Abuelo habló de lo que los niños rescatados en la selva le han contado
Narciso Mucutuy dio detalles de lo que ocurrió los primeros días después del accidente, de cómo los menores de edad se escondían del equipo de búsqueda y del momento del reencuentro.
Los cuatro niños rescatados de la selva de Caquetá permanecen en el Hospital Militar de Bogotá, donde estarán entre dos y tres semanas en recuperación. Los menores de edad pasaron cuarenta días solos, tras el accidente de la aeronave tipo Cessna en la que se movilizaban con un líder indígena y su mamá hacia San José del Guaviare, por lo que pese a que no tienen problemas que pongan en riesgo su vida, son atendidos desnutrición y deshidratación.
En medio de esto, Narciso Mucutuy, abuelo de los niños, aclaró un punto que ha sido controversial en los últimos días y es que su hija, Magdalena Mucutuy, no sobrevivió al accidente. “Cuando ella miró (Lesly) de que la mamá estaba muerto, miró las paticas de la hermanita pequeñita y el montón de los que tres muertos y la jaló y la sacó”.
Momentos después, vio a los otros dos pequeños golpeados y abrió la maleta de la mamá para sacar ropa y envolver al bebé para poder alzarlo. “Mi primo (el líder Herman Mendoza) llevaba tres libras de fariña, entonces ellas se cogieron eso y se quedaron cuatro días alrededor del avión esperando si alguien las llegaba a recoger”.
Luego de eso decidieron alejarse de la aeronave y buscar salida de la selva. “Ya con el tiempo fueron dejando las cosas para que si alguien las buscaba, los encontrara. Ellos fueron dejando cosas donde iban durmiendo”.
Asimismo, explicó que Lesly intentó racionar el tetero de Cristin (un año) que logró sacar de la aeronave. “Ella le daba poquitico hasta que se acabó, de ahí la mantuvo a punta de agua”, pero sus fuerzas se debilitaron la última semana. Ya no podían caminar. “Ella estaba muy cansadita, entonces se amontonaron en un solo lugar y se sentaron”.
Sobre la búsqueda, indicó que los niños nunca le temieron a la selva, pero sí a que los encontraran, por lo que cuando oían un helicóptero se metían bajo palizadas para que no los vieran, “cuando pasaban los paisanos y el Ejército, ella (Lesly) cuenta que pasaban a 10 metros y ella le tapaba la boca al pequeñito para que no llorara (…) Porque pensaba que si los encontraban, les iban a dar juete a ellos por esconderse, por eso no contestaban”.
El reencuentro fue especial. Abrazaron a Narciso y le decían papá, pedían irse, pero él les explicó que los médicos los tenían que revisar por el tiempo que estuvieron en la selva. “Después van a quedar en manos del Bienestar Familiar y después de eso vamos a llegar a un acuerdo para que nos hagan la entrega”.
Esta parte de la historia es la que ha estado en controversia. El papá de las dos niñas menores, Manuel Ranoque, ha entrado en disputa con la familia materna de las niñas, por varias afirmaciones. La principal es que el padre de los niños menores aseguró que Lesly le indicó que su mamá vivió cuatro días antes de morir, lo que desmintió Narciso.
“Eso es mentira, porque la misma niña (Lesly) dice que los tres (adultos) ahí mismo, cuando cayó la avioneta, quedaron muertos. Si la persona que dijo que mi hija Magdalena quedó viva tres o cuatro días, eso es mentira, porque en ese momento quién los miró para decir que está viva, eso es mentira”, dijo a la revista Semana.
A la par, este lunes Ranoque aseguró que solo le han dejado ver a sus hijos biológicos, es decir, a los dos niños menores, por lo que también se cuestiona la primera versión que dio de lo que supuestamente dijo Lesly sobre su mamá. Pero eso no es todo. A esto se suman las acusaciones que Ranoque hizo contra la guardia indígena, de quienes señaló le estaban pidiendo dinero por su ayuda en la búsqueda, en respuesta los indígenas que apoyaron el operativo indicaron que lo hicieron por voluntad y no a la espera de un pago.
Por último, están las denuncias por presunto abuso sexual, amenazas y violencia intrafamiliar, que ha señalado la familia de Magdalena Mucutuy. En respuesta, Ranoque ha dicho que las dos niñas mayores las trata como a sus hijas y la pelea con la familia materna sería económica.
Aunque con respecto a la violencia intrafamiliar, ha sido vehemente en decir que “los problemas de hogares, los problemas familiares, eso es entre marido y mujer, eso no es un chisme para el mundo”, así como con respecto a la violencia, indicó que “físicamente muy poco, porque nosotros teníamos más problemas de palabra”.
Los cuatro niños rescatados de la selva de Caquetá permanecen en el Hospital Militar de Bogotá, donde estarán entre dos y tres semanas en recuperación. Los menores de edad pasaron cuarenta días solos, tras el accidente de la aeronave tipo Cessna en la que se movilizaban con un líder indígena y su mamá hacia San José del Guaviare, por lo que pese a que no tienen problemas que pongan en riesgo su vida, son atendidos desnutrición y deshidratación.
En medio de esto, Narciso Mucutuy, abuelo de los niños, aclaró un punto que ha sido controversial en los últimos días y es que su hija, Magdalena Mucutuy, no sobrevivió al accidente. “Cuando ella miró (Lesly) de que la mamá estaba muerto, miró las paticas de la hermanita pequeñita y el montón de los que tres muertos y la jaló y la sacó”.
Momentos después, vio a los otros dos pequeños golpeados y abrió la maleta de la mamá para sacar ropa y envolver al bebé para poder alzarlo. “Mi primo (el líder Herman Mendoza) llevaba tres libras de fariña, entonces ellas se cogieron eso y se quedaron cuatro días alrededor del avión esperando si alguien las llegaba a recoger”.
Luego de eso decidieron alejarse de la aeronave y buscar salida de la selva. “Ya con el tiempo fueron dejando las cosas para que si alguien las buscaba, los encontrara. Ellos fueron dejando cosas donde iban durmiendo”.
Asimismo, explicó que Lesly intentó racionar el tetero de Cristin (un año) que logró sacar de la aeronave. “Ella le daba poquitico hasta que se acabó, de ahí la mantuvo a punta de agua”, pero sus fuerzas se debilitaron la última semana. Ya no podían caminar. “Ella estaba muy cansadita, entonces se amontonaron en un solo lugar y se sentaron”.
Sobre la búsqueda, indicó que los niños nunca le temieron a la selva, pero sí a que los encontraran, por lo que cuando oían un helicóptero se metían bajo palizadas para que no los vieran, “cuando pasaban los paisanos y el Ejército, ella (Lesly) cuenta que pasaban a 10 metros y ella le tapaba la boca al pequeñito para que no llorara (…) Porque pensaba que si los encontraban, les iban a dar juete a ellos por esconderse, por eso no contestaban”.
El reencuentro fue especial. Abrazaron a Narciso y le decían papá, pedían irse, pero él les explicó que los médicos los tenían que revisar por el tiempo que estuvieron en la selva. “Después van a quedar en manos del Bienestar Familiar y después de eso vamos a llegar a un acuerdo para que nos hagan la entrega”.
Esta parte de la historia es la que ha estado en controversia. El papá de las dos niñas menores, Manuel Ranoque, ha entrado en disputa con la familia materna de las niñas, por varias afirmaciones. La principal es que el padre de los niños menores aseguró que Lesly le indicó que su mamá vivió cuatro días antes de morir, lo que desmintió Narciso.
“Eso es mentira, porque la misma niña (Lesly) dice que los tres (adultos) ahí mismo, cuando cayó la avioneta, quedaron muertos. Si la persona que dijo que mi hija Magdalena quedó viva tres o cuatro días, eso es mentira, porque en ese momento quién los miró para decir que está viva, eso es mentira”, dijo a la revista Semana.
A la par, este lunes Ranoque aseguró que solo le han dejado ver a sus hijos biológicos, es decir, a los dos niños menores, por lo que también se cuestiona la primera versión que dio de lo que supuestamente dijo Lesly sobre su mamá. Pero eso no es todo. A esto se suman las acusaciones que Ranoque hizo contra la guardia indígena, de quienes señaló le estaban pidiendo dinero por su ayuda en la búsqueda, en respuesta los indígenas que apoyaron el operativo indicaron que lo hicieron por voluntad y no a la espera de un pago.
Por último, están las denuncias por presunto abuso sexual, amenazas y violencia intrafamiliar, que ha señalado la familia de Magdalena Mucutuy. En respuesta, Ranoque ha dicho que las dos niñas mayores las trata como a sus hijas y la pelea con la familia materna sería económica.
Aunque con respecto a la violencia intrafamiliar, ha sido vehemente en decir que “los problemas de hogares, los problemas familiares, eso es entre marido y mujer, eso no es un chisme para el mundo”, así como con respecto a la violencia, indicó que “físicamente muy poco, porque nosotros teníamos más problemas de palabra”.