Investigan ataque cibernético que afectó dirección de tránsito en Bucaramanga

Continúa el debate por el ataque informático que afectó los servicios que ofrece a la ciudadanía la Dirección de Tránsito de Bucaramanga (DTB) y que se presentó a comienzos de septiembre. Tras hacer la denuncia ante la Fiscalía, se conoció una comunicación interna sobre justificaciones que se han dado sobre lo que pasó y que sigue afectando los servicios de la entiad.

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En el documento, revelado por Blu Radio, el director general de Tránsito, Carlos Bueno Cadena, se refiere a documentos y cadenas en Whatsapp en las que el exjefe de la Oficina Asesora de Sistemas de la Dirección de Tránsito, Hollman Tarazona, pretendería eximirse de responsabilidades y trasladarlas a otros directivos de la entidad. Bueno calificó estas acciones como reprochables, ya que Tarazona utilizó papelería oficial de la institución cuando ya no ocupaba el cargo, lo que consideró una falta de ética.

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En su informe, detalla que la DTB había anticipado la necesidad de reforzar su seguridad informática desde finales de 2023. Tan solo este año, señala, se asignaron más de 810 millones de pesos para la adquisición de un software destinado a la protección de los datos y sistemas de la entidad. “A lo largo de este año, se realizaron varios traslados de recursos que permitieron incrementar el presupuesto para la compra y puesta en marcha de las herramientas tecnológicas necesarias para mejorar la seguridad de la información”, explicó Bueno.

Además, destacó que desde que Tarazona asumió su cargo en marzo, se le asignaron los recursos necesarios para fortalecer la seguridad informática de la DTB. Pero a pesar de contar con los recursos disponibles, Tarazona no avanzó en la formulación definitiva del proyecto ni en la gestión contractual requerida para implementar las soluciones de seguridad.

A finales de agosto, días antes del ataque cibernético, Tarazona solicitó a la Oficina Asesora de Planeación la inclusión de algunos elementos en el proyecto de “Fortalecimiento” de la seguridad informática, como la compra de unidades de alimentación ininterrumpida (UPS), discos duros y sistemas de seguridad para las bases de datos. El 26 de agosto, la DTB contrató a un experto en seguridad informática para reforzar las defensas digitales de la entidad, pero el ataque se produjo una semana después.

El 2 de septiembre, tras confirmarse el ataque cibernético, Carlos Bueno presentó la denuncia ante la Fiscalía, así como la Dirección de Tránsito activó un plan de contingencia para mitigar el impacto del sabotaje en los servicios prestados a los usuarios. Según el informe, el ataque afectó la base de datos y otros sistemas de la entidad.

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Bueno subrayó que su administración había tomado las medidas necesarias para garantizar la seguridad informática de la DTB, pero que la falta de acción oportuna por parte de la Oficina Asesora de Sistemas contribuyó a la vulnerabilidad de los sistemas. “Desde el momento en que asumió el cargo, el ingeniero Hollman Tarazona dispuso de los recursos necesarios para llevar a cabo los procesos contractuales y ejecutar las soluciones tecnológicas que él mismo propuso, pero no hubo avances significativos”, afirmó.

No es el primer escándalo al que se enfrenta el DTB, ya que hace más de un año Carlos Bueno había denunciado ante la Fiscalía la posible existencia de una red de corrupción dentro de la entidad, luego de que una auditoría de la Contraloría Municipal identificó irregularidades en algunos procesos administrativos.

Ahora, los especialistas en delitos cibernéticos de la Fiscalía ya han comenzado a realizar peritajes y análisis de los sistemas afectados, con el fin de determinar cómo se produjo el ataque y quiénes podrían estar detrás del mismo. Mientras que la DTB ha comenzado a recuperar gradualmente la operatividad de sus sistemas y continúa implementando medidas de seguridad.

Continúa el debate por el ataque informático que afectó los servicios que ofrece a la ciudadanía la Dirección de Tránsito de Bucaramanga (DTB) y que se presentó a comienzos de septiembre. Tras hacer la denuncia ante la Fiscalía, se conoció una comunicación interna sobre justificaciones que se han dado sobre lo que pasó y que sigue afectando los servicios de la entiad.

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En el documento, revelado por Blu Radio, el director general de Tránsito, Carlos Bueno Cadena, se refiere a documentos y cadenas en Whatsapp en las que el exjefe de la Oficina Asesora de Sistemas de la Dirección de Tránsito, Hollman Tarazona, pretendería eximirse de responsabilidades y trasladarlas a otros directivos de la entidad. Bueno calificó estas acciones como reprochables, ya que Tarazona utilizó papelería oficial de la institución cuando ya no ocupaba el cargo, lo que consideró una falta de ética.

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En su informe, detalla que la DTB había anticipado la necesidad de reforzar su seguridad informática desde finales de 2023. Tan solo este año, señala, se asignaron más de 810 millones de pesos para la adquisición de un software destinado a la protección de los datos y sistemas de la entidad. “A lo largo de este año, se realizaron varios traslados de recursos que permitieron incrementar el presupuesto para la compra y puesta en marcha de las herramientas tecnológicas necesarias para mejorar la seguridad de la información”, explicó Bueno.

Además, destacó que desde que Tarazona asumió su cargo en marzo, se le asignaron los recursos necesarios para fortalecer la seguridad informática de la DTB. Pero a pesar de contar con los recursos disponibles, Tarazona no avanzó en la formulación definitiva del proyecto ni en la gestión contractual requerida para implementar las soluciones de seguridad.

A finales de agosto, días antes del ataque cibernético, Tarazona solicitó a la Oficina Asesora de Planeación la inclusión de algunos elementos en el proyecto de “Fortalecimiento” de la seguridad informática, como la compra de unidades de alimentación ininterrumpida (UPS), discos duros y sistemas de seguridad para las bases de datos. El 26 de agosto, la DTB contrató a un experto en seguridad informática para reforzar las defensas digitales de la entidad, pero el ataque se produjo una semana después.

El 2 de septiembre, tras confirmarse el ataque cibernético, Carlos Bueno presentó la denuncia ante la Fiscalía, así como la Dirección de Tránsito activó un plan de contingencia para mitigar el impacto del sabotaje en los servicios prestados a los usuarios. Según el informe, el ataque afectó la base de datos y otros sistemas de la entidad.

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Bueno subrayó que su administración había tomado las medidas necesarias para garantizar la seguridad informática de la DTB, pero que la falta de acción oportuna por parte de la Oficina Asesora de Sistemas contribuyó a la vulnerabilidad de los sistemas. “Desde el momento en que asumió el cargo, el ingeniero Hollman Tarazona dispuso de los recursos necesarios para llevar a cabo los procesos contractuales y ejecutar las soluciones tecnológicas que él mismo propuso, pero no hubo avances significativos”, afirmó.

No es el primer escándalo al que se enfrenta el DTB, ya que hace más de un año Carlos Bueno había denunciado ante la Fiscalía la posible existencia de una red de corrupción dentro de la entidad, luego de que una auditoría de la Contraloría Municipal identificó irregularidades en algunos procesos administrativos.

Ahora, los especialistas en delitos cibernéticos de la Fiscalía ya han comenzado a realizar peritajes y análisis de los sistemas afectados, con el fin de determinar cómo se produjo el ataque y quiénes podrían estar detrás del mismo. Mientras que la DTB ha comenzado a recuperar gradualmente la operatividad de sus sistemas y continúa implementando medidas de seguridad.