no es nuevo en Norte de Santander, pues es “consecuencia directa de no haber garantizado la implementación del Acuerdo de Paz, no haber mantenido la posibilidad de un diálogo con el Eln y, bueno, por el fracaso de este Gobierno en su estrategia de seguridad, lo que ha llevado al fortalecimiento de todas las estructuras ilegales: Eln o el Clan del Golfo, actores que en Norte de Santander están desbordados”.
A los anteriores cuestionamientos le salió al paso el representante a la Cámara Édward Rodríguez (Centro Democrático), quien responde que pese a que el paro armado estaba anunciado, el “Eln les ha apostado a muchas cosas, como darle duro a Bogotá, pero esa y otras acciones han sido neutralizadas. No obstante, las acciones que han tenido son cobardes y alejadas de donde está la Fuerza Pública. Por ejemplo, volar un puente en Pailitas (Cesar), que por inteligencia se debería saber, pero el territorio colombiano es muy difícil”.
Diecisiete acciones armadas ejecutó la guerrilla del Eln durante el primero de los cuatro días del paro armado declarado por el Eln, según un balance preliminar del Observatorio de Indepaz. Por lo menos ocho personas resultaron heridas y un perro entrenado en detección de explosivos murió en Cúcuta. Los departamentos más afectados fueron Santander, Norte de Santander, Cesar, Valle del Cauca y Cauca.
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Al comenzar la jornada de este miércoles el ministro de Defensa, Diego Molano, dijo que faltando 20 días para las elecciones “los terroristas del Eln anuncian paro armado y después un candidato habla de darles perdón social (…) Aquí no van a amedrentar a los colombianos para que luego otros los perdonen”, y señaló que “a los terroristas se les combate con decisión y contundencia”.
Contundencia que para algunos no se vio en el terreno. El hecho más grave se registró en la vía San Gil-Socorro, en el departamento de Santander, donde fue abandonado un artefacto que minutos después explotó dejando a lesionados a seis miembros del Instituto Nacional de Vías (Invias).
Otro ataque en la vía pública ocurrió en la zona rural de Pailitas (Cesar), donde fueron detonados unos explosivos que afectaron el puente Los Trujillos. Entretanto, en la vía Panamericana, entre Popayán y Cali, a la altura de la vereda El Descanso, en Caldono (Cauca), un vehículo de carga fue incinerado en un aparente retén armado.
En Cali, mientras tanto, se reportó la alteración en el servicio del transporte público desde esa ciudad hacia las rutas del sur del país debido a la afectación en el orden público. En Guapi (Cauca), guerrilleros del Eln quemaron dos embarcaciones.
Con ese escenario, para Fernando Quijano, director de la Corporación para la Paz y el Desarrollo Social (Corpades), en Medellín, “la pregunta que debemos hacernos es: ¿Por qué el Gobierno Nacional no tomó las medidas suficientes en las principales vías del país? Este paro armado apenas comienza y este miércoles hubo caída de puentes, personas heridas y camiones dañados. ¿Qué pasará mañana? ¿Dónde están las Fuerzas Militares, la Policía, la inteligencia y la estrategia de seguridad del Estado?
Wilfredo Cañizares, defensor de derechos humanos y director de la Fundación Progresar, en Cúcuta, aseguró que no tiene dudas de que el paro armado afectará el proceso electoral y que en 15 de los 40 municipios de Norte de Santander se va a menguar la participación ciudadana por la cada vez más visible presencia armada de diversos actores. Y esto paralelo a las acciones violentas contra candidatos que han sido vetados en algunos territorios y municipios. “Eso afectará la posibilidad de que la gente salga normalmente a votar”.
Añadió que lo que está ocurriendo no es nuevo en Norte de Santander, pues es “consecuencia directa de no haber garantizado la implementación del Acuerdo de Paz, no haber mantenido la posibilidad de un diálogo con el Eln y, bueno, por el fracaso de este Gobierno en su estrategia de seguridad, lo que ha llevado al fortalecimiento de todas las estructuras ilegales: Eln o el Clan del Golfo, actores que en Norte de Santander están desbordados”.
A los anteriores cuestionamientos le salió al paso el representante a la Cámara Édward Rodríguez (Centro Democrático), quien responde que pese a que el paro armado estaba anunciado, el “Eln les ha apostado a muchas cosas, como darle duro a Bogotá, pero esa y otras acciones han sido neutralizadas. No obstante, las acciones que han tenido son cobardes y alejadas de donde está la Fuerza Pública. Por ejemplo, volar un puente en Pailitas (Cesar), que por inteligencia se debería saber, pero el territorio colombiano es muy difícil”.