Armada investiga incursión de piratas en aguas colombianas
El pasado lunes 28 de noviembre presuntos nicaragüenses robaron dos toneladas de langostas a una embarcación nacional. Habitantes de San Andrés indican que no es el primer caso que denuncian.
Las autoridades colombianas pidieron apoyo a los países fronterizos a los cayos de Roncador y Quitasueño, luego de que esta semana se dio a conocer el robo a una motonave colombiana, por presuntos asaltantes nicaragüenses que se levaron cerca de dos toneladas de langosta y equipos de navegación.
Las víctimas fueron los pescadores que se encontraban en la nave Mar Azul, en área general del cayo Quitasueño, en la madrugada del lunes 28 de noviembre. Según indicó Cristian Harvey Corpus, dueño del bote pesquero, a medios locales, “se encontraban por la boya sur del norte, donde fueron víctimas por nicaragüenses que los abordaron con AK47, que se subieron a la aeronave e intimidaron a la tripulación, con la intención de asesinarlos para llevarse el barco y el producido, pero en últimas no pusieron resistencia”.
Sumado a esto, Corpus alerta que la presencia de los nicaragüenses en la zona es permanente y de hecho asegura que lo que hacen es parquear una embarcación madre, del lado del país centroamericano, y salen a pescar y delinquir en lanchas rápidas que despliegan del lado colombiano, por lo que piden patrullajes constantes en Quitasueño.
Ante lo ocurrido, la Armada señaló que dio atención a la emergencia una vez se conoció del posible asalto por parte de la torre de control de la Capitanía del Puerto. “La motonave tuvo conocimiento de un abordaje por parte de siete hombres armados que se movilizaban en otra embarcación, quienes les habrían robado el producto de la pesca diaria equivalente a dos toneladas de langosta, dos motores, equipos de navegación y comunicación, así como pertenencias de la tripulación”.
Por ello, aseguran que se desplegaron en la zona y dieron con el paradero de la embarcación, en la que corroboraron que no hubo afectación a los tripulantes, mientras que, a la par, activaron operaciones para dar con los responsables y los elementos hurtados.
“El comando específico ha tomado las medidas, estableciendo comunicación con las autoridades cercanas de Nicaragua, Costa Rica y Honduras, con el fin de verificar la situación y tomar aciones pertinentes para encontrar lo hurtado. Ya el comando específico está tomando las medidas y la notificación de una posible violación de frontera”, indicó el capitán de Navío Octavio Alberto Gutiérrez Herrera, Comandante del Comando Específico de San Andrés y Providencia.
Las autoridades colombianas pidieron apoyo a los países fronterizos a los cayos de Roncador y Quitasueño, luego de que esta semana se dio a conocer el robo a una motonave colombiana, por presuntos asaltantes nicaragüenses que se levaron cerca de dos toneladas de langosta y equipos de navegación.
Las víctimas fueron los pescadores que se encontraban en la nave Mar Azul, en área general del cayo Quitasueño, en la madrugada del lunes 28 de noviembre. Según indicó Cristian Harvey Corpus, dueño del bote pesquero, a medios locales, “se encontraban por la boya sur del norte, donde fueron víctimas por nicaragüenses que los abordaron con AK47, que se subieron a la aeronave e intimidaron a la tripulación, con la intención de asesinarlos para llevarse el barco y el producido, pero en últimas no pusieron resistencia”.
Sumado a esto, Corpus alerta que la presencia de los nicaragüenses en la zona es permanente y de hecho asegura que lo que hacen es parquear una embarcación madre, del lado del país centroamericano, y salen a pescar y delinquir en lanchas rápidas que despliegan del lado colombiano, por lo que piden patrullajes constantes en Quitasueño.
Ante lo ocurrido, la Armada señaló que dio atención a la emergencia una vez se conoció del posible asalto por parte de la torre de control de la Capitanía del Puerto. “La motonave tuvo conocimiento de un abordaje por parte de siete hombres armados que se movilizaban en otra embarcación, quienes les habrían robado el producto de la pesca diaria equivalente a dos toneladas de langosta, dos motores, equipos de navegación y comunicación, así como pertenencias de la tripulación”.
Por ello, aseguran que se desplegaron en la zona y dieron con el paradero de la embarcación, en la que corroboraron que no hubo afectación a los tripulantes, mientras que, a la par, activaron operaciones para dar con los responsables y los elementos hurtados.
“El comando específico ha tomado las medidas, estableciendo comunicación con las autoridades cercanas de Nicaragua, Costa Rica y Honduras, con el fin de verificar la situación y tomar aciones pertinentes para encontrar lo hurtado. Ya el comando específico está tomando las medidas y la notificación de una posible violación de frontera”, indicó el capitán de Navío Octavio Alberto Gutiérrez Herrera, Comandante del Comando Específico de San Andrés y Providencia.